Secuela de "PERDIDAMENTE"
•Fanfic Yoonmin.
Nota antes de leer: esta historia es la segunda parte de "Perdidamente", por lo que no tiene sentido si no se lee primero la parte uno.
(La historia la encuentras en mi perfil)
•Queda prohibida la copia...
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-Yo... yo... -casi hiperventiló antes de poder hablar-. Han pasado dos años, Tae, él tiene diecinueve años ahora -aunque no quiso, su mente ideó una imagen de cómo debía lucir actualmente-. Dos años es mucho tiempo. Él enterró mis recuerdos desde el día en que nos rescataron. Ese mismo día se despidió de mi con una carta, así que imaginate cuantas ganas debe tener de verme ahora...
-¿No me dijiste que debía ir a un reformatorio?
-Sí, debería estar saliendo ahora, eran dos años.
-Y quizás por eso los convocan ahora, Jimin. Piensalo bien, ¿qué otra oportunidad tendrás de verlo?, ¿siquiera de darle por lo menos un abrazo?
Jimin se quedó pensando por casi un minuto entero, sintiendo la mano de Taehyung acariciar su brazo con afecto.
La idea de volver a ver a Yoongi le provocó pánico. Más que nada por el efecto que podría tener en su mente si eso llegara a suceder. Pero aún así, debía adimitir que aquello también le provocaba una cosquilla de intriga y emoción que hacía mucho tiempo no sentía.
-Preguntaré si él irá. Si no va, yo tampoco.
-¡Sí, eso! -su amigo lo abrazó con fuerza y con una sonrisa que compartía de alguna forma la emoción que, aunque no podía demostrar, de a poco crecía en su pecho.
-Enviaré un mensaje al e-mail que me dejaron por si cambiaba de opinión.
El e-mail fue enviado esa misma noche, y ambos chicos esperaron una respuesta por horas viendo capítulo tras capítulo de la serie, hasta que un timbre sonó en el celular de Jimin. Taehyung lo tomó de la cama al ver que su amigo no reaccionaba y al asumir que él no lo abriría. Leyó atentamente el mensaje y luego le echó una mirada a su amigo. Le entregó el celular en la mano y dejó que leyera por si mismo.
Buenos días. Mi nombre es Susan, me comuniqué con usted más temprano para hacerle la propuesta. Con respecto a su consulta, el otro invitado de nombre Min Yoongi, ha respondido que no asistirá. Pero le recuerdo que su oferta sigue en pié. (Ver Itinerario adjunto) Por favor, si cambia de opinión y desea asistir, no tiene más que responder este mensaje y yo personalmente me ocuparé de arreglar su reserva y sus vuelos. Atte: Susan Sullivan.
Jimin bloqueó el celular y lo apretó en su mano hasta que sus nudillos se tornaron blancos.
-Te dije que no querría.
-Lo siento, fué mi culpa por insistir.
-No, esta bien -intentó sonreír aunque una evidente expresión de tristeza se marcó en sus ojos.
Esa noche se quedaron despiertos hasta tarde. La compañía de Taehyung había sido necesaria para Jimin desde siempre, desde que eran niños, pero más aún en los últimos dos años. Y ese día también le ayudo a pensar en otra cosa, escuchando sus quejas y sus chistes sobre la serie, y sobre por qué el protagonista Jamie era tan ardiente.
