29. «For a broken heart».

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29. «For a broken heart».

Blair

24 de octubre, 2017.

Braxton jala mi mano, haciéndome caer sobre su regazo, y me acomodo sobre él, sonriéndole a Alicia.

—¡Hola!

—Es un gusto tenerlos aquí chicos—nos da una sonrisa matadora que casi me hace suspirar porque ella es tan atractiva con su cabello rojo y cuerpo lleno de tatuajes.

Tiene un porte y elegancia que hasta intimida.

—El gusto es nuestro.

Braxton asiente, secundando mis palabras, mientras juega con el borde de mi falda.

—Voy a decir, públicamente, que conseguir un espacio con estos seres humanos fue toda una osadía. Tuve que insistir horrores.

—Calumnias—ríe Hudson.

—Totalmente—afirmo—. Nadie en su sano juicio le dice que no a Alicia Clark.

Se quita créditos, y no pasan muchos minutos cuando estamos riendo y hablando con soltura.

Estas son la clase de entrevista que disfruto. En la que no hay indisposición ni malos ratos, solo respeto y comodidad.

—Ésta sería la primera vez que ambos trabajan con otro artista de esta forma—asegura—, entonces, ¿se les hizo difícil trabajar juntos o acostumbrarse a hacerlo?

—Sí—respondemos al unísono, lo que tiene a los presentes en el set riendo.

Sonrío, y decido tomar la palabra:

—Al principio no estábamos de acuerdo en muchas cosas—digo—, y al final tampoco—el tatuado asiente afirmando mi declaración—; y no por la composición, cuál fue realmente fácil, nos complementamos bien en ése sentido. Sino a la hora de tomar decisiones, no servimos para ello.

—Pero para eso tenemos a papá y a Sam—interviene Brax—, quienes terminaban desesperados y tomando la decisión por nosotros. Un equipo excelente—dice lo último con ironía.

—¿Hay algo que quieran transmitir o un mensaje que dejar dicho con el álbum?

—Que la mierda corta venas no está tan mal—digo en voz baja. Sólo Brax lo escucha y ríe de manera un tanto escandalosa que hace que Alicia nos miré con una mezcla de diversión y confusión.

Cuando se recupera, se endereza para contestar la pregunta hecha con anterioridad.

—Que es una etapa, no una vida. Queremos recordarles que en algún momento encontraremos a la persona que nos saque del hoyo—dice.

—O que nosotros mismos podemos ser esa persona—aseguro.

—Habrán baches, golpes y obstáculos en nuestro camino, pero todos podemos ser lo suficientemente fuertes para afrontarlos.

Entrelaza nuestros dedos. Aprieto su mano.

»Aunque el álbum se concentre en las caídas en la vida amorosa, sabemos que muchas veces no se trata de querer encontrar a la persona con la que vivir un amor realmente intenso, se trata de encontrarse a uno mismo; hay veces que al final del camino no se espera ver la mano de alguien que te ayude a darle fin a tu carrera, sino de llegar y no decepcionarte cuando no veas a nadie allí; más bien tener la certeza de que te tienes a ti mismo, que no necesitas a nadie más.

Una canción por cada corazón roto ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora