Mi Doctora Perfecta

Capítulo 10

Alexey Kozlov.

Necesito respirar, la llegada de mi hermano gemelo me tomo por sorpresa, tenia mucho tiempo sin verlo. Desde que ella lo alejo de mi.

O mejor dicho, desde que yo me sacrifique.

Aun no lo puedo creer que ella nos haya engaño a los dos, uso su belleza a su beneficio.

Gema esta abrazada a mi, mis brazos se niegan a soltarla; pero debo salir de aquí o voy a explotar.

- Gema- le llamo  en un susurro.

Me abraza con fuerza, la necesito para no volverme loco.

-¿ Vienes conmigo? - pregunto mientras me siento en la cama.

Me observa desde la cama, su cuerpo esta cubierto por la sabana de seda de color negra, asiente a mi pregunta.

Se coloca de pie sin importarle su desnudez, me coloco mis pantalones y mi camisa blanca, veo a Gema colocarse un Jeans ajustados de color negros, se coloca un top blanco.

Me coloco mis zapatos, cuando estoy listo tomo mi arma y la guardo pretina de mi pantalón.

Gema toma mi mano para después tomar el arma que le regale.

- Estoy lista mi osito ruso - dice mientras me da un beso en la comisura de mis labios.

Le coloco un abrigo color cafe para después tomar el mio, salimos de la habitación tomados de la mano.

Espero no ver a Vasily, no tengo el humor ni la paciencia para oírlo hoy.

-¿ A donde vamos ? - pregunta  cuando subimos a mi deportivo.

- A un lugar tranquilo, te diré lo que quieras saber - asiente para después tomar mi mano.

(...)

Gema.

Llegamos hasta un lindo bosque, recorremos un  camino lleno de piedras sueltas, una cabaña  se mira desde lejos.

- ¿ A quién le pertenece esta propiedad? - pregunto fascinada por la vista.

Alexey me observa con una leve sonrisa.

-¿ Te gusta ? - asiento mientras abro el techo del auto.

Observo todo un río se mira a lo lejos, que hermosura.

- Era mía - dice haciendo que lo voltea a ver.

-¿ Era ? - pregunto confundida.

Asiente mientras detiene el auto, se baja y abre la puerta de mi lado.

- Ahora es tuya - abro mis ojos  sorprendida.

- ¿ Que? No claro que no, no la aceptare - niego mientras lo señalo.

Él me toma de la cintura y besa mi frente, me pega al auto.

- Di que sí, es mi regalo de cumpleaños- elevó  mi ceja derecha.

- Ya cumplí años - digo mientras lo abrazo.

Se ríe, besa mis labios con hambre; respondo de la misma manera.

Joder nunca me cansaré de besarlo, es mi pasatiempo favorito.

- Entonces es mi regalo por la primera cita - su respuesta me saca una sonrisa.

- No, rusito tramposo, no voy a aceptar esta propiedad- digo mientras lo halo para caminar hasta el río.

- Lo seguiré intentando - murmuró con burla.