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Las dudas estaban comenzando a atacar cada parte de mi cuerpo en cuanto lo observé ponerse de pie, yendo al cesto de basura de su habitación que había al lado de su escritorio, él me dio una vista completa su su cuerpo que parecía tallado por los mismísimos dioses. Era alto, muy alto, su cabello negro estaba desordenado, y en cuanto me miró por encima del hombro algo raro me recorrió.

Pero vino nuevamente, vino y se sentó a mi lado, se acostó en el sofá y después hizo que me acostara encima suyo, no sé por qué sonreí, pero miré su tatuaje del dragón, este iba desde su cuello hasta su brazo, era un dragón Chino con detalles rojos, algo muy peculiar pero al mismo tiempo me daba curiosidad.

—¿Qué significa?— pregunté haciéndole abrir los ojos ojos y señalé al dragón, él me miró unos segundos.

Seguramente tomando la decisión de decírmelo o no.

—Es un dragón Chino— susurró con la mirada perdida en el techo— El dragón Chino es símbolo de muchas cosas— me acomodé prestando atención— Poder, riqueza, inteligencia, sabiduría y fuerza.

Todo lo que es él, pero incluso cuando dijo esas palabras supe leerlo fácilmente, parecía que se lo había hecho por un motivo, como si le hubiese pasado algo.

Quitó su mano de mi espalda... y me sentí muy feo, como si yo tuviese que ver con la razón con la que él se lo hizo.

—Suena a que te lo hiciste por una razón— dije sin una sonrisa, más bien, apartándome un poco de él, que me miró como si hubiese dicho el motivo correcto— ¿Por qué?.

—Todos tenemos una historia, tú tienes historia, yo tengo historia— su mirada se perdió en el techo de la habitación— Es nuestra decisión, debemos decidir si queremos que los demás lo sepan.

—Entiendo— me senté en el sofá, incluso él hizo lo mismo— estaba muy cansada de que fuera... frío, pero yo no era tan estúpida como para ir una y otra vez detrás de él— Creo que es mejor que me vaya, mañana tengo que irme.

Dije poniéndome de pie, él no hizo nada, no se movió, se quedó observándome mientras yo recogía mi ropa esparcida por el suelo. Cuando la tomé y me puse de pie, lo vi, estaba parado frente a mí, tomándome de la muñeca.

—Duerme aquí.

Desconcierto.

Me quedé en desconcierto cuando dijo eso, creo que hasta en shock repentino, tanto tiempo que no me di cuenta de que él estaba parado frente a mí aún, esperando mi repuesta.

—Yo...—tomé una respiración profunda.

Pero asentí.

Él pareció satisfecho en cuanto le respondí, incluso hasta me guió a la cama, estuvimos los dos allí, sin tener contacto físico.

Mirando hacia el techo yo también como él, no tenía nada que decir, yo no sabía que decir, estábamos en un silencio incluso y no quería ser siempre yo quien lo rompiera.

—Hace mucho tiempo sucedió— lo miré sorprendida en cuanto habló— La razón por la que estoy aquí, es por el legado de mis padres.

De alguna forma asumí, que se hizo ese tatuaje porque quería ser sabio, inteligente, fuerte, todas esas cosas.

—¿Y ellos donde están?— me tomé la libertad de acercarme más.

—Los mataron.

De nuevo todo se quedó en silencio, él lo decía tranquilo pero pude ver en sus ojos la rabia...

—Yo... lo siento— cuando dije eso, se volteó hacia mí, mirando mi expresión como si quisiera leerla, como si esperara algún tipo de reacción.

—¿Por qué lo sientes?— preguntó con esa nota de curiosidad, como si lo preguntara con doble sentido.

Hunters - Hwang Hyunjin [+18] [Completa]✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora