❝El diamante más valioso del mundo ha sido robado❞
¿Quién pudo haber sido tan sagaz de lograrlo?
⇢ Yoongi es un tipo "peligroso", el principal objetivo de la policía en toda Corea del Sur.
⇢ Namjoon es un joven pelinegro con una vida común y corrien...
Sin duda alguna, el transcurso de sus vidas —ahora juntas— fue algo caótico al comienzo. Yoongi tuvo que renunciar al Servicio Secreto en el cual había dado todo de sí y por lo cual fue algo difícil de asimilar al principio. Ahora había aceptado tomar un empleo como un oficial de la policía de manera común y menos arriesgada.
Tal vez fue algo complicado, pero con Namjoon a su lado todo parecía ser mejor. Ambos pudieron notar el sentimiento mutuo que se traían y decidieron tomarse el tiempo adecuado para conocerse mejor, aprovechando que actualmente podían vivir con tranquilidad y sin amenazas de criminales.
Los meses fueron pasando y Yoongi luego de tantas inseguridades, terminó por declararse al castaño frente a ambas familias que ya se conocían gracias a los propios jóvenes. Namjoon aceptó totalmente feliz y lo envolvió en un fuerte abrazo, se habían convertido en una pareja oficial.
Lo mejor de todo para Namjoon fue que al fin podía presumir al guapo y sexy novio que tenía cada vez que él lo venía a recoger del trabajo en el banco. Yoongi siempre se ganaba muchas miradas a la par que traía consigo a su enorme motocicleta que había adquirido hace menos de unas semanas.
Algunas costumbres jamás se irían.
Y otro acontecimiento que mantenía al castaño totalmente feliz era que su abuela y los padres de Yoongi vivían con ellos en la casa del último mencionado.
SungJae insistió en que podían residir junto a ellos ya que la casa era enorme y se sentía muy vacía. Además que no soportaba el tener que dejar que su hijo se fuera nuevamente y los dejara en desolación.
Así que ahora se habían convertido en una cálida y pequeña familia.
── Yoon-Yoongi~ ── se quejó Namjoon cuando sintió un par de veces húmedos en su hombro desnudo.
── Nene...— su voz tuvo un atisbo de ronquera por despertar hace poco. ── Despierta ya, estamos solos en casa. ── sonrió ladinamente a pesar que el pálido no pudiera verlo.
── ¿Y eso qué? ── se quejó, cerrando los ojos con más fuerzas en un vago intento de volver a dormir.
── No hemos tenido mucho tiempo para los dos desde hace una semana.
Namjoon sintió que el lado derecho de la cama se hundía debido a que el rubio había vuelto a echarse. Unos trabajados brazos rodearon su cintura, confirmando lo que había pensado.
── Yoongi, tengo sueño~
El mencionado lo apegó a su pecho, haciéndole sentir su palpable erección mañanera. ── Yo puedo quitártelo. ── susurró gravemente.
El castaño se estremeció, arqueando levemente su espalda y haciendo contacto más íntimo con el miembro de su novio.
── ¿Qué dices? ── le incentivó, simulando suaves embestidas.
La respuesta fue un dulce gemido, sacando una sonrisa satisfactoria en el rostro del rubio.
Namjoon se alejó brevemente de Yoongi y se arrastró hasta sentarse sobre él, acomodando sus glúteos justamente en aquella erección que sobresalía y haciendo tortuosos movimientos de cadera.
── Oh, Namie ── jadeó pesadamente, sin quitarle aquel tono provocador y sugerente.
──No me hagas esperar. ── soltó un suspiro, la habitación comenzó a tornarse caliente como las respiraciones de ambos.
Luego de muchos jadeos entrecortados, estocadas certeras y gemidos suaves, ambos llegaron al orgasmo más delicioso que durante ese breve periodo de abstinencia no pudieron disfrutar debido a la falta de privacidad.
Sus respiraciones estaban entre cortadas y pesadas, el aire era aún cálido en la habitación y Yoongi terminó por recostarse sobre el pálido pero sin llegar a lastimarlo.
── Eso fue increíble y hasta ya lo estaba extrañando. ── bromeó, sintiendo la risita nasal del rubio sobre la piel sensible de su cuello.
── Hueles igual de bien, bebé. ── aspiró fuertemente para luego dejar suaves besos por toda la zona.── Y por eso creo que deberíamos hacerlo seguido.
Esta vez fue el turno de Namjoon para reír. ── Sabes que no podemos por nuestra familia.
── ¿Y quién dice que lo haremos acá?
── ¿Qué? ¿De qué hablas? ── removió sus hombros intentando alzar el rostro de Yoongi.
El rubio salió de su escondite para mirarlo con dulzura. ── Obtuve unos boletos para ir nuevamente a Praga, pero esta vez para disfrutarnos mutuamente.
Una amplia sonrisa se dibujó en la cara de Namjoon. ── ¿E-en serio? ¿Pero cómo...?
── Las robé.
── ¡¿QUÉ?!
Yoongi soltó sonoras carcajadas, ganándose los golpes del castaño. ── Es broma. ── resopló calmándose.—── Tal parece que el Gobierno decidió darme una cuota sumamente alta de dinero por mis servicios al país y por haber acabado con Gwon.
── Entonces...
──Entonces tenemos un largo tiempo para recorrer Praga y otras ciudades que quieras, incluso más países de Europa si así lo deseas.
Namjoon se abrazó al cuello de su novio y le dio muchos besitos por todo el rostro. ── Te amo, te amo, te amo.
── Hey. ¿Ahora si me lo dices?
── ¡Yoongi! ── le reprochó.
── Está bien, está bien. ── rió suave, buscando la boca de Namjoon para poder besarlo con plenitud.
Tal parece que sus vacaciones estaban por empezar muy pronto.
Y esta vez, estando juntos con tranquilidad.
↷ ·˚ ༘ fin. ↷ ·˚ ༘
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Muchas gracias por haber llegado hasta aquí, este es un pequeño epílogo tranquilo, pero el que contiene smut explícito está en la cuenta privada de wattpad de la autora.
Muchas gracias por haber leído y apreciado The Wonseog en version YoonNam ♡
