Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ ¹⁸

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Minho permanecía de pie caminando en la entrada de la empresa de Jeongin y Jisung – esperando al último mencionado – quien llevaba casi veinte minutos de retraso

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Minho permanecía de pie caminando en la entrada de la empresa de Jeongin y Jisung – esperando al último mencionado – quien llevaba casi veinte minutos de retraso.

Había sido una tarde ajetreada para el alfa, quien terminó una coreografía en tiempo récord e indaga sobre buenas opciones universitarias además de soportar el mal carácter de Hyunjin a través de una llamada la cual primero era para Jeongin, pero debido a un arranque de celos por Hyunjin se integró, ya que cierto omega presente en la llamada se negaba a dársela. Todo terminó cuando Hyunjin le dio la dirección de la empresa con exactitud y cortó rápidamente sin dejar que Minho le agradeciera, sin embargo, a Hyunjin no pudo importarle menos.

No se molestó con el menor, sin embargo, apenas lo volviera a ver se encargaría de quejarse por ser tratado de mala forma cuando él es el mayor.

Aseguró tener su mochila por casi novena vez, rezando para que todos los papeles que guardo antes de salir de su trabajo continuarán sanos y a salvo entre todos los cuadernos y carpetas que traían consigo.

No sabía si lo estaba haciendo bien al tener todos aquellos datos para Jisung, pero quería hacer algo bueno por el omega que soñaba cortejar. Aunque, todavía pensaba en cómo confesarle sin tener problema alguno todos los sentimientos que tiene por el menor.

   –¡Minho hyung! – un gritó algo ahogado hizo que sus pensamientos fueron desechados a un lejano lugar para prestar atención a esa dulce personita que venía corriendo hacia él cómo un niño de primaria al salir de sus clases, quien a penas llegar a su lado sin vergüenza se lanzó a sus brazos mientras que con un notable puchero se disculpaba reiteradas veces.

El alfa sonrió, imaginándose lo similar que sería algún día si el omega fuera suyo, cuando luego de tanto al fin pudiera llamarlo su novio y quizás también portará en su cuello una bonita marca que los uniría a los dos en un lazo únicamente formado por amor.

Olvidándose de todo lo demás, dirigió su mano hacía las hebras del omega que reposaba su cabeza sobre su pecho y acarició con dulzura a la vez que una sonrisa se hacía presente en sus labios.

   –¿Qué sucedió Sunggie? – habló con suavidad encargándose de no dejar de mimar a su menor.

   –Lo siento, te hice esperar mucho pero el productor no nos quería dejar salir porq- se calló sin terminar su explicación al sentir como el alfa lo envolvía en sus brazos logrando oler el aroma que emanaba donde mismo provenía, donde era más fuerte y lo arrastraba a un mundo de tranquilidad.

   –Sunggie no te preocupes, yo soy capaz de esperarte todo el tiempo del universo si hace falta.

   –Hyung – murmuró Jisung terminando de comer el kimchi que Minho preparó hace minutos atrás, sintiéndose totalmente satisfecho

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   –Hyung – murmuró Jisung terminando de comer el kimchi que Minho preparó hace minutos atrás, sintiéndose totalmente satisfecho. Observó como ahora el alfa lo miraba demostrando toda su atención puesta en él –. ¿Por qué en la mañana dijiste que pasarías por mí? – preguntó liberándose de esa duda que lo carcomía desde que se había despedido del mayor en la mañana.

No hubo respuesta, pero el alfa se levantó de su sitio y fue en busca de su mochila la cual reposaba en uno de los sillones cerca al par. Lo tomó y volvió a su lugar para alejar los trastes sucios a un lugar apartado de la mesa para finalmente sacar una carpeta y extenderla hacia Jisung indicando con esa simple acción que revisará su contenido.

   –¿Es-esto es? - consiguió decir por lo bajo el omega al sentir como temblaba por lo que decía en los papeles.

   –Estuve buscando algunas opciones, conseguí solo tres pero por lo que han dicho son universidades aceptables para estudiar. Están todos los datos de la carrera que te gusta y las pruebas para ingreso son en dos meses más. Tiempo suficiente para estudiar y repasar algunas cosas de la secundaria – comentó señalando las partes necesarias en el papel –. Puede que no sea mucho, pero me gustaría que lograrás cumplir uno de tus sueños y por lo mismo te entregué todo esto, porque quiero que sepas que estoy aquí para apoyarte y ayudarte en lo que necesites. Incluso más que eso.

   –Pe-ro yo no pue-do – murmuró sintiendo sus ojos cristalizarse por la preocupación y también detallé de Minho, uniendo la mirada con el alfa sin deseos de apartarla nunca.

   –Sí Jisung, tú eres muy capaz de conseguir todo lo que deseas – respondió acercando su mano para acariciar la mejilla del omega, sintiendo lo caliente que estaba seguramente por sus palabras.

Ambos mantenían sus ojos puestos sobre el otro, observando, queriendo ver más allá de lo que estos reflejaban el anhelo de ver el alma que tenían sintiendo sus lobos revoloteando en el cariño que comenzaba a existir en ellos sabiendo que algún que algún día lograría convertirse en amor.

Jisung no se resistió más y volvió a abrazar a Minho enredando sus brazos en la calidez del cuello del alfa mientras que escondía su rostro en ese mismo lugar soltando con libertad unas cuantas lágrimas.

   –En serio, muchas gracias hyung. Gracias por creer en mí – sollozó dejándose llevar por los brazos de Minho quien lo sostuvo y lo sentó en su regazo, repitiendo caricias intentando calmarlo para que no continuará llorando más.

Y Jisung estando ahí sintiendo el aroma de Minho cubriéndolo, sabiendo que estaba bien.

Que Minho era más que una simple atracción.

Sabía que lo quería a tal punto de desear estar siempre a su lado, que lo quería y que le gustaba demasiado como quería y le gustaba demasiado como para querer ser más que un simple amigo, quería más de él que un simple abrazo. Jisung quería todo.

Quería ser su pareja.

Hola ardillitas, vengo con un nuevo capitulo

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Hola ardillitas, vengo con un nuevo capitulo.
Y vengo a avisarles que subí el prólogo de una nueva adaptación por si quieren ir a leerla.

Buenos nos leemos en el próximo capítulo.

𝑫𝒆𝒕𝒓𝒂́𝒔 𝒕𝒖𝒚𝒐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora