Serás mi rey

Capítulo 12

Empieza un nuevo día en el reino de los ángeles, y el rey carga con el peso de sus responsabilidades como siempre. Sus tareas diarias son: supervisar el avance de los asentamientos, administrar el castillo, estudiar y esperar que llegue alguien a desafiarlo. Pero hace poco, se agregó una tarea más a su lista.

—¡Su majestad!

Los gritos de Jae Joong interrumpieron su lectura de “¿Cómo tratar bien a tu demonio?”. Young Saeng levantó la vista sin muchos ánimos y poco le importó que lo viera herido.

—¿Qué sucede?

—¡Graves problemas! ¡Me derrotaron cinco cazadores y ahora vienen por ti!

—Ah, ¿algo más? —Quedó paralizado cuando algo pasó por su cabeza— ¿Qué hora es, Jae?

—Las cuatro de la tarde

«¡¿Las cuatro?! Eso significa que Hyun vendrá en cualquier momento», se alarmó internamente

La nueva responsabilidad del rey de los ángeles: Ocuparse de la fuente de poder mágico del castillo, Hyun Joong

Sus alas se volvieron metálicas y sus ojos blancos completamente. —¡Idiotas! ¡¿Dónde están?!

—Eh… disculpa, su majestad. Pero, ¿por qué te enojaste de repente? —Preguntó sin entender el cambio brusco

—¿Y si Hyun queda en el medio de la batalla? ¿Y si lo lastiman? ¡El capítulo 10 del libro de Yoona dice que debo protegerlo! —Liberó todo el poder de su cuerpo— Tuve todo el día, ¡¿y eligen venir tan tarde?! ¡Qué desconsiderados! ¿Piensan que los demás no tenemos cosas que hacer?

—No tiene remedio —Susurró Jae Joong— Ya hasta se le olvidó la fuerza del rey Hyun. Bueno… qué importa

Las puertas se abrieron de golpe. —¿Dónde está ese rey? —Hablaba uno de los cinco demonios— Somos el grupo de cazadores más fuerte de todo el reino. Hoy es tu último día, angelito. Hemos venido a destr… ¡¡Espera, espera!! ¡¡Déjame terminar!! ¡¡Corran!!

El castillo fortificado tras la última reparación puede soportar hasta cinco explosiones seguidas de Young Saeng. Se está controlando, pero el castillo no deja de retumbar mientras golpea a esos demonios.

Minutos después

—¡Traje algo de comer!

Hyun Joong llegó con una amplia sonrisa y con una cesta de comida y Young Saeng al verla fue hacia él. Estaba esperando el momento en que llegara, puesto que le encanta la comida de los demonios y hacía muchos años que no la había vuelto a probar. Jae Joong junto a Yoona los miraban a escondidas.

—¿Te puedes creer que hace unos minutos peleó?

—¡Está saltando como un niño por los dulces de Hyun! —Se burlaba Yoona

—¡Preparen la mesa para nosotros y tráigannos un poco de té! —Le ordenó a sus sirvientes y en un santiamén cumplieron con su trabajo

—Te vi pelear contra esos cinco cazadores profesionales

—Ah, estabas mirando la pelea

Dejó su cubierto en el plato. —Esos cazadores parecían bastante fuertes. ¿Estás herido?

—Estoy bien. Y dime, ¿a ti no te lastimaron? —Hyun sonrió mientras lo veía enfriar su té

—No. Estoy pensando en declarar ilegal la caza de ángeles

Saeng se apresuró en responder. —No hagas nada. ¿Te imaginas la cantidad de demonios que se enojarían contigo? No te preocupes por mí.

«Qué bueno que al fin puedo hablar normalmente con el rey Saeng. Al principio las cosas entre nosotros eran complicadas porque yo le imponía mis sentimientos. Por suerte pudimos resolver nuestros malentendidos y ahora nos llevamos bien. Y eso dicen que es un malvado malhumorado. Con eso me basta. No me importa si yo no le gusto. Poder verlo y conversar con él es más que sufic…»

Le dedicó una linda sonrisa

«¡¡Es imposible!! ¡¡Lo amo tanto!!».

Muchas horas después Hyun se despidió de su amado rey y de los sirvientes presentes. En cuanto Saeng no lo vio más se acercó a una pared y sorprendió a sus dos generales agarrándolos del cuello.

—¿Espiando otra vez?

—P-por supuesto que no, mi querido rey —Titubeó Jae Joong y los soltó

—Entonces, ¿qué quieren? Díganlo de una vez

—¡Cuéntame cómo te fue con Hyun Joong! ¡Con lujo de detalles!

Suspiró. —Nuestra reunión fue… satisfactoria. Hoy también tuvimos un buen debate

—¿Un debate? ¿Sobre qué hablaron? —La curiosidad de Yoona no tenía fin

—Hoy tratamos el tema de la cultura de los ángeles y la demoniaca, cómo influyen en las reglas y la gobernanza de nuestras sociedades —Yoona y Jae Joong se miraron con claro espanto ante la explicación— Tuvimos una charla exhaustiva respecto a las problemáticas a las que se enfrentan nuestros reinos en la actualidad, causadas por la ineficacia de los reyes anteriores…

«No puede ser», se lamentó Jae Joong

«¡¿Pasas horas con un demonio que claramente está loco por ti y solo hablaron de política?! ¡¿Dónde está el romance?! ¡El coqueteo!» 

—¿Y… y supongo que es el único tema del que hablan cuando viene de visita? ¿Política y nada más? —Preguntó Yoona

—Sí… básicamente. Se nos da mejor que hablar de otras cosas

—Tengo que alcanzar a Hyun Joong —Yoona salió arrastrando su cola de serpiente con rapidez

—Yo me voy a mi piso. Pobre Hyun. Lo siento tanto por él —Jae Joong también se fue cabizbajo

—¡¿Por qué?! ¿Qué pasó? —Young Saeng se quedó aturdido— No entienden que hablar de nosotros es un poco incómodo

Yoona llegó al jardín del castillo con la idea de detener a Hyun Joong para que sepa cómo tratar a Young Saeng. Se esconde detrás de un árbol para observar a Hyun pelear contra unos ángeles. Estos cargaban unas banderas negras y gritaban “Abajo el rey” y Yoona se asustó.

—¡Es un grupo de ángeles rebeldes! ¿Por qué Hyun está luchando contra ellos?

En un parpadeo de Yoona, los seis rebeldes cayeron al suelo con sus cuerpos completamente quemados y Hyun frente a ellos sin ningún rasguño.

Dos ángeles menores se le acercaron a Hyun de repente —¿Qué hacen afuera del castillo?

—El rey Saeng quiere cerciorarse de que llegues al portal sano y salvo

—¿En serio? —Sonrió apenado— Mmm, entonces me vieron darles con todo a esos rebeldes, ¿eh? No le contemos nada de esto al rey Saeng, ¿sí? Ya tiene suficientes problemas. No quiero que tenga que preocuparse de más

—¡No hay problema! ¡Tu secreto está a salvo, Hyun!

—¡Gracias! —Chocaron sus manos

Desde la oscuridad Yoona lloraba de la emoción —¡Ay! ¡Se están cuidando mutuamente en secreto!

«Creí que tendría que hacer mucho esfuerzo para que las cosas funcionaran, pero en verdad va todo muy bien. Mientras que su majestad no quiere que lastimen a Hyun, este no quiere que mi rey se preocupe. ¡Son demasiado lindos! ¡Torpes también, pero se están tratando con cuidado y respeto mutuo!»

—Creo que les irá muy bien si no te entrometes —Escuchó la voz de Yunho detrás suyo

—¿Qué haces aquí?

—Jae Joong me ordenó que te agarre de la cola y te lleve hasta el castillo. No puedo creer que me hayan interrumpido para esto. —Respiró profundamente— ¡Deja de obsesionarte con su relación! ¡No es asunto tuyo! ¿O quieres que te castiguen como a Jae?

—¡Está bien, está bien! ¡Ya voy!

Tanto Hyun como los ángeles menores escucharon toda la discusión. —Sería lindo si tuviéramos una relación, pero no quiero hacerme ilusiones

—¡No se rinda! —Lo animaron los dos pequeños