Amor inocente

la cita de Eiji

- entonces.... a dónde quieres ir Bakugo? digo, tengo la idea de a qué lugares podíamos ir pero no sé si te gusten o si quieras ir a un lado -Kirishima no sabía qué seguía después de conquistar al rubio, la verdad no creía que llegaría tan lejos.

-espera, acabas de decir que ya tienes lugares propuestos y apenas acabamos de tocar el tema? ni siquiera me pediste una cita, solo ser amantes -Bakugo no supo realmente qué pasaba, por primera vez en la historia Kirishima pensaba más rápido que él y no solo eso, sino que también se le había adelantado.

-ammmmm.... pues te acuerdas que te dije que desde hace tiempo que quiero que seas mi pareja? -Kiri se sentía levemente incómodo de explicar la razón porque era gracioso si lo mirabas desde un punto de vista que no fuera el de Baku -pues yo tenía planeado hacer una cita contigo y confesarme... no hacerlo como pasó realmente -Baku lo miró con la ceja levantada, sus labios fruncidos ligeramente y una mirada incrédula, era obvio que la última manera en la que uno quiere confesarse es cuando le pide perdón a ese alguien porque estaba llorando por algo estúpido (aunque realmente no era estúpido Baku así lo miraba) -además... yo no sabía que primero debo pedir una cita, creía que pedirle a alguien ser su pareja era pedir una de cita... no soy muy experto en esto porque soy nuevo en el terreno -Bakugo lo miró incrédulo, si tomamos en cuenta el hecho de que ya había salido antes con una que otra chica el mismo asumió que había pasado algo similar con Eiji.

Se equivocó

-Ok Kirishima, creo que eres muy nuevo en esto de tener una relación y yo soy nuevo en esto de tener sentimientos, entonces qué opinas de salir a pasear de una forma que tú quisieras y luego salir a mi manera? -Bakugo propuso una idea.... poco común y extraña pero sonaba muy bien así que Kiri aceptó, como Kiri dió primero el paso de salir el decidió primero a dónde irían y qué hacer.

_ *-* en la cita de Eiji... *-* _

Kirishima estaba infartado como nunca le había pasado, tenía muchos nervios, el hecho de que Bakugo se hiciera su amante era lo mejor que le había pasado y de verdad no lo creía, celebraba felizmente por ese suceso... pero lo que le incomodaba era la tremenda expectativa que Bakugo podía tener, porqué? porque el hico ya había tenido más de una cita anteriormente, Kirishima como buen idiota que era nunca aceptó una invitación de una de las chicas que lo invitaban porque no quería herir sus sentimientos, lo que más coraje le causó porque no solo sabría si realmente las chicas le gustaban al intentarlo si no que también pudo haber tenido un poco de experiencia en el campo y sabría cómo defenderse.

Kiri se golpeó la cabeza con su mano recordándose lo muy imbécil que era por no haber siquiera preguntado a alguien qué hacer en su primera cita.

Pasados unos segundos revisó su reloj y efectivamente todo iba como lo planeaba, llegó diez minutos antes a la cita peinado, arreglado, dientes lavados, y bien bañadito, el lugar no tenía tanta gente y se veía bien a su parecer.

Vio de lejos llegar a Bakugo y se quedó sin aliento, sintió como si su corazón dejara de latir y su mirada estaba tan fija en su pareja que todos los demás habían desaparecido, que Bakugo supiera de moda le bendijo los ojos mil veces, traía un pantalón ligeramente holgado con bastantes bolsitas, de mezclilla color negro, traía unos zapatos de cuadros cómodos, una playera blanca con los bordes negros y una calavera negra en el centro.

Kiri se acercó a Bakugo -estás listo? -Bakugo lo miró y tomó su mano -de todos los lugares que eligieras un restaurante era lo que menos me imaginaba -el pelirrojo se rió nerviosamente mientras pasaba su mano por su cabello -bueno... es que la comida de aquí me gusta mucho yyy pensé que lo mejor que podíamos hacer era pasar el rato aquí-