Cariño ~Ran Haitani x TN~

Poca Acción

Estábamos en la oficina, mamá cuidaría de Ryu hoy, tendríamos privacidad con Ran hasta la noche y obviamente, no íbamos a dejar pasar nuestra oportunidad, sentada sobre el escritorio estaba siendo penetrada por Ran, una de mis manos en el escritorio y la otra en su nuca, movimientos fluidos soltaban sus caderas, nos mirábamos y sonreímos, después de 10 meses y medio podíamos tener sexo, sin tener que preocuparnos de escuchar a nuestro hijo llorar o llamarnos desde que aprendió decir mamá y papá, arañe su nuca al sentir un choque fuerte entre nosotros, la música sonaba fuerte, por lo que mis gemidos no serían escuchados ~a-ah... cariño~ musite placenteramente, sus besos fueron inundando mi pecho y jugueteando con mi pezón.

Mi pecho estaba sobre el escritorio ahora, fuertes embestidas, sus caderas chocaban con mis nalgas, sus gemidos inundaron la oficina, una mano chocó contra mi nalga derecha ~¡aah...!~. Me levanté e hice a Ran sentar en un sillón, me agaché entre sus piernas y comencé a chupar ahí debajo, tomó mi cabello en coleta para que no me estorbara. Cuando estaba por venirse, me senté sobre sus piernas, introduciéndolo dentro de mí, sus manos en mis caderas guiaban mi velocidad, luego una de sus manos bajo a mi clítoris y masajeaba de este, sentí los espasmos y mi liquido salir, Ran acabo dentro, su mano en mi espalda me hizo juntarme a él, nos abrazamos y nos quedamos en esa posición, varios minutos...

Al salir de nuestra oficina fuimos a la barra a pedir algo.

–Me tomaría un mojito...– suspiré.

Ran beso mi cabeza –Pide uno sin alcohol –

Lo mire –Para eso, mejor pido una limonada...– miré a las chicas –Un jugo de frutos rojos y un whisky –

–Enseguida – hablo Aneko.

Ran me abrazo y pose mi cabeza en su pecho –¿Estás cansada cariño? –

Negué en su pecho –No, me siento... relajada, tranquila... ¿y tú? –

Él me miró y río levemente –Extraño a nuestro hijo –

Reí levemente con él –Igual yo... llevamos casi 6 horas sin él...–

Una vez servido lo que pedimo, bebimos un poco –¿Vamos por él y a la casa? – preguntó mi esposo mirándome con aquella sonrisa que tanto me encanta.

Asentí mientras tomaba de mi jugo –Si...– miré a la entrada y vi un tipo golpeado entrar y detrás de este otro con un arma apuntando –Ran...–

Este se volteó y rápidamente me cubrió con su cuerpo –¿Qué mierda? – preguntó mirando al tipo

–______, ve a tu oficina ahora y no salgas – ordeno Sanzu entregándole un arma a Ran

Me lleve a las chicas a mi oficina, se escuchaban gritos y disparos, esperaba que todos estuvieran bien... sobre todo Ran... la música se detuvo y fuera de la oficina escuche a gente golpeándose, mire el cajón de Ran y sus 2 armas estaban ahí, las recargue –Señorita _____ no salga, piense en su hijo– la voz de Sara me hizo pensar un segundo –Es por mi hijo que voy, sin Ran... dejamos de ser una familia– , salí de la oficina y un tipo golpeaba a Rindo, le dispare en la pierna y Rindo lo siguió golpeando, camine tranquila hasta que vi el alboroto, el tipo estaba dándole la espalda a la barra, mala idea.

Apunté a su cabeza –Denme el dinero y me iré – dijo este.

–No te daré nada...– le dijo Koko apuntándole con un arma –Suelta al perro rabioso–

Abri mis ojos a par notando que tenía a Sanzu y le apuntaba en la cabeza –Lo mataré antes de soltarlo–

–Te mataré primero– le dije y este volteó a mirarme y le disparé, su cuerpo cayó al suelo.

Todos me quedaron mirando, caminé hasta ellos, mis tacones resonaban en el suelo –Mierda...– escuché a Sanzu quejarse.

Me acerqué a él y lo ayude a levantarse, pero este arrastraba su pierna derecha, mire y vi sangre en esta –Te llevaré a la clínica – Pase su brazo por mis hombros y mire a Ran –Llaves–

Ran me lanzó las llaves del auto, las agarré con agilidad, es algo que venimos practicando hacia ya meses –Conduce con cuidado– dijo este pisando la cabeza de un tipo.

–Descuida – sujete a Sanzu por la cintura y salimos del bar, fuera, Hanma encendía un cigarrillo, a su alrededor unos 30 tipos inconscientes –Hanma, ten a Sanzu, voy por el auto–

–Claro– el alto se acerco y ayudo a Sanzu.

Camine hasta el auto y un tipo estaba apoyado en nuestro auto familiar, me miró y pasó la lengua por sus labios y se comenzó acercar, de un disparo lo dejé tirado en el suelo –No tengo tiempo – le dije a su cuerpo inerte. Tome dirección a la clínica con Sanzu en los asientos traseros.

–¿Bajaste la guardia pastillita? –

Él suspiró –Hijo de puta fue más rápido – lo escuché acomodarse –Para la próxima podrías sacar la silla de mi sobrino, ¿no? –

Reí levemente –Lo tendré en cuenta, no me la vayas a ensuciar –

–Es cómoda, tranquila –

Llegamos a la clínica y ayude a Sanzu a bajar, entramos y lo atendieron de urgencias, estuve con él en todo momento. Tras ponerle un vendaje y una férula en el muslo y rodilla, lo dejaron salir, seria una recuperación no muy larga. Subió esta vez de copiloto, una llamada entró a mi celular y la respondí en alta voz.

¿Cómo está el psicópata?

Bien, ya voy para allá

Estoy donde tu mamá

Entonces iré para allá después de dejar a Sanzu

Esta bien, te esperamos

Finalizó la llamada. Deje a Sanzu fuera de su edificio.

Lo miré –Cuídate, ¿si? –

Me miró y sonrió –Quédate tranquila preciosa, gracias – se acercó y beso mi cabeza –Esta vez me salvaste–

Acaricié su brazo –Descansa, te llamaré mañana para saber como estas–

Nos despedimos, espere a que entrará y fui donde mi mamá.

–¡Mamá! – grito mi pequeño al verme entrar, estando en los brazos de su padre.

Camine a él y bese su mejilla –Hola mi amor – Lo saque se los brazos de Ran y lo abrace y bese mucho.

Me abrazo –Mamá...– dijo en un tono tierno.

Saludé a todos y también nos despedimos, era tarde, era hora de irnos a casa. 

Y.... estoy viva...

Aquí un poquito más de lo que es Cariño, como siempre un "intento" solo para ayudar a la imaginación un poco

Espero que estén bien, cuídense y tomen agüita ♡