Capítulo 18 | En el auto

1.3K 83 6
                                    

Miraba mi celular mientras esperaba hasta que finalmente el auto tan esperado se estaciona frente a mí.

—Ya estoy aquí, extra. Sube —dice bajando la ventanilla.

—Al fin —bromeé, pues realmente no estuve esperando demasiado.

—Cinco minutos, no te quejes —responde mientras yo le sacaba el dedo medio al rodear el auto y subirme.

Katsuki lo pone en marcha y nos alejamos de la fastidiosa fiesta a la que las chicas me habían obligado a ir, sin embargo, pude escapar.

—Entonces, estuvo muy aburrido —menciona cortando con el silencio.

—Bastante. Además que era irritante que todos los chicos que ni siquiera conozco se me acercaran con segundas intenciones —rodé los ojos. Ya hasta perdí la cuenta después del décimo que se me acercó.

—Tsk, unos idiotas —responde, pero en ese momento sentí su mano en mi regazo—. No saben que tú me perteneces, por lo que no pueden acercarse.

Sonreí de lado y aproveché que se puso en rojo el siguiente semáforo para inclinarme sobre él y acariciar su oreja con mis labios.

—Sí, hacía falta que tú estés ahí para demostrárselos —susurré—. Podría ser al bailarte... abrazarte... besarte... o tocarte y tú a mí.

Acaricié su pecho provocando que su respiración se hiciera más pesada. Katsuki me mira y besa mis labios hasta que se escucha la bocina del auto de atrás. Él gruñe y acelera mientras le saca el dedo medio por la ventana.
Me reí suavemente pero entonces me agaché hasta sacar su miembro de debajo de su pantalón y meterlo en mi boca.

—Harás que choquemos... —jadea.

—Entonces estaciona.

Katsuki me hace caso y busca un lugar oscuro y solitario para estacionar. Por suerte era de noche y apenas habían autos circulando. Se quita el cinturón y recuesta más su asiento para dejarme espacio. Lamí la punta y bajé hasta besar sus testículos.

—Mhm...

Acaricia mi espalda y sujeta mi cabeza, hace que vaya más rápido en mis movimientos hasta que no pudo aguantar más y terminó en mi boca. Tragué todo y lamí el excedente, Katsuki me indica con una seña que vaya a la parte de atrás, sonreí y eso hice, recibiendo una nalgada al cruzar. Él hace lo mismo y se sienta palmeando su regazo, me coloqué encima y besé sus labios, él metió su lengua en mi boca y sus manos apretaron mi trasero cubierto con unos mini shorts.

Me azota un par de veces provocándome jadeos y sobresaltos. Empezó a desabotonar mi short para quitármelo mientras yo me encargaba de su remera y de mi top. Bajé mis besos a su cuello y lamí hasta su pecho.

—Katsuki... —jadeé cuando su mano acaricia mi intimidad por debajo de mi ropa.

Me recuesta en el medio de ambos asientos del frente para quitarme aquellas prendas y separar mis piernas. Acaricia mi intimidad y mete dos dedos dentro de mí para prepararme. Me arqueé y gemí por el placer mientras me estimulaba hasta haberme mojado rápidamente.

—Apenas te he tocado y ya hasta estás chorreando. Joder... estás muy impaciente, extra.

—Lo estoy... porque estuve deseando este momento toda la noche —me sinceré sonriendo—. Por favor, Katsuki... hazlo.

Sonríe y aparta sus dedos para presionar la punta de su miembro en mi entrada, sujeta mis cadera y empuja dentro de mí con fuerza arrancándome un gemido sonoro. Empieza a embestir con rudeza, se inclina sobre mí y besa mis senos.

—¡A..Ah...! ¡Mhmg! Katsuki...

Embiste rápidamente, decide cambiarnos y me levanta para sentarme sobre él nuevamente. Se recuesta un poco y besa mi cuello mientras yo movía mi trasero sobre su miembro, él acompañaba mis movimientos embistiendo y llegando más profundo.

Miré a los lados agradeciendo que las ventanas fueran polarizadas, pero tampoco podía preocuparme mucho por eso, pues el placer que Katsuki me hacía sentir nublaba mi cabeza. Sus manos presionaban mis senos, las deslizó hasta mi trasero y lo apretó antes de darme un par de golpes que me hacían apretar su miembro dentro de mí, algo que le gustaba.

—¡Nhg! —gemí por lo delicioso que se sentía cuando él golpeaba mi trasero hasta dejar la marca de su mano en mi piel.

No pude resistir mucho más terminé corriéndome justo antes que él, quien llena mi interior hasta hacerme perder la cabeza por su calidez abrazándome internamente. La sensación de estar llena era algo que adoraba. Katsuki besa mis labios y sale de mí, me deja recostada atrás y vuelve al asiento de adelante para seguir conduciendo.

30 Days of Smut Challenge || Katsuki Bakugo ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora