7 - Demanda (Parte 1)

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Aquel domingo en la mañana, cuando fue a dejar a Yokune a su casa, Kasane notó el moretón en el ojo de la mujer y obviamente los golpes en el cuerpo de Yokune la noche en la que se acostaron, estaba pensativa, una parte de ella decía a gritos que le pidiera ayuda a su hermano para poner la demanda contra el señor Yokune, su hermano era fiscal, él sabía de esas cosas

Sin embargo estaba su parte de la razón que le decía que no pusiera la demanda pues en primer lugar Yokune se molestaría con ella por tomar la decisión sin consultarle, en segundo lugar no sabía que acciones tomaría el padre, se molestaría y no quería ni pensar en que era capaz de hacer en un estado de cólera y en tercer lugar no sabía que pasaría con Yokune y su madre, si las llevarían a otra ciudad, las dejarían en ese apartamento, cambiarían a Yokune de escuela, no sabía y tenía miedo

-Oye, Yokune... -Habló tenuemente la pelirroja mientras veía a la de pelo negro comerse su almuerzo de lunes

-¿Qué? -Respondió cortante

-¿Has pensado en demandar a tu padre? -Soltó, Yokune se ahogó con el arroz que tenía en la boca, rápidamente la pelirroja le dio un poco de su sopa de miso para que pudiera pasar la comida

-¿Por qué preguntas eso? -Dijo algo molesta tras haber logrado respirar normalmente

-Vi el moretón de tu madre el otro día y esa noche vi tu cuerpo, los golpes son demasiado graves, más de lo que creí, algunos cortes podrían hasta infectarse -Acotó preocupada por su senpai, Yokune guardó silencio un momento pensando en alguna excusa

-...No me gustan los hospitales -Comentó tras unos segundos en silencio

-No es necesario ir al hospital, tengo una tía que trabaja en el hospital principal de Tokyo, puedo pedirle que vaya a mi casa y te atienda

-¿En serio? -Kasane asintió sacando su teléfono para llamar a su tía

-Le preguntaré si puede ir hoy -Yokune solo asintió y continuó comiendo -No respondiste a mi pregunta

-Hace un par de años fui con la policía a poner la demanda, pero me dijeron que mis golpes no eran evidencia suficiente, además era menor de edad, mi padre se enteró y casi me mata -Contestó, Kasane quedó impactada, esperaba una respuesta así, pero todos modos le impresionó

-La policía no ayudaría mucho, pero mi hermano es fiscal, trabaja en el juzgado al otro lado de la ciudad, podemos pedirle ayuda a él, él sabrá que hacer, además tiene amigos que pueden ser de ayuda -Yokune se quedó en silencio un segundo, analizando la situación, si era verdad lo que Kasane decía, entonces podría sacar a su padre de la casa y poder vivir tranquila con su madre por lo menos un tiempo, si la chica estaba dispuesta a ayudarla a deshacerse de su padre entonces diría que si

-Hablaré con mi madre -Si de ella dependiera, diría que si de inmediato, pero ella era aún menor de edad y además no podía decidir y pasar por sobre su madre, debía consultar con ella primero

-De acuerdo, esperaré tu respuesta -La contraría se quedó en silencio -Llamaré a mi tía para avisarle -Kasane se levantó y llamó su familiar, Yokune oyó a la mujer hablándole con desprecio, Kasane era la "vergüenza de la familia", la de pelo rojo se tragó los insultos, la frialdad y la indiferencia de su tía, solo le explicó a la mujer la situación, le habló de las heridas de Yokune, pero que no le gustaban los hospitales, al inicio la doctora se negó a ir a la casa de Kasane, pero la menor no disistía, le suplicó que fuera y la mujer terminó cediendo a las suplcas de su sobrina, Kasane estaba agradecida -Oye, Yokune -Llamó la atención de la más alta

-¿Qué dijo?

-Dijo que a las 7:00 estaría en el departamento, luego de la escuela vamos directamente a mi casa para que pueda tratarte -Yokune asintió

"Solo físico"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora