𝐋𝐨𝐧𝐝𝐫𝐞𝐬, 𝟏𝟗 𝐝𝐞 𝐦𝐚𝐲𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝟐𝟎𝟐𝟏.
—¡Eh, eh, eh! Más despacio, Hamilton.
—¿Enserio, Mount? No puedo pronunciarlo aún más despacio.
—Sí puedes. Ahora, repítelo. Alto y claro, por favor.
—Al final voy a acabar cobrándoos, porque esto de dar clases de español gratis no me mola, eh.
—Te lo compensaremos después con un helado o...con lo que quieras. Ahora, repítelo.
—No dejes nunca de soñar, solo quien sueña aprende a volar.
Y, una vez más, pronunció aquella frase en voz alta. Y al igual que las cinco veces anteriores, las muecas de incertidumbre de Tammy, Ben y Mason fueron instantáneas.
—Nos ha insultado —declara Benjamin—. No tengo pruebas, pero tampoco dudas.
—¡No, no, no! Ha dicho algo de volátil, estoy convencido —y fue aquella aportación de Tammy la que sonsacó una sonora carcajada a Leire y Kepa.
—Seguid así, que vais por buen camino —agrega el guardameta con gracia. No recordaba en qué momento había dejado los entrenamientos en un segundo plano para acabar uniéndose a aquel cuarteto; pero lo que sí tenía claro era que le resultaba más entretenido presenciar los indagues de los británicos que darle patadas a un balón.
—¿Y si empiezo enseñándoos lo básico y dejamos esto para cuando entendáis algo más a parte de un simple hola? —sugiere la joven tras comprobar que pronunciando frases al azar no iban a llegar a ningún puerto.
No contentos con la pregunta de la chica, los futbolistas no tardaron en pedirle que pronunciase otra frase; sin embargo, la nueva cita que Leire iba a recitar, en aquella ocasión de El rey león, se vio interrumpida por la presencia de los dos alemanes del grupo.
—¿Qué hacéis y por qué no os aterra la bronca que Tuchel pueda echaros? —interpela Timo a la vez que se sienta en el césped, justo entre Mason y Kepa.
—Estamos intentando sacar nuestro don para los idiomas a la luz —explica Mount entre risas—. Oye, ya que estáis aquí, ¿no queréis soltar vosotros alguna frasecilla en alemán?
—¿Recordáis lo que pasó la última vez que me pedisteis eso?
—Que casi invocamos a un ente maligno al pretender repetir tus palabras —recuerda Chilwell—. Pero en esta ocasión nos limitaremos a intentar averiguar lo que decís, sin procurar creernos alemanes.
—Pues como os vaya como el español... Apaga y vámonos, porque no habéis dado ni una.
—Nada. Con el alemán vamos a arrasar —sentencia Tammy.
—Pero, eh, no os calentéis —advierte Mason—. Algo asequible que podamos traducir, ¿vale? No os vengáis arriba como lo ha hecho esta.
—¡Que eran frases sencillas!
La discusión entre el británico y la española fue instantánea. Mientras, Havertz y Werner intercambiaron un par de miradas, intentando llegar a la conclusión de qué podían decirles a sus amigos.
—Aclarado el que en ningún momento os he insultado, ¿Havertz?
—¿Una frase en alemán? —cuestiona Kai observando con atención a Leire.
—Ajá.
Volvió a mirar a Timo, pero al instante regresó su mirada hacia la joven. No estaba muy seguro de lo que iba a decir, pero su lengua actuó más rápido que sus pensamientos.
ESTÁS LEYENDO
Dᴜsᴋ ᴛɪʟʟ ᴅᴀᴡɴ ||Kᴀɪ Hᴀᴠᴇʀᴛᴢ||
Fanfic❝I'll hold you when things go wrong.❞ • • • • • [REAL LIFE | SOCIAL MEDIA]