❞ 𝐋𝐀𝐃𝐘 𝐑𝐎𝐒𝐄 ❝🌹๑╰─── • ⁽ ᵀᵒᵏʸᵒ ᴿᵉᵛᵉⁿᵍᵉʳˢ ⁾

Capítulo 13

──¿Por qué tan callado ahora?.

──M-Mikey...

De manera imprevista, el rubio tomó al contrario de la muñeca, dejando a la chica liberada.

──Aléjate de Rose, la lastimas.

──Esto es un mal entendido. ──ella intervino, poniendo atrás suyo a Takemichi.── ¿Cómo me encontraste?.

──Kisaki.──respondió, relajado aparentemente.── Le dije que te vigilara y a tu madre también.

Eso termino por dejar peor a la pelirroja.

──¡¿Cómo puedes permitirle estas cosas?! ¡Se supone que es alguien peligroso, fue enemigo tuyo, de toda Touman! ¡Dejo a tu amigo en la cárcel y podría estar involucrado en peores cosas!.

──No opines sobre algo en lo que no tienes conocimiento.

Sus palabras frías lograron dejarla algo atónita pues aunque sabía a lo que se refería, él nunca se había dirigido a ella con gelidez junto un toque de superioridad.

──Además ese no es el tema ahora.

──Tonto.

Manjiro la miró severo, como si estuviera regañandola.

──Dices que quieres salvar a tu madre, pero te metes en estas situaciones dónde podría salir lastimada.

──Porque también me preocupo por los demás, ¿Piensas que soy una desgraciada todo el tiempo?.

──Nunca dije algo cómo eso.

Él no podía evitar tensar su cuerpo de la rabia al no verla retroceder, tampoco esperaba que dijera un 'lo siento' pero quería que sacara a relucir ese toque de madurez característico únicamente suyo ante esa situación en la que fue atrapada.

──Takemichi. ──se dirigió al chico quién no paraba de temblar.── ¿Por qué tienes citas con mi novia a escondidas? ¿No hiciste las paces con Hina?.

──E-Eso no es...

──No lo metas en esto.

──¿Por qué lo defiendes?.

──No se lo que este pasando por tu mente pero estas mal. ──frunció el ceño.── Kisaki tiene la culpa.

──¿También sobre tus interacciones en Touman, el hecho de usar mi nombre para tus caprichos o manipularme cómo al principio de todo?.

──Tú también has hecho cosas fuera de lugar. ──replicó.── Visitarme en la escuela, entrometerte en mi vida.

──Seina. ──susurro por lo bajo en advertencia.

──Y finalmente hablar con mi madre cuando te dije que no lo hicieras, ni siquiera somos una pareja del todo. ──dio un paso al frente.── Rompiendo promesas así de fácil, se entiende el destrozo que eres como líder en tu egoísmo.

Eso fue la última acusación que soportó.

──¡Cállate!. ──no quería gritarle pero ya había perdido su cordura.── ¡¿Quieres tenerme de enemigo?!.

──Créeme que tu tampoco desearías convertirte en el mío. ──respondió de frente.── Después de todo, soy la víbora roja.

El ambiente era tenso y aunque ella no tuviera el ceño fruncido como él, su expresión gélida daba a entender que estaba de todo menos contenta. Manjiro fue el que gruñó irritado por todo sentimiento negativo junto su orgullo.

──Acabaré contigo Hanagaki.

Fueron en segundos, Seina miró a Manjiro acorralar al pobre chico contra una pared cercana.