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Esa mañana nos levantaron a todas, a cada una a la misma hora y nos dijeron que no podían haber retrasos, cuando salimos al entrenamiento después de vestirnos nos llevaron a desayunar, el vestuario consistía en una camiseta de tirantes negra y unos pantalones de camuflaje gris oscuro, unas botas militares, lo raro era que una parte de nosotras estaba vestida así, y la otra vestía con camuflaje rojo.

Al principio me pareció muy sospechoso, y todo empeoró cuando nos subieron a unos camiones blindados que no tenía ni idea de que podía significar, ¿para que tanta seguridad?, yo me encontraba con mis amigas ahí viendo cómo llevaban también a los chicos.

—¿A dónde crees que nos llevan?— preguntó Luna, mirando, o bueno, tratando de mirar hacia afuera.

Yo fruncí el ceño, últimamente siempre que hablaba hacía esto de fruncir el ceño porque todo me parecía muy extraño y cuando yo analizaba las cosas acostumbraba a hacer ese gesto.

—No tengo ni idea, pero sea lo que sea que esté pasando, no debe ser nada bueno— miré a los guardias y susurré— no para nosotras.

Las miradas que compartimos fueron de preocupación porque sí, debe haber un motivo por el cual nos estaban sacando así de ese lugar para ahora dejarnos en el bosque o bueno, cuando llegamos tuvimos que bajar con las manos atadas como si fuéramos prisioneras —aunque eso es lo que somos— a un lugar en el que ya se encontraba él, no me sorprendí de verlo aquí.

El mismo hombre de cabello oscuro que ayer me había dicho que conservara una daga, el mismo con el que había peleado y ese que todavía me provocaba curiosidad.

Estaba parado con un traje negro y esta vez dos hombres estaban a su lado, uno tenía la piel algo bronceada, era castaño, y otro era tan rubio que se podía decir que su cabello resplandecía por el sol que alumbraba en el cielo nuestras siluetas.

Noté que los tres tenían cosas similares, ejemplo, los sables detrás de sus espaldas. Y también los mismos rostros de autoridad aunque, el del medio, Hunter, su expresión era genuina.

Hizo una señal con sus dedos y los guardias nos separaron, los chicas que estaban vestidas como nosotras vinieron hacia aquí, y así pasó lo contrario con el resto.

Incluso Xian estaba aquí, detrás de los primeros tres junto a esa chica de cabellos castaños del otro día en la primera práctica y además, Miss perfecta, porque sí, así le denominé a la mujer que siempre nos daba sermones, esa elegante de cabello negro.

—Durante estos días fueron entrenados de manera estricta para sobrevivir— comenzó a decir Hunter, con seriedad— Este día, probarán sus habilidades.

Se escucharon murmullos, cuando dijo probarán, me hice idea de que sería algo así como un juego entre nosotros, algún combate o algo.

—Y aunque muchos creen que esto solo es un simple juego, verán que no es de esa manera— sacó su espada y después sonrió, sonrió... ¿por qué sonreía tan ampliamente?— Explícales.

Dijo el peli negro dándole la palabra al del cabello castaño y piel bronceada, este, tenía las mejillas un poco abultadas y era alto, no tanto como Hunter pero lo era.

—Son dos equipos— dijo éste sacando una daga de su bolsillo— En cada equipo hay la misma cantidad de personas. Ustedes— señaló al equipo contrario, los que vestían de rojo— Serán los atacantes, y ustedes— nos señaló a nosotros— Deberán cuidarse.

Se escucharon susurros por todas partes, pude ver sonrisas de alivio en los rostros de los del equipo contrario.

—Esto no me gusta nada.

Le susurré a Minghao que tenía el sueño fruncido. El mismo tipo de antes habló.

—Solo tienen dos opciones— enumeró con sus dedos— Matar— entonces sí que todos estuvimos sorprendidos— O morir.

Hunters - Hwang Hyunjin [+18] [Completa]✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora