Another day [Kim Taehyung]

28. Boda

Sonreí mientras las personas hablaban conmigo y felicitaban. Les agradecí y tomamos una foto, se fueron y luego pasaron otras personas. Es lindo y agotador.

—Es hora —anunció una chica. Me levanté y abrí una puerta que me lleva directamente al pasillo.

Empieza la canción nupcial y caminó hacia Taehyung... ¿Tae? Pero...

(...)

—¡Lee Taemin! —grité una vez que contestó—, me estás traumando, en serio.

—¿Por qué? —escuché su risa—, ¿de nuevo soñaste con la boda?

—Si, de nuevo. Por favor, ya no me hagas el trabajo tan duro —chille.

—Es lo último.

(...)

Últimos detalles y listo. JiSoo esta lista, su mamá la miró.

—Mi bebé se casa, estoy... —no continuó porque las lágrimas llegaron.

JiSoo la abrazo y consoló. Después de unos minutos, los invitados pasaron a la sala de la novia, hablaban con ella y la felicitan por la boda, se tomaron la foto con ella y pasaron al salón.

—Estoy nerviosa —habló.

—Tranquila unnie, todo saldrá bien.

Alentaron las chicas, yo sólo apoye su comentario. Minutos más tarde todo empezó.

Y ambos dieron el "acepto".

(...)

Estamos en el comedor mientras se lleva acabo la boda tradicional, que es sólo los novios y los padres, los demás somos ajenos.

—¡No Jeon, primero va el cereal y después la leche!

—¡¿Cómo estás tan seguro?! Yo soy el que cocina para ti, dudo que sepas el orden.

Jimin y yo sólo reímos de sus tonterías. Hay más temas para debatir y escogen ese.

Los meses pasan más rápido, unnie, tenías razón, detrás de todo lo malo siempre hay algo bueno. Tu pérdida me llevo a conocer a más personas, y son valiosas. Gracias por cuidarme dónde quiera que estés, sé que haces lo mismo con todos, en especial con tu hermanito. Unnie, gracias por todo.

—¿En qué piensas? —me pregunto Jimin, pues mi novio y ex novio siguen peleando pero ahora el porque es mejor la hamburguesa que la pizza.

—En cómo hacerlos callar —Jimin se rio y lo acompañe.

—¿De que se ríen? —pregunto Taemin. Él y mi cuñada se ven realmente hermosos con los hanbok.

—De sus peleas tontas. Falta que peleen el porqué la torre inclinada es inclinada.

Y sin duda, así fue. Otro más y les aventare los platos.

(...)

—Gracias por aguantarme muchísimo, Jungkook, en serio —le agradecí como diez mil veces y no me basta.

—Vivimos dos años juntos, esto no fue nada —me sonrió—. Al que no soporte fue a Tae, hace berrinche por todo.

—¡Hey, no hago berrinche por todo!

—Justo ahora estas haciendo uno —y una nueva pelea comienza.

Mi tren ya está aquí, es hora de irme.

—Adiós chicos, nos veremos después.

Me despedí de Jungkook y Tae, pero de este último sólo por molestar, pues quiere presentarse formalmente con mis papás. Entramos al vagón y nos sentamos.

—Haneul —lo miré—, te quiero.

—No te daré mis cheetos —hizo un puchero—. No.

—Por favor —negué—, ¿me quieres?

—Si, muchísimo pero, no te daré mis cheetos.

Me robo un beso. Y luego otro, y después otro y al final accedí.

—Eres la mejor novia —sonrió mientras comía.

Le sonreí. Puse mi cabeza en su hombro y cerré los ojos. Estoy cansada, no debí quedarme a jugar videojuegos con los chicos.