Hunters - Hwang Hyunjin [+18] [Completa]✔️

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El ambiente en casa de los Hwang era uno que realmente no sabría como describir, no era siniestro, no era nostálgico, más bien, cuando pasabas por los pasillos de la enorme mansión te podrías dar cuenta de lo unida que siempre fue la familia, lo digo por los cuadros familiares en los que estaban cuatro miembros, una señora y un señor vestidos elegantemente y frente a ellos vestidos de igual forma, un niño de cabellos oscuros solo un poco más grande que una niña de cabellos castaños.

Cuando vi ese cuadro, un recuerdo vino a mi mente.

Yo estuve ahí, estuve ahí el día en que mi padre entró a esta casa y asesinó a los padres de Hyunjin, debía haber otro motivo para que mi padre los quisiera asesinar... no solo enemistad, había algo más.

Lo único que recuerdo es como mi padre me dijo un día que yo era su favorita, y como su favorita, él me había escogido para ver cómo asesinaba a sus más grandes enemigos.

Solo recuerdo dos cuerpos inertes en el suelo y a mi padre con una pistola, nada más, ni siquiera se la edad que yo tenía cuando eso.

—Eso fue hace tanto tiempo que ni siquiera se la edad que tenía— escuché la voz de Hyunjin desde atrás como si me hubiese leído la mente, lo observé, su cabello estaba húmedo y estaba descalzo como yo, con tan solo una camiseta negra y pantalones del mismo color— Y suelo tener la mejor memoria.

Su ceño estaba fruncido.

—Que lástima que yo no pueda decir lo mismo a cerca de mi memoria...—sonreí nostálgica, olvidándome de todo y mirando de nuevo el cuatro familiar— No cambiaste mucho.

—No físicamente— de nuevo frunció el ceño.

—Te pareces mucho a tu mamá...—lo miré y después a la señora, ella era de piel pálida, tenía una sonrisa encantadora y sus manos estaban apoyadas en los hombros de Hyunjin— Demasiado, diría yo.

—Jia sacó mucho más de ella— también tenía él una sonrisa nostálgica, me miró— ¿Quieres cenar?

—¿Eh? ¿No es muy temprano?— él solo tomó mi cintura, para comenzar a caminar.

—Suelo dormir temprano.

—¿Por qué?

—¿Por qué será, Lyra?— era una de esas veces en las que lo veía divertido, me gustaba— Porque hago demasiadas cosas.

—Trabajo— susurré— Creí que me habías invitado aquí para pasar tiempo juntos, no para que te fueras y me dejaras sola.

Él cambió su expresión a una neutra.

—No puedo hacer eso, lo sabes.

—¿Y qué quieres?— coloqué mis brazos en jarra— Hyunjin, no puedes pasar todo el tiempo entrenando a chicos para que maten.

—Piensa por una vez que el único que le puede dar una oportunidad a esos chicos, soy yo— explicó.

—Tú también los matas, tú los...—recordé esa vez en el bosque, en donde muchos murieron— También pude haber muerto.

—No— parecía muy seguro de sí mismo— No ibas a morir.

—Porque me hubieras dado una daga no quiere decir que no hubiese podido haber muerto.

—Lyra— me miró a los ojos— No ibas a morir.

—¿Por qué estás tan seguro?

—Yo no estoy seguro— continuamos caminando— Es la realidad.

Y la realidad era que él sabía de mi vida, de que me entrenaron muy bien par ese tipo de persecuciones, me invadieron unas ganas muy fuertes de decirle que lo recordaba todo, solo para echárselo en cara, pero me controlé durante toda la cena en donde a penas probé un bocado, ese día, me sorprendí mucho cuando nos acostamos en su habitación, en la misma cama, e intentó tocarme, pero no lo permití.