Play with me | Taekook

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(este es un especial del yoonmin, esto ocurre el día de año nuevo, cuando se encuentran en la casa de jungkook)

- Jimin... -Yoongi fue el primero en romper el silencio entre ellos, la tensión era palpable en el aire. El menor tenía su cuerpo inclinado hacia delante, con sus codos apoyados sobre sus rodillas sus manos jugueteaban entre sí, un intento de calmarse. Por su parte el rubio estaba hundido en el sofá de frente a Jimin, quería acercarse, pero no sabía si podía.- Hey, al menos mírame.

La mirada de Jimin reposaba sobre sus manos que se movían sin parar, tras oír la petición del rubio consideró si realmente debía hacerle caso, no sabía si tenía la fuerza suficiente para mirarlo. Soltando un pesado suspiro se rindió, levantó la cabeza y su vista fue a parar en Yoongi, en cuanto sus miradas se encontraron el pelirrojo supo que habría sido mejor no hacerlo, pues ahora lagrimas caían sin control por sus mejillas.

Para Yoongi todos sus cuestionamientos sobre si acercarse o no pasaron a segundo plano en cuanto vio al menor llorar, en cosa de segundos se levantó para ir hasta el lugar del contrario, dejando sus rodillas caer sobre el suelo se inclino hasta poder tomar el rostro de Jimin entre sus manos.- ¿Qué pasa pequeño? ¿Por qué lloras? -las palabras del rubio estaban cargadas de dulzura y preocupación, una suavidad que solo sacó más lagrimas del contrario.

- Lo siento tanto hyung. -las palabras salieron entre hipos, cayendo a sus propios deseos de querer sentir el calor del mayor, Jimin se lanzó sobre el contrario, rodeando su cuello con los brazos al tiempo que escondía el rostro en el cuello del rubio. Le tomó un poco de tiempo a Yoongi para reaccionar, pero pronto se encontraba abrazando la cintura del menor, sus cuerpos no dejaban espacio alguno entre ellos.

- Esta bien Jimin, tranquilo.

- No hyung, no esta bien, no te merezco.

El corazón de Yoongi dolía al sentir como el menor temblaba entre sus brazos sin cesar el llanto, deseaba tanto ser capaz de desaparecer toda la angustia y tristeza que Jimin sentía en ese momento, incluso podría dejar a un lado todo el dolor que él sintió en las últimas semanas por ser ignorado, solo quería ver al pelirrojo sonreír como lo hacía tiempo atrás.- Tranquilo bebé, tienes que tratar de respirar, ahora podemos hablar con calma, tengo todo el tiempo del mundo para ti.

Jimin se sentía horriblemente culpable, él solo había ignorado al mayor por semanas, sin embargo ahí estaba él, consolándolo con todo el cariño del mundo, como si él fuese lo más preciado y delicado; pero por esa misma razón sabía que tenía que armarse de coraje y hablar. Fue necesario que pasaran varios minutos de Yoongi dando suaves caricias en la espalda del menor para que este poco a poco fuera calmando su llanto, cuando su respiración volvió a ser regular Jimin se atrevió a hablar.

- No sé si lo sabes, pero mi padre... -el pelirrojo tuvo que tomar varias bocanadas de aire antes de continuar.- Él cree que soy gay, porque nos escuchó hablando una vez... y por eso me golpeó, porque simplemente no podía tener a un maricón como hijo.

El rubio era consciente de esa parte, el padre de Jimin era un homofóbico de lo peor, y por eso sentía un gran odio hacia aquel hombre, ser capaz de maltratar a tu propio hijo por ignorancia, era imperdonable; pero no quería interrumpir el relato del menor, así que se guardó todos sus comentarios y esperó a que Jimin continuara.

- Esos días que falte a la escuela fueron horribles hyung, mi papá no dejaba de golpearme y gritarme, que le daba asco, que era un enfermo mental, que se avergonzaba de mi...

- Jimin... -con delicadeza Yoongi se alejó unos centímetros del menor, solo lo suficiente para poder volver acunar las mejillas del contrario con las palmas de sus manos, usando sus pulgares para borrar los restos de lagrimas que quedaban en su piel.- Lo siento tanto por no estar ahí para ti, por no poder protegerte.