El regreso
¿Qué es para mi un amanecer normal?
Sin duda eso sería despertar con el cabello enredado en la mano que siempre meto inconscientemente mientras duermo bajo la almohada, la misma que estaría algo babeada, con la cobija alrederor de mi cuerpo cubriendo raramente solo mis hombros, el pijama compuesto por una de las batas que le robé a mi abuela y modifique obteniendo un pequeño short y una mini-blusita que siempre deja al descubierto parte de mi pecho y como complemento especial los gritos de mi compañera de cuarto taladrandome el tímpano.
La vida universitaria desde la imagen que les daba parecía tan fácil como comer pipas pero la realidad era bastante cruel y diferente ya que muy pocas veces podía despertar de esta forma, como hoy.
A diferencia de la descripción de arriba lo único que se cumplía a la perfección era el alto tono de voz que Miley usaba para llamarme. La chica gritaba pocas veces. Desde que la conocí gracias a Layla era bastante tranquila aunque podía darte a pensar lo contrario si se emocionaba vagamente por cosas sin sentido o cuando leía uno de esos finales de libro sin explicación.
—¡REE! — otro grito retumba en las cuatro paredes que conforman nuestra habitación malamente con espacio para dos camas, pocas pertenencias y el minúsculo baño en el cual me encontraba intentando a duras penas ponerme unos jeans — ¡ÚLTIMO LLAMADO CARSON!
Salí pareciendo seguro una completa demente con mi atuendo impecable y mi pelo desordenado a juego con las ojeras permanentes en mi persona.
—Que reluciente estas esta mañana. — dijo aguantando la risa.
—Se nota tu sarcasmo a miles de kilómetros. — le dije pasando el cepillo por mi pelo acomodandolo un poco.
Observé como mi amiga me sacaba la lengua por el cristal del espejo. Llevaba unos pantalones negros que la hacían lucir genial con su alta figura y esa blusa azul marino, el pelo castaño oscuro suelto sobre su espalda y perfectamente maquillada.
Nunca pensé aquella noche cuando la conocí que se volvería una buena amiga y que sería mi apoyo incondicional en la Universidad a pesar de que vamos en años diferentes y compartimos una sola clase por un atraso que tuve en primer año.
Como lo presenti aquel entonces cada uno de mis anteriores amigos tomó su camino, Layla acabó alejada de todos nosotros y trabajando en la empresa de su madre, Anne está estudiando la carrera de sus sueños y Yeol manda montones de fotos de cada robot que arma y desarma por el grupo de WhatsApp que todos tenemos.
¿Qué fue del resto de los chicos que conocí en mi graduación?.
David es un gran amigo, se graduó un año antes de yo entrar a la Universidad y aunque hoy podría ser un gran futbolísta rechazó cada oferta y montó un gimnasio propio.
A Yandris, Lysie y Brayan nunca más volví a verlos de forma seguida, solo en pequeñas ocaciones, supongo que cada uno continuó con su vida.
Alice estudia Informática y nos vemos solo en los almuerzos donde todo el grupo se reúne luego que Miley y yo salimos del edificio de Economía y Finanzas.
—¿Entonces hay fiesta esta noche? — preguntó Harley llegando a nuestro lado.
A ella la había conocido a principios de segundo año y era la chica más cool que antes vi. Daba ese aire de despreocupada por su cabello con tinte azul y su emocion excesiva por todo.
—Mis abuelos se irán de viaje a las 6:30 pm. Nosotras prepararemos todo y esperaremos a los invitados. — informé lentamente a ambas chicas a la vez que tomábamos nuestros asientos en la clase de Matemáticas.
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Hermoso Desastre ✔
Short Story-Eres tan pequeña como una hormiga ¿Puedes escuchar lo que ellas hablan? Por eso es que te veo reírte sola a cada rato - se burló mirándome desde arriba con una sonrisa bailando en sus labios. -¿Oyes eso? -pregunté fingiendo oír algo - Las homigas...