ੈ✗↪Capítulo 3.

2.8K 372 161
                                    

自由➤ Reencuentro! ‹ ⋆

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

自由Reencuentro! ‹ ⋆

La pesadez de la situación le impedía respirar a la perfección sus nervios incrementaban a cada paso que daba en camino a la mansión, sus manos sudan mientras sostenía la mano de su pequeña. El momento de volver a verle la cara era aterrador para la pelinegra.
Pasaron 6 años maravillosos lejos de su presencia que lamentablemente ahora eso se rompería.

— ¿Mami a quien veremos?. — preguntaba la niña.

La mayor solo se quedó en silencio sintiendo los latidos de su corazón acelerarse. Miro a su hija dedicándole una sonrisa.

— V-vamos a ver a- — las palabras no salían de su boca.

¿Cómo le explicaría a su hija que vera a su padre? Ella nisiquiera sabe quién es el jamás lo vio, el error que cometió fue no hablar más al tema sobre su padre a Selina.

Ambas estaban paradas delante de una gran puerta, Sanzu estaba a su lado. Este tocó la puerta y una voz le ordenó entrar.

Al abrirla y entrar su corazón se detuvo al ver aquel hombre que alguna ves amo sentado sobre un sofá frente a ellas mirándolas fijamente con expresión seria.

— Déjenos solos. — ordeno Mikey.

Sanzu con sus hombres salieron de aquella habitación cerrando la puerta dejando solamente a Alaska y a Selina quien estaba detrás de su madre escondida. La niña sentía miedo.
Alaska bajo la mirada viendo en suelo mientras acariciaba el cabello de su hija. Mikey se levantó de su lugar y se paró enfrente de la que alguna ves fue de su pertenencia o bueno, sigue siendo de su pertenencia.

El se agachó hasta estar a la altura de la niña quien estaba abrazando la pierna de su madre, era muy notable como temblaba.

— ¿Cómo te llamas?.

La niña dudo en hablar, pero tomo valor.

— S-selina Isabel Itō.

— ¿Itō?. — eso molesto un poco al mayor quien le dedico una mirada asesina Alaska.

El volvió a mirar a la niña dándole señas para que se acerque, dudosa la pequeña fue soltando la pierna de su madre y daba pasos hacia Mikey. El se sentó en el sofá para luego sentar a su hija en sus piernas.
Acariciaba su cabello rubio intentando calmar los nervios de la menor.

— Escucha, yo soy tu padre. — soltó sin más.

— ¿¡Mi papá!?. — esto la sorprendió mucho.

— Si, tu eres mi hija.

Los ojos de la pequeña Selina se iluminaron y sus mejillas se tornaron rojisas una amplia sonrisa apareció en su rostro. Ella se abalanzó a el abrazándolo con fuerza, Mikey abrió los ojos sorprendido por la acción de su hija.

          ❝𝐏𝐄𝐑𝐉𝐔𝐈𝐂𝐈𝐎ᬊ (Primera Versión)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora