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Jeju


Jungkook resopla por quinta vez en el día cuando Jieun lo arrastra hacia la habitación. Es su último día en Jeju y todo ha ido como se suponía; la reunión con los socios salió bien, tanto que, de hecho, jungkook consiguió -por debajo de la mesa- una oferta de trabajo en Busan. Oferta que estaba considerando tomar, pues estaba seguro de que necesitaría un nuevo empleo después de terminar con la hija del jefe.

Jieun se subió sobre el pelinegro, meciéndose y frotándose mientras jadeaba por continuar, mientras que Jungkook no podía hacer nada más que seguir.

Eun, aprovechando que Jungkook jadeaba con los ojos cerrados, tomó el teléfono del pelinegro, presionando el botón de videollamada de su querido esposo y dejando el teléfono sostenido en la mesita de noche.

Cuando la imagen de Taehyung emocionado apareció en la pantalla, Jieun se dedicó a desvestir al hombre bajo ella, dejando que el rubio viera desde el otro lado de la llamada, que en efecto, el hombre con el que había compartido su vida ya no era suyo.

El menor miraba casi resignado, torturandose al ver al hombre que amaba, amando a alguien más. Sus entrañas se revolvían más a cada segundo que transcurría, Jungkook recorriendo la piel de la castaña como hasta hace unos días lo hizo con el. Cuando por fin, su esposo se unió con ella en carne, fue que no pudo evitar esconder un sollozo, haciendo que su esposo volteara petrificado a donde el sonido lo llamaba, perdiendo el color en su rostro cuando divisó a su pequeño ángel llorando por haberlo descubierto.

Su momento de lucidez llegó por fin y empujo a la castaña al suelo para correr a tomar el teléfono y tratar -inútilmente- de convencer a su esposo de que aquello no era lo que creía.

–Puedes estar tranquilo, Jungkook, no es como si no lo supiera ya. Ella me lo dijo hace un par de días, y sus conversaciones me lo dejaron más que claro.

–¡Jodida mierda, Tae! Esto no es-

–Por favor no lo digas. Ya lo sabía. Y descuida, ahora no tienes ningún obstáculo para casarte con ella. Namjoon va a entregarte el divorcio con mi firma, solo haz lo mismo y cásate con ella. Y por favor, ni pienses en buscarnos. Se feliz, Jeon.

–MIERDA NO

El rubio colgó la llamada, agradeciendo tener sus cosas empacadas para partir cuanto antes. Jimin salía del baño, justo para atraparlo entre sus brazos cuando este hizo el amago de caer.

–Hey, Tae. ¿Qué sucede?

–Ella

–¿Qué pasa con ella?

–Ella acaba de llamar –Jimin se congeló – Era una videollamada y ellos... ellos estaban... él la tocaba como lo hacía conmigo, Minnie. Vamonos, vámonos de aqui, por favor –Sollozo, haciendo los ojos del pelinaranja a su lado aguarse.

–Vamos, Nam viene subiendo por las últimas cosas que faltan. Vamos al auto.

Los dos caminaron hasta el auto de Jimin, donde Namjoon se encontraba acomodando el equipaje del rubio. Cuando Taehyung entró en el asiento trasero, Jimin se encargó de poner al tanto -en voz baja- a su amigo de lo que había ocurrido minutos atrás.

Namjoon, con toda la rabia contenida, trató de calmarse, yendo por las últimas cosas del rubio para subirlas al auto. 




Y a z z

No quiero el divorcio | KookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora