Greninja-Ash: La última esperanza del mundo.

Capítulo 7: El aura.

Anteriormente, Nuestro joven fue atacado por un Nidorino, uno muy peculiar ya que era muy agresivo, pero ¿Qué pasará ahora?, descubrámoslo juntos.

Entrenador: Creo que el grito vino de por aquí.

Entrenador 2: Sí debe de... -a lo lejos ven un impactrueno muy poderoso-  VIENE DE ALLÁ, VAMOS.

Los dos entrenadores van corriendo, y cuando llegan Ash y Pikachu estaban tirados en el suelo desmayados.

Entrenador: ¿Pero qué pasó aquí?

Entrenador 2: ¿Eso qué importa?, están heridos hay que llevarlos con un médico rápido.

Entrenador: Tienes razón, tu lleva a su Pikachu y yo lo llevaré a él.

Entrenador 2: Sí

Entrenador: Bien, aquí vamos, list... -de repente lo suelta-.

Entrenador 2: ¿Qué ocurre? ¿Por qué lo soltaste?

Entrenador: Sentí algo muy extraño dentro de él, es como si su alma estuviera... rota.

Entrenador 2: ¿Rota? ¿Cómo que rota?

Entrenador: Tócalo y veras.

El otro muchacho lo hizo, y efectivamente sintió algo raro en él.

Entrenador 2: Es... cierto -dijo temblando- ¿Q-qué hacemos?

De repente Ash comenzó a gritar de dolor, mientras que su aura tomaba un tono rojizo.

Ash: AAAAAAAHHHHHHHH.

Entrenador: Ya sé, llevémoslo con la maestra, quizá ella pueda hacer algo.

Entrenador 2: Esta bien.

Y así pasó, ambos llevaron a Ash y a Pikachu con su maestra, entraron a un edificio y comenzaron a gritar.

Entrenadores: MAESTRA, ¡MAESTRA VENGA POR FAVOR! 

De pronto llega una mujer a donde ellos se encontraban.

???: ¿Qué sucede?, ¿Por que gritan tanto?, interrumpen el entrenami...-dirige su atención a Ash- ¿Qué hacen con él?

Entrenador: Lo encontramos cerca de aquí, él y su Pikachu están muy heridos.

???: ¿Y por qué los trajeron aquí?, llévenlos a un hospital.

Entrenador 2: Usted no entiende, cuando los tocamos sentimos algo muy extraño.

De repente de nueva cuenta, grita pero ahora su aura es más roja que antes.

Ash: AAAAAAAAHHHHHHH.

Todos en el lugar se asustan por ello.

???: Déjenme ver -dijo mientras extendía su mano hacia él y cerraba los ojos-.

Ante ella aparecieron imágenes entrecortadas, por lo que no pudo ver muy bien lo que apareció ante ella, pero si vio lo suficiente como para saber que algo no estaba bien.

???: Pero, ¿Quién es el? -en ese momento le quitó la gorra que cubría su cara- ¿Q-qué? ¿Ash?

Entrenador: ¿Lo conoce?

???: Sí, el vino hace algún tiempo.

Entrenador: ¿Vino a retarla maestra Sabrina?

Sabrina se quedó pensativa, se mantuvo así unos segundos hasta que finalmente habló.

Sabrina: Esta bien, esto es lo que va a pasar, tú -se dirige al entrenador que carga a Pikachu- lleva a Pikachu al Centro Pokémon y tú -se dirige al otro entrenador- trae a Ash y sígueme al sótano.

Entrenadores: Enseguida.

Mientras uno llevó a Pikachu al centro, el otro llevó cargando a Ash a donde iba Sabrina, en donde Sabrina abre una puerta que se encontraba al final del sótano.

Sabrina: Déjalo ahí -señala una base de piedra-.

Entrenador: Sí maestra -de pronto observa que saca dos frascos de un anaquel cercano a ella- maestra, ¿Qué son esas cosas?

Sabrina: Este frasco es para la herida de la mordida -le muestra un frasco muy viejo- y este otro es para aliviar la presión dentro de su aura -le muestra un frasco aún más antiguo que el anterior-.

Entrenador: ¿Cree que funcione? -pregunta mientras ve como esparce el contenido en la herida-.

Sabrina: Depende, si él es lo suficientemente fuerte para soportar el dolor, funcionará -dijo mientras terminaba de esparcir la medicina-.

Entrenador: ¿Y si no lo es?

Sabrina: ... -no contestó, solo lo vio seriamente-.

Entrenador: Entiendo.

Sabrina: Esto se pondrá algo intenso, hazte a un lado.

Entrenador: Esta bien.

En ese instante Sabrina abrió el frasco, tomó la cabeza de Ash, la inclinó y le dio de beber, al momento de que se terminó el contenido, Ash empezó a gritar.

Ash: AAAAAAHHHHH...UUUUUUHHHHH -se queja mientras sujeta su pecho- OOOOHHHH

Su aura hizo acto de presencia, pero esta del tono rojo que tenía al principio, se fue aclareciendo, a tal grado de que Ash se fue tranquilizando.

Sabrina: ¿Quién lo diría?, es fuerte -dijo con una leve sonrisa- bueno, no nos queda más que esperar a que... -interrumpió su comentario, pues sentía que el problema aún no se iba del todo-.

Entrenador: ¿Qué ocurre?, ¿Aún hay algo malo?.

Sabrina: No...lo...sé -se acerca lentamente a Ash y vuelve a extender su mano hacia él- veo... algo muy malo.

Entrenador: ¿Qué es lo que ve?

Sabrina: Veo... destrucción... sufrimiento... dolor... caos... y...-ante ella se revela la imagen de Eternatus, la impresión fue tal que cayó de rodillas al suelo-.

Entrenador: ¿Maestra, está bien?.

Sabrina: Sí, pero me temo que no por mucho.

Entrenador: ¿A qué se refiere? -ve que Sabrina se va- ¿Maestra?

Sabrina: Es mejor que no lo sepas -abre la puerta de salida- vete, yo me encargo de él.

Entrenador: Sí ya voy.

Sabrina: -en su mente- (Ash, ¿En qué estás metido?)

Ya habían pasado 12 horas y Ash seguía inconsciente, mientras tanto, en el bosque cercano a la ciudad...el Nidorino aún estaba en el mismo estado.

Nidorino: RRRRRRROOOOOOAAAA -el estaba destruyendo árboles a su paso, y descargando su ira peleando con otros pokémon-.

De la nada ante él apareció Riolu, el mismo que Ash y Pikachu encontraron una noche atrás.

Nidorino: RRRRUUUURRRR -hace movimientos retadores-.

Pero Riolu no se movió de ahí, hasta que Nidorino lo atacó con cornada, estuvo a punto de acertar el golpe, pero de repente Riolu sujetó su cuerno con fuerza, su puño empezó a brillar, y con su poder de aura lo liberó del trance en el que se encontraba.

Riolu: -pensando- (está empezando, solo espero que estén listos).

CONTINUARÁ.