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—Señor Kwon, que sorpresa tenerlo aquí— dice el castaño haciendo una reverencia de noventa grados completamente nervioso, fingiendo su mejor sonrisa hacia su jefe. —Por favor, pase y siéntese— le dice apuntando el sillón donde anteriormente Jungkook estaba sentado.

—Muy amable Kim, gracias— dice mientras procede a sentarse en el sofá que el castaño anteriormente había señalado. En ese momento ve al azabache parado junto a la ventana de su oficina y a Taehyung le hierve la sangre al ver cómo su jefe amplía rápidamente su sonrisa, convirtiéndose en una sonrisa completamente genuina, diferente a la sonrisa de respeto que le había dado a él anteriormente. —Jungkookie, que rápido. No creí que ya estuvieras aquí, hombre— le dice mientras apoya una mano sobre su hombro y palmea su pecho con completa confianza.

—Claro, vine en cuanto vi su mensaje Jiyong hyung— dice Jungkook, lo que hace al castaño paralizarse inmediatamente, temiendo la reacción de su jefe.

¿Lo había llamado por su nombre de pila y además de eso dicho hyung? Era el fin de Jeon Jungkook en esa empresa.

No era que le importase mucho, pero lamentaba tener que presenciar el momento en que... ¿su jefe se estaba riendo?

Afirmativo. Kwon Jiyong se encontraba riendo por una de las bromas que el azabache había lanzado mientras él estaba perdido en su mente completamente en pánico.

En verdad, envidiaba a Jeon Jungkook. Él, con una simple broma se hacía ganar la confianza de cualquier persona, mientras que Taehyung se había pasado años siendo organizado y pulcro, intentando hacer el mejor trabajo para destacar y seguía perteneciendo al resto de trabajadores miserables pero que no podían quejarse porque contaban con una oficina propia.

Era absurdo, esa oficina a penas si contaba con una ventana y ésta no tenía siquiera un metro cuadrado. Sin hablar de que apuntaba a una inmensa pared y que debido a esto, no recibía ni un rayo de sol directo en todo el día.

Se preguntaba cómo sería la oficina del azabache. De seguro mucho mejor que la suya, ya que de sobra sabía que éste tenía cierto favoritismo en la empresa y sobre todo con su jefe.

No es que el menor no sea buen fotógrafo, en realidad lo era, o suponía que lo era ya que realmente nunca prestó atención a su trabajo. Pero por algo había conseguido empleo en un primer lugar, así que suponía que algo de talento al menos tenía.

Pero por favor, ¿el talento remplazaba el que sea un completo maleducado al llamar a su jefe por su nombre de pila, no arreglarse en lo más mínimo ni siquiera cuando su jefe lo citaba y ni hablar de no haberlo reverenciado cuando éste había entrado? Por supuesto que no.

Taehyung estaba enfurecido, era injusto que Jeon Jungkook tuviera más privilegios que él.

—Señor Kim, ¿tú estas de acuerdo verdad?— Taehyung mira rápidamente a su jefe confundido. Veía como Jungkook lo miraba con cierta burla, quizás notando que el castaño no estaba prestando verdadera atención a la conversación que estos dos tenían ¿En qué momento habían dejado de bromear?

—Yo... lo siento señor Kwon, ¿podría repetirme la pregunta por favor?

—El señor Kwon...— procede a hablar Jungkook, sonriendo burlón al castaño por llamar formalmente a su jefe. Taehyung en serio quería arrancarle esa sonrisa del rostro. —dijo que deberíamos compartir oficina, Taehyung hyung.

¿Taehyung hyung? ¿Desde cuando ese mocoso malcriado y maleducado utilizaba el hyung para dirigirse a él?

—¿Compartir oficina?— pregunta con una sonrisa completamente falsa. Por supuesto que no compartiría oficina con ese niño. —No entiendo por qué sería necesario hacerlo. Digo, ¿Jungkookie no tenía una oficina propia y con muchas ventanas en la otra ala?— dice siguiendo el juego del azabache, aparentando que entre ellos dos había una buena relación cuando claramente no era así.

And the reason is you 》▪︎KOOKVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora