18. Adiós

20 1 0
                                    

Hoy tengo que regresar a Daegu y sinceramente no quiero regresar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Hoy tengo que regresar a Daegu y sinceramente no quiero regresar. Miraba a Haneul hacer sus cosas mientras atendía la llamada de su mamá. Jungkook también se va hoy, finalmente todo quedó resuelto respecto a la cafetería, así que el chico esta haciendo sus maletas.

—Adiós mamá, te amo —la chica colgó y me miró—. ¿Pasa algo?

Quería negar, pero es lógico que pasa algo.

—Hoy regresó a Daegu —su sonrisa desapareció y eso me dio una esperanza de que le gusto—, las chicas me necesitan.

—¿Fue de último momento?.

—Algo así, ya había terminado los pendientes aquí y eso decía que era hora de irme pero, quería quedarme —la chica frente a mí desvío la mirada y empezó a sonrojarse—, supongo que sabes la razón.

—¡Chicos...! —Jungkook salió alegremente y miró la situación, rápidamente se dio cuenta de que interrumpió el momento—... lo siento, les diré después.

Entró a la habitación y yo miré a Haneul. Tomo su bolso, es hora de que vaya a trabajar.

—¿A qué hora te vas? —me miró—, para salir temprano y despedirte.

—Como vengo en mi carro... dentro de dos horas para llegar temprano allá.

Ella negó rápidamente.

—Vete mañana temprano, ¿si? Para que vayas más tranquilo.

¿Y cómo negarme a lo que ella pide?

—Está bien.

Se despidió y salió del departamento. Jungkook salió y fue a la cocina.

—Yo digo que si la besas puede que se enamoré de ti.

—Esto no es un cuento de hadas, Jungkook, y lo sabes perfectamente. Es más, ¿cómo supiste que le gustabas? —bebió jugo y miro un punto fijo de su mano—, Jungkook.

—¿Sabes? Los hombres nunca notamos cuando le gustamos a alguien, pasamos eso por alto porque tenemos otras cosas en mente, ¿verdad? En tú caso, te preocupa no gustarle, eso y otras cosas te impiden ver ese detalle.

—¿Estás diciendo que le gusto?

—Pero los demás podemos ver cómo Haneul te ve, a decir verdad, es una chica difícil de leer y eso la hace realmente interesante. Aunque bueno, ya te diste cuenta de que es buena persona, es apasionada y divertida, entonces, ¿qué esperas para actuar? ¿Una invitación? La hago en este momento.

—¿Estás diciendo que le gusto?

—Me eché un discurso y tú sólo pusiste atención a lo que se te dio la gana. Me rindo —se terminó el jugo y entró a la habitación—. Por cierto, saldré a comer con Haneul, ¿vienes? Si es así, ponte guapo.

—Ya soy guapo —Jungkook se asomó, y no trae playera puesta, supongo que se bañara.

—No más que yo —guiño un ojo y volvió a entrar a la habitación. Este día será largo, literalmente no tengo algo que hacer.

(...)

Jungkook maneja hacia el trabajo de Haneul y me plática que cosas le gusta hacer a Haneul, en serio siento que quiere que seamos novios, pero no todo depende de mí, también de ella. Si le gusto, también debería darme señales y no las veo. Tal vez, o a lo que me inclino más, es que no soy correspondido.

—¡Llegamos! —anunció Jungkook y minutos después Haneul entro al auto, en la parte de atrás—. Hola, hermosa.

—Hola, Jeon. Hola Tae —sonrió, la vi por el espejo.

—Hola, ¿qué tal te fue? —pregunté.

Me plático como le fue, lo que hizo, lo que le molesto, y el trabajo asignado. Esta vez será aquí, así que no tendrá que viajar, y eso es bueno, el viaje y hacer tu trabajo lo hace más pesado.

Jennie:
Tae, tu abuela... está en el hospital

Tae:
Salgo para allá, tomaré el tren.

Jennie:
Te esperará mi chófer, yo estoy en el hospital con ella y su esposo.

Tae:
Gracias.

—Jungkook, vamos a la casa y después a la estación, tengo que irme.

—¿Paso algo? —preguntó Haneul.

—Los señores que conociste, cuando te lleve a ver la cosecha —ella asintió—, la señora esta en el hospital. Tengo que ir.

Jungkook aceleró y llegamos al departamento en cinco minutos, tome mis cosas, le di las llaves del departamento (que me prestó) a Haneul y volvimos al auto. Jungkook manejó hasta la estación y fui a comprar un boleto para Daegu, por suerte sale uno en 20 minutos.

—Todo estará bien —Haneul me abrazo, le correspondí. Estoy muy preocupado.

—Te debo una comida.

—Excelente, tendrás que venir —nos separamos.

Miré a Jungkook, quién me ve con preocupación.

—Estaré bien. Cuidense mucho, eh. Y Jungkook, no choques mi auto.

Las pantallas mostraron que el tren a Daegu está listo y que es hora de subir a él. Me despedí por última vez y caminé hacia la puerta que me llevará al tren y este a Daegu.

—¡No prometo nada! —di media vuelta para ver a Jungkook y gritarle de vuelta, pero en cuanto cruzamos miradas, tomo la muñeca de Haneul y empezó a correr—. ¡ADIÓS, HYUNG!

Sonreí. Retome mi caminó.

Adiós chicos.

Adiós chicos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Another day [Kim Taehyung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora