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—¿PUEDES PARAR?—LE PREGUNTÓ JOHNNY A MELODY, que estaba moviendo la rodilla arriba y abajo con nerviosismo—. Me estás estresando.
—Lo siento, estoy un poco nerviosa—admitió ella y tragó saliva mientras secaba el sudor de sus manos en sus pantalones.
—Bueno, pues para con la piernecita o cogeré la cinta adhesiva del mostrador para pegarte a esa silla—Peters esbozó una sonrisa y negó con la cabeza—. Además, seguro que todo ha ido bien, estamos hablando de Miguel, él puede con todo—Melody observó al hombre durante unos segundos.
—¿Estabas intentando convencerme? Porque no has sonado muy convincente.
—Cállate, estaba intentando convencernos a ambos, pero ya la has cagado—La chica rió y murmuró un "lo siento".
—Aunque tienes razón, es Miguel, todo irá bien—Aseguró ella con convicción y Johnny la miró para después asentir.
—Tú sí que sabes convencer—El rubio sonrió mientras ella soltaba una risita y comenzaba a jugar con el borde de la sudadera.
Mientras tanto, en una habitación del hospital, Miguel estaba ojeando el Instagram de Hawk con el ceño levemente fruncido.
Apartó su teléfono móvil de golpe y se dejó caer sobre la almohada, un poco decaído.
La enfermera que estaba a su lado se dio cuenta del bajo ánimo del chico y lo miró con lástima.
—Ey, ¿qué te pasa? ¿Te enciendo la tele? ¿Te traigo otra almohada?—preguntó con preocupación.
—¿Y si la operación no ha ido bien? ¿Y si no vuelvo a andar?
—No pienses en eso, cielo—Le aconsejó la mujer y luego se le ocurrió una idea—. Sé qué te hará sentir mejor: un gran trozo de tarta de chocolate. ¿Qué me dices?—Miguel frunció el ceño y luego sacudió la cabeza.
—Vale—Accedió, sabiendo que eso no iba a mejorar nada.
—Ahora vuelvo. Mientras no te traigo la tarta podrías probar a hablar con tu novia, a ver si así te animas un poco—El ceño fruncido del chico se intensificó aún más.
—¿Novia?—Cuestionó mientras se ayudaba de sus brazos para incorporarse en su cama y mirar a aquella enfermera.
—Sí, esa chica de pelo castaño que vino el otro día—Miguel la seguía mirando un poco confundido.
—¿Melody?—La mujer asintió y su corazón volvió a bombear con fuerza. Melody... ¿su novia? ¿¡En qué momento había pasado eso y por qué él no se había enterado?!