Confesiones (Parte 1)

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Bianca:

Desperté por la mañana en la cama de la enfermería con la cara de Deimon mirándome.

-Buenos días - me dice sonriendo

-Buenos días - digo somnolienta

-Jessica te ha traído el desayuno. - dice - Y yo me voy a encargar queblo termines.

-No tengo hambre - miento

-A mi no me vas a hacer el cuento.

Acerca a mí una bandeja con un jugo de naranja, beicon, huevos revueltos y una tostada. Todo era tan tentador...

-Bien - digo y me meto la tostada a la boca.

-¿Dormiste bien anoche? - pregunta sentándose a un lado de mi litera.

-Si, como nunca en cinco días - respondo mirándolo a los ojos.

-Te dije que lo sentía... - él se recostó sobre mis piernas.

-Lo sé. - digo tomando el jugo de naranja. - Y te perdoné

-Lo sé - responde sonriendo - Gracias por eso.

Le devolví la sonrisa y le dí otro bocado a la tostada. Él se sentó, tomó un tenedor y alzó los huevos revueltos.

-Abre la boca - me dice

-Yo puedo comer sola - digo

-Ándale, quiero compensar algo de estos cinco días.

Abrí la ligeramente la boca y él me dio de comer. Él jugaba a darme de comer al avioncito y yo como una tonta le seguía el juego.

-Esto es raro - le digo

-¿Tú crees? Yo podría quedarme toda la mañana haciéndose esto - sonríe

Acabé el desayuno y él se volvió a recostar en mis piernas. Como mi cabello es largo, Deimon comenzó a jugar con él.

-Tu cabello es muy suave - dice él pasándoselo por la mejilla

-Supongo - le dije sonriendo

La puerta se abrió y apareció Franchesco. Estaba sonriendo, pero cuando vio a Deimon, frunció el ceño y se acercó casi corriendo

-¿Qué hace este aquí? - grita exasperado

-Vamos, Di Angelo, dejame en paz - dice Deimon enredando sus dedos e mi cabello

-Hablaba con Bianca, no contigo. - responde él

-Franchesco, por favor. - pido cruzándome de brazos - Deja a Deimon en paz.

-¿Qué lo deje en paz? ¿Después de lo que te hizo en estos dias? Si esto es lo que quieres, bien. No sé porqué me preocupo por ti. - se dio la vuelta y salio de la enfermería.

Algo dentro de mi se removió. Sus palabras me herian. Mi corazón se estrujaba y una lágrima advirtió con resbalar por mi mejilla.

Deimon se sentó a un lado y sus ojos se encontraron con los míos. Tenia casi los mismos ojos que Franchesco y eso me hirió también.

-Creo que ya te causé suficientes problemas con Di Angelo. - susurra

-Él... Él tiene la culpa.

-Creo que aun no te has dado cuenta de lo mucho que te quiere - me dice - Yo lo he notado, cada vez que te mira, cada vez que te toca, cada vez que te habla con ese acento italiano... - se detiene a pensar - Él está muy enamorado de ti.

Quería decir que se equivocaba, que no tenia sentido, pero algo me decía que Deimon decía la verdad, que eso era lo que Deimon pensaba.

-No lo sé. - digo - No es muy posible - le digo - Osea, soy yo.

Broken FamilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora