🌈CHAPTER TWENTY EIGHT

2.9K 538 249
                                    

¿Quién es Aitana?

Mi hermanastra, la estrella de papá. Ya saben, la niña con buenas notas, claramente ella paga a escondidas para pasar, y aunque yo lo sé no le diría a papá, es su orgullo… aunque no es su hija biológica, lo es.

Mamá y papá se separaron cuando yo tenía cinco años, mi padre engañaba a mi madre con la madre de Aitana, y bueno, él se fue con ellas Aitana y Mackenzie Adelson, quienes ahora se apellidan o se hacen llamar O´Neill. Ellas dos son tal para cual, dos interesadas… bueno a veces también lo soy, pero no estamos hablando de mí. Mi padre le dio toda la atención a Aitana, toda una niñez llena de lujos y comodidades, no digo que yo no tuve eso, pero Aitana tenía algo que yo no, aparte de belleza, ella tenía una figura paterna.

Los siguientes años fueron iguales, la única vez que veía a papá era para navidad, la pasaba con su familia, pero toda la noche el tema de conversación era Aitana, así que cuando cumplí doce, decidí ya no ir con él.

Y bueno, ahora estamos aquí, en la sala, Aitana está sentada frente a nosotros mientras cuenta lo increíble que le va en la universidad, si… dije universidad.

―Y fui la mejor de mi clase ―termino por decir con una cara de orgullo.

― ¿Y cuánto les pagaste esta vez? ―cuestione, su cara de orgullo de desvaneció, Aidan tapo su boca para evitar reír. Aitana giro los ojos y se acomodó de nuevo en el sofá. ― ¿Ya pasaron las tres horas? ―pregunte hacia Aidan, el vio su teléfono y negó.

―A penas han pasado diez minutos.

― ¿Qué? Lleva hablando como una hora ―suspire frustrada señalándola.

―Bien, como sea… quiero dormir ―dijo Aitana.

―Te toca, es tu casa tú sabes ―dije hacia Aidan, me acomodé en mi lugar cerrando los. Aunque no vi, sé que giro los ojos.

Después de unos minutos de silencio sentí como alguien se sentaba a un lado de mí.

― ¿Dónde está? ―pregunte sin abrir los ojos.

―En tu habitación ―abrí los ojos de golpe.

― ¿Por qué ahí? ―pregunte en reproche.

―Porque ya no hay más habitaciones.

―Pero la pudiste dejar en el pasillo, le ponías una mantita y ya.

―Haría mucho estorbo ―ladee mi cabeza y asentí comprendiendo su punto, después de unos segundos comenzamos a reír.

―Eres un idiota.

―Y tu una aguafiestas ―gire lo ojos, y me acomode entre sus brazos― Aitana esta dormida ―murmuro de repente después de unos minutos de silencio.

― ¿Y qué? ―murmure de vuelta, abrí mis ojos lentamente y me levante para verlo. Ambos sonreímos con malicia y nos levantamos del sofá para ir a la habitación de Aidan y tomar algunas cosas, marcadores y lapiceros para ser exacta.

Después de tomar lo necesario fuimos hasta la habitación donde estaba Aitana, entramos sin hacer ruido y al verificar que estaba dormida nos acercamos a ella.

Me puse de cuclillas para estar a la altura de la cama y al ver que, si estaba más que dormida asentí, dando a entender que ya podíamos iniciar.

― ¿Crees que a Aitana le gusten los bigotes? ―cuestiono Aidan quien hacia estrellas en la mejilla de la antes mencionada con marcador.

―No lo creo ―respondí, en mi caso estaba pintando su costosa manicura.

―Con más razón lo debería hacer ―reí por lo bajo y vi como Aidan sacaba un marcador color negro, lo destapo y comenzó a hacer un lindo bigote en la perfecta cara de Aitana.
Deje de hacer lo que estaba haciendo para poder ver lo que hacía Aidan. No sé en qué momento se me dio por ver aquel marcador, en donde pude ver como en letras GRANDES decía “Permanente”

Abrí los ojos a mas no poder intentando no reír.

―Aidan… ―murmure.

― ¿Qué sucede? ―pregunto concentrado en lo que hacía.

―El marcador es permanente ―señale el mencionado y Aidan tapo su boca.

Aitana comenzó a moverse, era hora de irnos. Como pudimos tomamos todos los materiales y salimos de la habitación, al llegar a la habitación de Aidan nos tumbamos en la cama riendo.

Al terminar de reír me acomode en la cama, boca abajo, mis manos estaban cruzadas debajo de mi cabeza, Aidan giro su vista hacia mí y sonrió. Imité su acción y puse mi mano sobre su mejilla.

―Debes dormir ―murmure. 

―No tengo sueño.

―Si tienes ―contradije ― pero tranquilo, yo te acompaño a dormir ―informe cerrando mis ojos, Aidan soltó una risita algo que contagio, pues imite su acción.

―Pero no tengo sueño ―volvió a decir. Abrí mis ojos suspirando y conectando con los suyos. ―Por la mañana no terminamos de hablar.

―Y no vamos a seguir hablando de eso… No quiero ―voltee mi cuerpo dándole la espalda. Sentí como sus manos rodeaban mi cintura y su mentón reposaba en mi hombro.

―Se que investigaste sobre esto ―murmuro, baje la mirada levemente― y sé que sabes que esto no tiene cura ―aprete mis ojos y gire a verlo.

― ¿Y qué quieres decir con eso?

―Sabes bien a lo que me refiero.

―No quiero que mueras ―murmure después de unos segundos, Gallagher no dijo nada más, simplemente me abrazo, recargando mi cabeza sobre su pecho.

🌈𝑮𝑨𝑳𝑳𝑨𝑮𝑯𝑬𝑹 [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora