1/23. Estúpida

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Unos meses pasaron luego del accidente.
No volví a ver a Antón, tampoco lo busque aunque me moría por estar con el y decirle que también lo amaba.
Nadie sabía mis secretos, nadie compartía mi carga.
Tampoco era algo que podía compartir tan fácilmente.
Mi mochila cada vez era más pesada.
Y.
Amar duele. Duele mucho.
Más cuando se hace de verdad.

La élite de la emperatriz no encontro nada del incidente, menos de la persona que me salvó, no existía, la había inventado.

Pero, aguantar era lo único que me quedaba.

-Quiero que te presentes en el baile de los Cedrik. Será un punto de inflexión para el futuro.

Su majestad me había llamado y no era ni más ni menos para salir de mi casa. Cosa que por ahora no quería.
Por sus palabras era obvio que quería que empezará a conseguir el apoyo de la aristocracia.

Yo por ahora, solo quería paz.
El alejarme un poco de todo me haría bien, por eso me aislé.
Pero esta señora me la estaba poniendo difícil.

Esto era una orden, no tengo opciones.

-Como usted quiera mi señora.
Me incline haciéndole saber que lo haría y que ya me marchaba.

- Llegue a salvó a casa mi niña.

Me retiré esperando a que llegar a casa pudiera acostarme y dormir hasta mañana, aunque me despertarán para comer en el proceso.

-...ñorita... Señorita!

Me sobresalté al escuchar a Lanz llamarme, estábamos caminando un rato para despejarme.

-Si, lo siento sir Lanz estaba pensando en algunas cosas.

-Señorita, no hace falta que lo sienta... Es solo que parece que se desvió en el camino a casa.

Mire a mi alrededor y la puesta de sol me hizo temblar.
Inconscientemente había terminado en aquel lugar, el agua del arroyo fluía como siempre, hasta puedo decir que este lugar se veía con menos brillo.
Era obvio quien siempre le dió ese toque especial.

Abrumada por mis sentimientos camine hacia la orilla, mirando como el sol regalaba sus últimos rayos.

Estoy siendo una estupida.

-Señorita! Que sucede??? No sé acerque a la orilla-

Se sintió resonar el golpe.
Había golpeado mis mejillas con ambas manos.

Tenías que despertar Alisson.
Dejar de escapar de tu realidad y aceptarla de una maldita vez.
No puedes estar con el ahora, acéptalo.
Pero luego si podras, y si ya no quiere, no tienes porque renunciar al sentimiento. Eres fuerte y siempre lo serás. Solo hay que volver a pedir perdón y puedes ser muy insistente cuando quieres.
Pero si te encierras a dormir comer y cagar, no podrás terminar esta maldita historia.

Sonreí.

-Lanz... Volvamos.

Salí caminando con la frente en alto.
Lanz caminaba detrás de mi asimilando lo sucedido, seguro luego le contará a papá lo que paso.

La Villana quiere apoyar a su hermana!! [HDUI 1#]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora