Capitulo 4

2.6K 233 207
                                    

El fantasma y el exorcista caminaban dirigiéndose hacia la tienda donde arreglarían la cámara del pelirrosa. Cuando hablaban la gente veía raro a Kou, ya que pensaban que estaba hablando solo.

No faltaban los clásicos comentarios un poco arrogantes y subidos de tono de Mitsuba en el camino.

Entonces llegaron a la tienda donde Kou le entregó la cámara al señor que atendía allí.

- Bien, no está muy dañada, es solo el lente, mañana ya estará reparada. Serán 2.500 yenes.- Dijo el encargado de la tienda mientras revisaba la cámara de Mitsuba.

Kou no había pensado en que el debía pagar, pero afortunadamente siempre llevaba gran parte de sus ahorros en su bolsillo, solo por si acaso.

Kou miró al pelirrosa quien solo levantó sus hombros, en señal de que tendría que pagar el. Luego de eso, los dos salieron del local.

- Ahí se fueron casi todos mis ahorros.- Dijo Kou con tristeza.

- Fue por una buena causa, mañana tendré mi cámara de nuevo.

- Mañana no tendré mi dinero.- Dijo Kou rascando su nuca.

- Ya deja de llorar, aunque si estuviera vivo y hubiésemos venido, tampoco creo que yo hubiera pagado.- Admitió Mitsuba comenzando el camino de vuelta a la escuela junto a Kou.

Así transcurrió el día hasta que los dos tuvieron que volver a sus hogares. Aunque en el caso de Mitsuba es la escuela.

Al día siguiente, el ojiazul se levantó temprano muy entusiasmado, aunque no sabía el por qué.

Antes de ir a la escuela se dirigió al lugar donde dejaron la cámara y la recogió para luego dársela a Mitsuba.

El hermano de Kou, Teru, notaba el extraño comportamiento del ojiazul, así que pensó en vigilarlo para ver que trama.

Al llegar a la escuela, Kou empezó a buscar a su amigo el fantasma, pero no lo encontraba por ninguna parte.

- ¡Ey! ¡Niño rubio!- Exclamó Tsukasa.

- Tú...-

El exorcista sacó enseguida su báculo.

- No se como lo hiciste, pero de un momento para otro el misterio número 3 desapareció.- Dijo Tsukasa con una cara no muy amigable.

- ¿Qué demonios quieres?

- Nada importante, solo al misterio número tres devuelta.

- Busca a otra persona para ocupar ese puesto.- Kou ni siquiera podía pensar en que Mitsuba vuelva a ser un misterio.

- Parece que estas de mal humor, déjame alegrarte.

El apareció de la nada delante del ojiazul y sin que este logre reaccionar a tiempo, colocó un dedo en su sien y posteriormente Kou cayó inconsciente.

Al despertar, Kou se encuentra en un extraño lugar junto a Tsukasa y dos personas más.

- D-donde estoy.- Kou abrió los ojos.

- Oye, que lindo bastón.- Dijo Tsukasa mientras veía con detalle el báculo de Kou.

La aparición empezó a jugar con el arma exorcisadora de Kou.

- Ya deja eso. Solo necesitamos al misterio número tres de nuevo.- Dijo Natsuhiko Hyuuga.

- No, no le harán algo de nuevo.- Kou iba a impedir a toda costa que dañaran a Mitsuba otra vez.

- Eres persistente.- Dijo la chica de pelo verde claro.- Estamos siendo buenos contigo, ¿qué fue lo que hiciste para recuperarlo?

- No crean que voy a contarles.- Dijo Kou que no tenía fuerza para ponerse de pie.

- En realidad si, ya que él es un misterio.- Tsukasa dejó el báculo de Kou a un lado.

- ¡Es un misterio por su culpa! El nunca pidió serlo.- Exclamó Kou con enojo.

- Cállate, Tsukasa. Es imposible que tu solo hayas podido quitarlo del reino de los espejos. ¿Quien te ayudó?- Preguntó Nanamine con su expresión apática usual.

- ¿Acaso fue Amane?- Preguntó Tsukasa.

- Nadie me ayudó.

- Bien, así son las cosas. Natsuhiko, encárgate de el.- Dijo Nanamine saliendo del lugar.

- ¿Qué?- Lo último dicho por la peliverde sorprendió a Natsuhiko.

- Ya sabes, mátalo.- Tsukasa recorrió su cuello con su dedo índice, en señal de que mate al rubio.

Los dos se fueron por una de las puertas de la pequeña habitación.

- ¿D-de verdad esperan que te asesine?

Entonces la misma música de jazz que escuchó Kou cuando Yjiama apareció volvió a sonar.

- ¿Qué es esa música?- Preguntó Natsuhiko al escuchar aquella canción de Jazz.

- No de nuevo.- Dijo Kou aterrado al ver cómo la niebla de Yjiama empezaba a aparecer en la habitación.

De la nada, Natsuhiko cayó al suelo inconsciente. Detrás de él se encontraba Yjiama arreglando su corbata.

- ¿¡Qué demonios?!- Kou retrocedió unos pasos al ver a Yjiama aparecer de la nada.

- Que lindo volver a verte, Mocoso.- Saludó Yjiama caminando hacia Kou, pisando el cuerpo inconsciente de Natsuhiko.

- ¿¡Q-qué haces aquí?!

- Deberías agradecerme por ayudarte.- Dijo Yjiama ofreciéndole una mano para que Kou se ponga de pie.

- ¿Por qué me ayudas?- Preguntó Kou parándose por su cuenta, sin aceptar la ayuda de Yjiama.

- Yo no puedo conseguir las almas humanas, solo puedo conseguirlas por medio de un humano que me la entregue. Si pudiera hacerlo yo mismo le habría devorado la cabeza sin dudarlo.

De la nada, los dos estaban en los pasillos de la escuela.

- Bien, nos vemos luego.- Se despidió Yjiama.

Una niebla negra cubrió al demonio y luego despareció junto a él.

Continuará...

Para los que leyeron esta historia antes de que comience a editarla se habrán dado cuenta de que en esta nueva versión Natsuhiko no muere.

Porque si, en la versión original Natsuhiko muere devorado por Yjiama. Y de hecho hay un guiño a eso en el diálogo de Yjiama donde dice que le habría devorado la cabeza sin dudarlo.

Otra vez, lamento la tardanza y el horario en el que subo el nuevo cap. Nos vemos en el siguiente cap.

Un Deseo (Mitsuba x Kou)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora