Eres mi verdadero amor, y lo sabes. (Alberto Scorfano x Giulia Marcovaldo).

Capítulo 27 Regreso al pasado parte 5

Eleonora, estaba cada día más alegre, hablaba con sus nuevos amigos, los demás habitantes se sorprendieron al ver que aquella chica solitaria era más sociable y habladora, -¿acaso no es ella la solitaria?- preguntó una mujer

-según me contaron, su madre murió cuando era una bebé, y vio morir a su padre cuando tan solo era una niña,fue un gran trauma - comentó otra de ellas

-vaya, aunque es bueno que haya superado sus problemas, y veo que ya encontró con quien compartir el momento - señaló a Giorgio

Eleonora y Giorgio recorrían el mar juntos, encontraban nuevas cosas, pero Eleonora se ponía muy nerviosa al ver que se acercaba a la superficie, Giorgio al comienzo lo comprendió, -se que eso te trae muy malos recuerdos, pero recuerda que eso fue en el pasado, pero confía en mí- tomo su mano, llevándola a la superficie, notando las aves y montañas, -vaya, es hermoso- exclamó con sorpresa

-Nada de lo que hay aquí arriba es malo, solo debes tener cuidado de que los humanos no se te acerquen- le indicó.

Así pasaron los meses, ambos monstruos estaban más unidos, ya Eleonora había superado su miedo a la superficie, incluso fue al pueblo humano en compañía de Giorgio, donde usaban ropa humana para pasar desapercibidos, en eso Eleornora probó el gelato por primera vez, pero cuando casi los descubren, tuvieron que salir a toda al mar, no fue hasta cuando una noche, bajo las estrellas, la vida de Eleonora tuvo un gran cambio.

-bueno, te preguntaras porque estamos aquí- cuestiono Giorgio

-no se- respondió Eleonora

-bueno, es que quiero confesarte algo- tomó las manos de la chica, haciendo que se sonrojara

-bueno...entonces...qué es- cuestionó

-la verdad, me pareciste muy bella cuando te ví por primera vez, esos ojos verdes me traen loco, y quiero pedirte si...-pauso por los nervios

-qué es...-preguntó entusiasmada

-si...quisieras ser mi esposa- le propuso de rodillas con una pulsera de algas con conchas de mar decorandola

Eleonora al oír aquella propuesta, no contuvo sus lágrimas, ya que pensó que toda su vida estaría sola, -claro...que acepto- lo dijo con lágrimas en sus ojos, Giorgio colocó la pequeña pulsera en la muñeca izquierda de la chica, lo mismo él, luego ambos se abrazaron, -vaya, solo quiero decirte te voy a amar con todo mi corazón,y quería preguntarte si quisieras tener una familia con migo- tomo su mano

-claro que si, quiero tener muchos hijos contigo- lo abrazó, Eleonora había encontrado a alguien que no la dejaría sola, incluso formaría una familia con él y le daría el tiempo perdido que no tuvo con sus padres, debido a aquellos accidentes ocurridos con ellos, debido a los humanos sádicos. Todos ya habían sabido de la relación de Eleonora y Giorgio, incluso Daniela, quien estaba empezando a sentir cosas por Lorenzo, -ay querida, te felicito- la felicito Daniela

-si, creí que me iba a quedar sola toda mi vida, pero ahora no lo estaré, y se que dentro de poco, osea un tiempo seré madre, será algo hermoso- habló entusiasmada

-si, se que algún día seré madre- comentó Daniela feliz

Eleonora ya estaba lista para la boda, estaba algo nerviosa, en eso pensó en su padre, sabía que estaba en un mejor lugar, y que la estaría cuidando desde allá, llegó la hora de la boda, la chica estaba nerviosa, hasta que estuvo frente a Giorgio; una monstruo de edad avanzada, les colocó a cada uno un collar de flores azules con algas y conchas de decoración, mientras ambos monstruos tomaban sus manos y se miraban con ternura, -ahora, pase lo que pase, siempre te amare, Eleonora Scorfano- habló Giorgio tomando sus manos

-yo Eleonora, siempre te amare, me sacaste de la soledad, y gracias a ti, viviré una nueva vida- tomó su rostro

en eso la anciana agarró una alga y la enrollo al lado de el cuello de ambos, dejándola suelta, -ahora, pueden unir su amor con un beso- les indicó, no dudaron y se besaron, uniendo su amor eterno.