—¿Puedo hablar contigo fuera un minuto?
Hansel asintió y Jonah giró sobre sus talones con rapidez para dirigirse hacia la
puerta, no sin antes echarle una mirada al lord de pelo rizado para que lo
siguiera. Éste fue tras él de inmediato, aunque Evelyn notó que lo hacía con
cierta reticencia.
Antes de irse, Hansel le dedicó a la muchacha una amable sonrisa, casi angelical,
que pretendía ser a la vez de disculpa y de confirmación de que todo iría bien. Al
instante, ella entendió su significado: era una despedida, como si Hansel supiera
que no volverían a verse.
Apartó los ojos de él y se fijó en Jonah, que con la cabeza ladeada observaba
disimuladamente la despedida de ambos. «¿Puedo hablar contigo fuera un
minuto?». La voz de Jonah retumbaba en los oídos de Evelyn, y en ella pudo
discernir una nota de autoridad y de furia.
No sabía qué estaba pasando, pero la expresión amenazadora con la que Jonah
los había mirado —la que usaba siempre con ella pero que nunca le había visto
utilizar con Hansel: a él siempre lo miraba con respeto e incluso con adoración — le hizo intuir que algo no iba bien. Además, Hansel se había comportado de
una forma muy rara con ella esa mañana. Cuando Jonah había entrado en la
habitación, se había apartado de ella como si los hubiera atrapado en una actitud
comprometedora. Incluso había visto cómo le temblaban las manos. —No puedes llevártelo —se atrevió a decir en voz alta justo cuando Hansel salía
de la habitación. Intentó que su voz sonara fuerte y autoritaria, como sonaba
siempre la de Atticus, pero no lo consiguió. Sonó débil, quebradiza, como la de
una niña aterrorizada; lo que era en realidad, al menos ante Jonah. —Y ¿por qué no? —oyó que contestaba el vampiro en un tono brusco y frío que
hizo que se le helara la sangre.
Le pareció que se estaba burlando de ella, y aunque no podía verle la cara, sabía
que estaría haciendo una mueca de desdén al pensar en lo estúpida que era por
intentar evitar que hiciera lo que quisiera. —Estábamos hablando, ¿tu madre nunca te dijo que no se puede interrumpir a
dos personas cuando están hablando? —replicó Evelyn, esta vez algo más alto,
pero pareciendo aún una niña indefensa. No había el menor atisbo de autoridad
en su voz, nada que recordara a la de Atticus. Aun así, estaba muy orgullosa de
sí misma por haberse atrevido a plantarle cara a Jonah y no permitirle ningunear
a Hansel impunemente—. Es de mala educación.
En lo poco que llevaba en la Ciudadela Real, nunca había hablado con Jonah. Él
sólo era un guardia de alto rango que se aseguraba de que ella estuviera bien,
además de ser amigo del rey. Siempre la miraba como si fuera basura, una rata.
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Un amor oscuro y peligroso- Almas Mortales
Novela JuvenilLa Tierra, año 2438. El mundo ha cambiado y ahora los vampiros dominan a los hombres. El poder está en manos del Rey, un monstruo despiadado, cruel y el vampiro más anciano y poderoso de todos. Alto y de bellos ojos verdes, es incapaz de mostrar amo...