14. Losing you

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Estaba en una cafetería, esperando a Rosé

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Estaba en una cafetería, esperando a Rosé. Muevo el pie y reviso la hora cada minuto. Estoy muy nerviosa, no sé que me dira, conoceré la otra cara de la moneda, o tal vez la misma, no lo sé.

—¿Cómo has estado? —levanté la mirada y lo primero que note fueron los ojos de Jungkook. ¿Cómo es que sigue siendo tan apuesto?.

—Jungkook, siéntate —me hizo caso, se sentó a mi lado derecho—. Bien, he estado bien, con mucho trabajo, tengo una boda dentro de unos días, ya sabes lo difícil que a veces se ponen los novios o la familia de los novios.

—Si, lo sé. Supongo que también vienes por lo de noona, ¿verdad?.

—Si. Por cierto, ¿por qué estás aquí?

—La misma razón, y llegue hace unas horas, ¿no te molesta que me quede en el departamento, verdad?

—Para nada, es un honor tener a una estrella quedándose en mi departamento —sonreimos.

Se instalo un silencio para nada incómodo. Unos minutos más tarde llego Rosé. Venía con un pantalón de mezclilla, una blusa manga corta color amarillo. Vio a Jungkook y se acercó a nosotros.

—Jeon Jungkook, Lee Haneul, un gusto conocerlos, soy Roseanne Park, pero llamenme Rosé, es más cómodo.

—Ya nos conoces —dije tímidamente.

—Lo sé, ¿con qué quieren empezar? De preguntas, claro —nos miro alternativamente. Un mesero se nos acercó y Rosé le dijo algo—. Siganme, nos llevara a otro lugar más privado.

Jungkook y yo nos levantamos y la seguimos, fuimos a un segundo piso, que esta sólo y parece salón de fiesta en la terraza. Nos sentamos y el mesero dijo que nos traería algo para comer.

—¿Y esto? —pregunto Jungkook.

—Esto es la cafetería de tu hermana, me la dejo a mi por un tiempo, pero es hora de dársela al dueño original. Jeon Jungkook, esta es tu cafetería. Si no lo notaste, el nombre de la cafetería es Jeon's y rosas azules y moradas, los colores que ustedes usaban.

—Esto no estaba en el testamento —alegó Jungkook—, ¿por qué hasta ahora?

—Porque sabía que tendrías que irte de Busan si lo dejaba en el testamento, la cafetería te detendría y ella no quería eso. Me la dejo a mí para asegurarme de que creciera al punto en que el dueño no estuviera en el negocio y aún este funcionará bien. Por eso ya es hora, la única condición que hay es que Haneul sea tu socia y ella, obviamente, se encargará de ver el mantenimiento y todo eso —me miró—. Lisa o yo te podemos orientar en ello, no te preocupes.

—Prefiero no...

—Haneul, ayúdame ¿si? Es lo último que te pido, noona nos dejo esta cafetería, debemos cuidarla —bien, si lo pide así, pues sí, tiene razón.

Another day [Kim Taehyung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora