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Perdón


Dudo por unos segundos pero al final toco el timbre. Espero unos veinte segundos y la puerta fue abierta, revelando tras ella a un confundido Kim Taehyung, quien al verlo mudo su expresión a una atónita y detalló cuando sus ojos se humedecieron hasta soltar unas cuantas lágrimas que Jungkook se apresuró a limpiar de su mejilla.

–Hola, Tae. ¿Crees que ahora sí podamos hablar?

Pero Taehyung todavía procesaba que, frente a él se alzaba imponente el mismo Jungkook que recordaba. No fue sino hasta que Jungkook volvió a limpiar las lágrimas que el rubio estaba soltando inconscientemente que pudo volver en sí.

–J-jungkook

–Hola –sonrió – ¿podemos hablar?

Y el menor no pudo hacer nada más que asentir y dejarlo pasar. Reaccionando una vez más cuando escucho a Woozi correr hacia ellos.

Jungkook no sabía de Woozi. Iba a jodidamente matarlo.

Woozi llegó hasta ellos y se quedó confundido cuando vio a Jungkook en su sala de estar.

–Papi qué sucede?

–No es nada, bebe. Ve a dormir, si?

–¿Qué hace Jungkook hyung aquí? –Taehyung se paralizó –Vienes a felicitarlo por su pastel de zanahoria?

–Claro que sí, Woozi. Vengo a pedirle la receta –Woozi sonrió

–Mh mh, no creo que papi te de la receta pero puedes intentar aun así. Voy a dejarlos solos porque es mi hora para ver la televisión y papi no me deja verla luego. Adiós, hyung.

–Woozi... –dijo y el menor volteo – que descanses, pequeño.

–Hmm, igual tu, hyung. Espero verte en la cafetería pronto. El señor Min dice que me dará un aumento si consigo clientes nuevos.

–Entonces estaré ahí todos los días, hum?

–Muchas gracias, hyung –dijo mientras se acercaba a abrazarlo, ignorando las lágrimas que sus padres estaban soltando. Jungkook lo apretó fuertemente contra sí y besó su sien antes de dejarlo ir.

La sala se quedó en silencio durante unos segundos.

–Lo conoces –Taehyung seguía en una especie de trance.

–Lo vi hace un par de días en la cafetería. Es un buen empleado –Taehyung sollozo y Jungkook camino hacia el.

–Y-yo... perdón, Jungkook

–Hey, hey, hey. tranquilo. ¿Por qué eres tú quien me pide perdón?

–Por Woozi. Lamento no haberlo dicho. Iba a contarte el día que ella me dijo sobre ustedes y no pude... no me... perdon, Jungkook.

–Tae, tú eres la última persona que debería pedir perdón aquí. No voy a mentirte y a decirte que no estuvo mal porque estoy completamente molesto por ello. Si querías dejarme, estaba bien, era lo que merecía, pero no con mi hijo, Tae. ¿Sabes lo que sentí cuando vi que el papi tan grandioso del que Woozi me habló durante la tarde eras tu? Que tuve un hijo y no estuve para él? Que no lo vi gatear ni pude ayudarle a dar sus primeros pasos o decir sus primeras palabras? Tae, ese sentimiento de culpa no se lo deseo a nadie. Pero entiendo porqué lo hiciste.

–No. F-fue inhumano. Tu mereces saber de él.

–Y tu mereces tener a alguien cuidándote durante el embarazo. A alguien cumpliendo tus antojos y te hiciera muchos masajes. Y no estuve ahí.

No quiero el divorcio | KookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora