! ׅ࣪ lealtad silenciosa ׅ ࣪ nomin ✶ ~ ࣪ ׅ

➶ ໑ 𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟐𝟕 ᘒ ꒦ 🜸

"¡¿Qué demonios...?!". Gritó Jisung mientras quitaba el seguro de su pistola, pero Jongin pegó aún más la suya en la cabeza de Jeno, quien ya empezaba a sudar por el dolor en su hombro. Estaba perdiendo mucha sangre, debido a eso, su visión se estaba haciendo más borrosa e iba cerrando poco a poco los ojos. El joven gladiador observó eso, y empezó a preocuparse mientras los latidos de su corazón se hacían más rápido. ¿Qué es lo que haría? Si se adelantaba con un disparo, el traidor le dispararía a Jeno, y jamás se lo perdonaría. En una esquina de su mente, empezó a recordar qué es lo que se debía hacer en un momento así. Él era un guerrero, de los buenos. No podía dejarse vencer así, ni mucho menos ver morir a un compañero. Era profesional. Tenía que demostrarlo de alguna manera.

Pensó en un plan.

"Baja el arma... O volaré la cabeza de este mariscal en pedazos". Habló entre dientes Jongin, quien aún apuntaba a Jeno, mientras este sólo trataba de mantener sus ojos abiertos, mirando a su enemigo. Se sentía débil, no podía ni siquiera levantarse de su lugar. Ya que se encontraba sentado en el suelo. Pero debía ser cuidadoso, tampoco quería morir, era consciente de que un arma estaba apuntando justamente en su cabeza. Sin embargo, no se le ocurría nada, no sabía qué es lo que tenía que hacer. Jisung, dudando entre sí o no, bajó lentamente su pistola, hasta que esta estuvo completamente mirando al suelo. La empezó a guardar en su bolsa trasera y miró con rabia a Jongin, quien tenía una sonrisa triunfadora en su cara. "¡Buen chico! ¡Me alegra verte de nuevo!". Dijo y esto hizo que el gladiador apretara con fuerza los puños. "Los he estado siguiendo desde un kilómetro atrás. Observó todo, el mariscal sí que tiene una buena herida, si no se le atiende rápido, se infectará y morirá". Habló con un tono de burla en su voz, mientras dejaba de apuntarle a Jeno y se levantaba para empezar a caminar hacia Jisung.

"Aunque no tengo ni la más mínima idea de porqué necesitan esta flor. ¿El Rey murió?". Preguntó y esto hizo que Jeno frunciera el ceño con los ojos cerrados. Ya que mantenerlos abiertos se le había complicado mucho. Jisung hizo lo mismo y como si fuera un reflejo, protegió la mochila que contenía la planta. "¿Eso es un sí? Los gemelos hicieron un buen trabajo, mas yo defraudé a muchos de mi reino. Quedé en ridículo, fui humillado... Todo por culpa de este imbécil". Señaló a Jeno y después de un pequeño tiempo de silencio, gruñó apuntando de repente hacia el mariscal, así alterando a Jisung, quien de inmediato se puso enfrente de él protegiéndolo y mirando a Jongin con una cara que reflejaba seriedad.

"Ni se te ocurra". Habló con una voz rasposa y entrecerrando sus ojos, haciendo que sólo se vieran dos rayas en ellos. Jongin dejó de apuntar y soltó un bufido mirando a Jeno. "¡Oh vamos! ¡Míralo! Ya no tarda en morir y tú lo defiendes, ¡Ja! Sí que tienes honor...". Dijo en tono de burla para después, poner un semblante serio. "Escucha, te dejaré ir... Pero a él no. ¡Es tú decisión! Si quieres vivir, te recomiendo que salgas lentamente por donde entraste, y me dejes tener una amistosa plática con el mariscal. ¿Entendido?". Dijo con voz suave, dejando a Jisung un poco pensativo. En esos momentos pensó en el palacio, en sus amigos, en el Príncipe. Volteó hacia atrás y se dio cuenta de que Jeno hacía caras de malestar debido a la herida, si lo dejaba allí, era seguro que Jongin lo mataría, y no podía regresar sin él, jamás se perdonaría algo así.

"Vete...". Susurró una suave voz y Jisung volteó a ver a su compañero, quien lo miraba con una pequeña sonrisa. "Es mi culpa que él siga vivo, debo asumir esto por mi cuenta... Tú regresa y llévale la flor a Haechan. Es tu misión". Dijo Jeno con una voz poco audible y Jongin sonrió con maldad recargando su espada en un tronco aun apuntando a los dos chicos. "Ya escuchaste al mariscal...". Dijo y Jisung volteó hacia él negando muy lentamente con la cabeza. Cerró los ojos y despeinó un poco su cabello en son de desesperación.