Play with me | Taekook

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Durante todo el viaje Jungkook no dejaba de escribirle al castaño, pero ninguno de sus mensajes fue respondido. La dirección que el señor Byun le había entregado se trataba de un complejo de apartamentos, como era la primera vez que el pelinegro estaba en aquel lugar se demoro en encontrar el edificio en el cual podía encontrar a Taehyung, pero tras pasear de un lado a otro por unos minutos dio con la torre B, subió las escaleras corriendo hasta el quinto piso, en momentos así agradecía de hacer ejercicio con frecuencia de lo contrario dudaba haber logrado subir tantos escalones a tal velocidad. Cuando al fin alcanzó el piso numero cinco su respiración estaba agitada, pero no se dio ningún momento para tratar de calmarla, en su lugar se aproximó hasta el departamento del mayor, golpeando la puerta con más fuerza de lo que normalmente lo haría, se sentía demasiado angustiado como para preocuparse de molestar a los vecinos.

Dos, tres, cuatro veces llamó a la puerta, pero no había respuesta alguna desde el interior, la única solución que pudo pensar fue llamar a bomberos o la policía, ellos debían ayudarle a derrumbar esa puerta de ser necesario. Estaba por marcar el numero de la policía cuando escuchó la puerta desbloquearse.

- Tío Baek, te juro que estoy bien -Taehyung dijo abriendo la puerta.

Jungkook observó al mayor de pie frente a él, traía su cabello desordenado y una expresión de completa sorpresa. Sin detenerse a pensar en nada el pelinegro se lanzó sobre Taehyung, envolviendo su cuerpo en un firme abrazo. Estaba sano y salvo, por fin se sentía respirar de nuevo.

- ¿Jungkook? -tras unos segundos de mantenerse en la misma posición el mayor decidió hablar, no había abrazado de vuelta al pelinegro, demasiado estupefacto como para corresponder el gesto.- ¿Qué haces aquí?

El mencionado se alejó del castaño, solo unos centímetros, lo suficiente para poder acunar el rostro contrario entre sus manos.- Dios Taehyung, no sabes lo preocupado que estaba.

- ¿Preocupado? ¿Por qué?

- El señor Byun me llamó y me explicó que no vas a clases hace días, tampoco contestas sus llamadas o mensajes, llegué a pensar lo peor.

- Lo siento... pensé que no querías volver a saber de mí, después de todo yo mismo te dije que te alejaras.

- Lo intenté... pero creo que no puedo apartarme de ti después de todo.

- Yo creo que te debo una explicación, ¿Quieres pasar?

Jungkook asintió y el castaño se hizo a un lado para dejarlo entrar, una vez en el interior dio una rápida mirada a su alrededor, era un apartamento pequeño que constaba de una cama, un closet, escritorio y la zona de cocina, tras la única otra puerta del lugar se encontraba el baño, supuso el menor. Se mantuvo de pie, sin saber muy bien que hacer, Taehyung caminó hasta su cama y se sentó en ella para luego par palmadas a su lado, el pelinegro obedeció y fue a sentarse a su lado.

- Antes que nada, ¿Puedes avisarle a mi tío que estoy bien? Mi teléfono esta apagado y no quiero que se siga preocupando.

Nuevamente el menor obedeció y le envió un mensaje al señor Byun confirmando que Taehyung estaba sano y salvo, el enfermero le había dado su numero para que lo mantuviera al tanto. Cuando se aseguró que el mayor recibiera su mensaje regresó el teléfono a su bolsillo, para centrar toda su atención en el castaño.

- No sé muy bien por dónde empezar. -el mayor rascó su nuca, un tanto incomodo, después de todo no sabía que tendría que hablar sobre temas tan delicados para él.

- El señor Byun me dijo que tuviste un año difícil, ¿A qué se refería?

- Mhm, creo que tendré que contarte todo después de todo. -el castaño dejó escapar un pesado suspiro.- Durante las vacaciones antes de empezar el año, yo y este chico estábamos ¿Saliendo? No creo que realmente se le pueda llamar así, pero el punto es que tuvimos un par de citas, cuando las clases comenzaron traté de acercarme a él, al principio todo parecía normal, pero al paso de unas semanas él comenzó a ignorarme, hizo como si yo no existiera y yo como un tonto traté de mantenerme cerca, pero me empezó a llamar un acosador frente a su grupo de amigos, diciendo que yo estaba obsesionado con él, "deja de seguirme, no soy un rarito como tú" fueron sus palabras exactas. -el mayor soltó una risa amarga, recordar todo eso era ciertamente doloroso.- Gracias a eso sus amigos, y probablemente él también, esparcieron por toda la escuela los rumores de que era gay, al principio eran solo tontos rumores de pasillos, gente susurrando cuando pasaba por ahí, pero no faltó mucho tiempo para que todo eso escalara, uno de los amigos de este chico me insultó frente a toda clase, nadie hizo nada y solo se rieron, fue humillante, pero podía vivir con eso, no sería primera vez que no tendría amigos, eso estaba bien para mí.