Perfecto Desorden [PERFECTOS 2]

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Hoy era el día, hoy se cumplían los cinco años, hoy volvería a ver a Enzo.

—Buen día Princesa—me saluda con un tono burlón este Luca y yo pongo los ojos en blanco—. ¿Esperando con ansias a tu enamorado?

Lo veo mal y niego. —Él no es mi enamorado.

—Claro, claro...

—¿No deberías estar preparándote para recibir a mis próximos guardias reales?—cuestiono con mis brazos cruzados y una ceja alzada hacia él.

.

—Debería, pero es más importante burlarme de ti—se encoge de hombros y lo empujo levemente provocando que ría.

Ambos empezamos a caminar hacia la entrada que da al avión que ya ha llegado, aliso mi vestido tratando de que no se vea ninguna imperfección, diablos, estoy muy nerviosa.

Y se supone que no te gusta...

No me gusta, sólo... Extrañaba a mi amigo.

Sí, cómo no. Amigo...

Es un amigo, cállate.

—¿Meridia?—salgo de mis pensamientos al ver a mi hermano, quien me ve con el ceño fruncido.

—¿Qué sucede Ezekial?

—Oh, no, nada, es que te veías algo extraña, veías a la nada y...

—Niños silencio—dice mi padre hacia mi hermano y a mí, Raven se ríe de nosotros de forma disimulada para que no la callen a ella también.

—Lucien, no los calles, no tienen prohibido hablar—le reprende mi madre con una ceja alzada y mi padre el mencionado pone los ojos en blanco con una sonrisa.

—Luca—mi otro padre, Sebastian, llama a mi mejor amigo.

—¿Sí señor?—le dice este en su clásica pose de guardia.

Él entrenó desde pequeño aquí, nos llevamos sólo dos años y nos hicimos muy amigos cuando por accidente lo golpeé en la nariz por haberme asustado, eso pasó unos meses después de que Enzo se había ido.

—Anuncia a los nuevos guardias—pide mi padre y Luca asiente.

Veo que camina hasta un chico quien le da una hoja, abre esta y los nuevos guardias empiezan a bajar en el orden que Luca los anuncia.

Ya iban diez hombres, todos ellos me sonríen y los recuerdo muy bien, algunos me ven sorprendidos aunque lo disimulan.

Ya eran veinte, recuerdo muy bien que se fueron en total cien hombres y mujeres así que puede que él sea uno de los últimos.

***

No, no fue así.

Sólo bajaron noventa y nueve, uno faltaba y ese era Enzo, al parecer, él no quiso subir a ese avión por lo que me dijeron algunos de los nuevos guardias.

«Rompiste tu juramento Enzo»

—Ustedes servirán a su próxima reina, Meridia Yvette Wells C. Dankworth—dice mi padre Sebastian y todos sienten coordinados y después, se voltean hacia mí para hacer una reverencia.

Hago lo mismo hacia ellos y doy media vuelta para sentir los pasos de todos ellos detrás mío.

—Hey—me llaman por detrás y volteo encontrándome con Raven.

—¿Qué pasa?—le pregunto y ella me sonríe dulcemente.

—Es un tonto—se a qué se refiere... Y tiene toda la razón.

—Ya no importa.

Sí importa...

No, no lo hace.

Le sonrío por última vez a Raven y sigo mi camino hasta el salón, estaré todo un año hasta que cumpla los diecinueve conociendo a todos mis guardias y creando lazos con ellos, amistad y hermandad. Ellos me juran lealtad y yo a ellos gratitud.

Al llegar me siento frente a todos y repaso una última vez, con la esperanza de verlo, de ver su rostro, su sonrisa, pero no está ahí. Él tomó la decisión y está bien, ahora sé que los juramentos también se rompen.

Que mi corazón, también.

Sonrío como puedo y los veo de nuevo.

—¿Empezamos?

¡Hola, hola!

Obviamente en el primer libro se vio mezclado lo de la mafia y la realeza, en esta estará más presente la realeza, y un poco de la mafia ya que a los comienzos de ser un rey o reina, debes estar concentrado en todo, así que por eso Meridia tiene a su familia.

Pero ya se estarán dando cuenta de esas cosas al seguir leyendo, espero de todo corazón que la historia les guste tanto como a mí me está encantando empezar a escribirla.

Por ahora...

¿Qué opinan de Luca?

¿Qué piensan sobre los juramentos?

¿Creen en los juramentos?

¿Qué les parece nuestra pequeña princesa que ya no es tan pequeña?

Les mando un abrazo perfecto y un beso desordenado ♡︎

Italia DLTM