Un Deseo (Mitsuba x Kou)

Capitulo 18

Los tres caminaban por las calles de aquel misterioso pueblo repleto de personas. Estaban alerta por cualquier movimiento extraño de esa gente, pero todos aparentaban ser como cualquier otro humano del mundo real.

- ¿Puedes sentir a Yjiama por algún lado?- Preguntó Teru, que se encontraba junto a Hanako a unos varios centímetros de Kou.

El de ojos azules caminaba delante de los otros dos, debido a que quería encontrar a Mitsuba lo antes posible.

- Ahora es mucho más difícil que antes, es como si todo este lugar estuviera emanando su energía demoníaca. Me da escalofríos.- Hanako miraba a todas las personas a su alrededor con desconfianza.

- Creo que es más probable que él venga a buscarnos antes de que siquiera lo encontremos.- Dijo el mayor de los Minamoto.

- Je, supongo que tienes razón.- Hanako sonrió un poco.

- ¡Oigan! ¡Dejen de charlar y aceleren el paso!- Gritó Kou, que intentaba ignorar el dolor que sentía.

- Ni siquiera sabemos dónde va...- Hanako se detuvo al ver una silueta conocida entre la multitud.- ¡Cuidado! ¡Yjiama está ahí!

Los tres se pusieron alerta, y toda la gente los miró cómo si estuvieran locos. Hanako ya no podía ver al demonio entre las personas.

- ¿Yjiama? ¿Qué es eso?- Preguntó una mujer confundida.

- ¿No lo conoces? Es esa vieja leyenda que se contaba para que los niños duerman, pero ya no se suele usar.- Le explicó otra mujer que la acompañaba.

- ¿Será algún tipo de actuación?- Dijo otro hombre.

- Ya no puedo sentirlo, ya no siento la energía de Yjiama. Se está ocultando de nosotros.- Dijo Hanako bajando un poco la guardia, ya que no podía localizar su ubicación.- Continuemos, sigan con cuidado.

Entonces una sensación de inseguridad recorrió todo su cuerpo cuando notó que los dos hermanos desaparecieron sin dejar rastro.

- ¿Kou? ¿Teru?- Hanako los llamó a ambos, pero no recibió respuesta.- Perfecto.

Hanako miró los carteles de los edificios y se encontró con uno llamado orientación. Caminó hacia allí esperando encontrar alguna forma de ubicarse.

- ¡Hermano! ¡Hanako!- Kou gritaba sus nombres, pero era inútil.

- ¿Ese niño estará perdido?- Preguntó una mujer que caminaba cerca suyo.

- Es uno de los que hizo ese escándalo, seguramente también está actuando.- Le respondió un hombre que se encontraba sosteniendo su mano.

- Si, estaban hablando sobre ese Yjiama del que me había contado mi madre cuando era pequeña, eso me trajo bastante nostalgia.- Le comentó la mujer al que parecía ser su esposo.

Esas dos personas continuaron su camino, entonces escuchó a otras hablando sobre el mismo tema.

- ¿Qué es lo que sabes sobre ese Yjiama?

- Oh, sí, es una leyenda que fue pasada de boca en boca desde hace muchos años, no es muy conocido en cualquier lugar que no sea este pueblo. La leyenda cuenta que una vez hubo un demonio que engañaba a los humanos para que hagan tratos con él, y una vez eran engañados, los persuadía para que asesinen a alguien y le entreguen su alma.- Relató la mujer mientras leía una revista.- Se usaba para asustar a los niños que se portaban mal, pero ya no es usado tan frecuentemente.

Kou entendió el relato instantáneamente. Kou era uno de esos ilusos que cayeron en la trampa de Yjiama.

No era momento de arrepentirse. Debía volver con Hanako y Teru.

Comenzó a sentir cómo el dolor que le había ocasionado Yjiama en su anterior encuentro empeoraba aún más.

- Oh, eso debe doler, ¿verdad?- Aquella asquerosa voz sonó detrás de Kou.

Kou se dio la vuelta rápidamente y retrocedió varios pasos al ver a Yjiama a unos escasos centímetros de él.

- Lo siento, no pretendía asustarte. Sólo pasaba para verte por un momento antes de mi parte favorita del cuento.- Yjiama acomodaba su corbata mientras hablaba tranquilamente.

- ¿A qué te refieres?- Kou estaba indefenso frente al demonio.

- La parte en la que uno de tus dos acompañantes muere.- Estas palabras dejaron a Kou casi en shock, pero intentó ignorarlas.

- No estés tan confiado. Teru maneja su báculo mucho mejor que yo, y Hanako sabe pelear más que bien.- Kou dejó de retroceder y se plantó con firmeza.- Voy a retenerte si es necesario, estoy seguro de que ellos llegarán a Mitsuba si te mantengo aquí.

- Je, me da gracia tu inocencia. ¿Y si te digo que no soy el verdadero Yjiama?- Yjiama dijo esto con una sonrisa, dejando en jaque a Kou.

- ¿Q-qué?

- Estuviste hablando con una ilusión todo este tiempo. ¿Quieres saber dónde está el verdadero yo?- Preguntó Yjiama con una sonrisa infantil en el rostro.

Kou no respondió. Temblaba por pensar en la única respuesta que se le ocurría para esa pregunta.

- Deberías ir a ayudar a tu amigo Hanako. Puede que no se espere lo que se le acerca.- La ilusión de Yjiama desapareció, dejando a Kou desolado.

- ¡Hanako!- Gritó Kou dándose la vuelta y corriendo en busca del fantasma.

La aparición entró al lugar con el cartel de orientación. Había un escritorio dentro, pero ninguna persona atendiendo el lugar.

Hanako tocó la pequeña campana apoyada en el escritorio, intentando llamar a alguien que lo atienda, pero nadie venía.

Entonces escuchó unos pasos. Los pasos se volvieron lo único que podía escuchar. Cada vez se escuchaban más fuerte.

- ¿Hay alguien ahí?- Hanako se preparó para cualquier ataque.

Los pasos provenían de una puerta detrás del escritorio. La puerta se abrió, dejando ver a una señora bastante vieja, que caminaba llevando un bastón para mantenerse de pie.

- Lamento hacerte esperar, ya no soy tan rápida como solía serlo.- Dijo la señora poniéndose detrás del escritorio.

Continuará...

Ey, qué tal. Perdón por haber tardado en subir caps, pero ahora voy a intentar compensarlo con varios seguidos.

Además, ya nos encontramos en la recta final de la historia, así que es muy posible que termine la historia en uno de estos días.