Stockholm Syndrome

22. Tres días

-Amo las puestas de sol- susurro y me acuesto sobre la arena, pongo mis brazos debajo de mi cabeza y suspiro por la tranquilidad que se respira. ¿El mundo no podría ser siempre aire cargado de tranquilidad? Cierro los ojos.

-Yo amo otra cosa que es 100% más hermosa- me sonrojo al momento de sentir la voz de Harry en mi oído. Abro un ojo lentamente y lo observo en silencio. Un par de sus rizos caen sobre su frente, no se puede ser tan adorable.

Aparto mi mirada avergonzada por su comentario y vuelvo mi vista al mar. Esta tarde a sido perfecta. Sin nadie más que él y yo. Cuando Niall me iba a besar lo supe. Supe que no era correspondido ese beso, y me alegro que Harry me salvara pero... me gritó al llamarlo por su nombre. Tiemblo levemente y observo sus ojos claros de nuevo mientras me siento con las piernas cruzadas.

-Emm... Señor, bueno, Harry, antes de que digas nada de "no me llames así", quiero pedirte si te puedo llamar así cuando estemos solos... es que... sería raro llamarte señor siendo mi... novio- aclaro mi voz y cruzo los dedos por que me diga que tengo todo el derecho a llamarlo así.

-Está bien, no tendría mucho sentido ¿no?- me mira cariñosamente y no evito sonreír de felicidad- Acuérdate de que tiene que ser un secreto.

Asiento con lástima y echo un mechón de mi pelo suelto -y aun mojado- detrás de mi oreja. Está claro que no podría salir a la luz, lo sabía incluso antes de que me hubiera pedido ser su novia. Pero... ¿De quién tiene tanto miedo que quiere ocultar sus sentimientos? Me doy fuerzas mentalmente y me pongo cara a cara frente a él.

-Harry.

-¿Si?- sonríe por ser la primera vez que lo llamo Harry sin problemas y espera mi pregunta tranquílamente.

-¿De qué tienes miedo?

Su sonrisa se borra y mira el mar. Suspira. Tal vez tampoco esté listo para responderme a esa pregunta, debería haber esperado un par de días. Me lamento totalmente.

-Perdón. No quería incomodarte es que...

-Da igual, te aseguré que eras una chica lista ¿verdad?- se levanta y me mira con una pequeña sonrisa, acepto su mano sin pensarlo dos veces y me ayuda a levantarme. Asiento- No tiene importancia para tí.

-Si estás en peligro, es más que importante.

Lo miro seriamente y aprieto su mano. Tengo que demostrarle que yo lucharé por lo que necesite al igual que haría conmigo. No debe haber problemas. Debo contarle sobre el plan de Niall y Louis. 

Suspira en derrota y tira de mi mano para empezar a caminar por la orilla del mar. Ahogo una sonrisa al ver que a decidido contármelo y vuelvo a apretar su mano.

-Mi vida está llena de complicaciones -hace una mueca y despeina su pelo hacia detrás-, nunca dejaría que te pasara algo por mi culpa. Te aseguro que si fuera por mí, llegaría a la mansión y mandaría a todos a la mierda para que podamos estar a solas. Pero no puedo -suspira y se encoje de hombros mientras evita mi mirada-. Hay alguien que manda más que yo.

Abro los ojos como platos y tapo mi boca con mis manos. ¿Hay alguien que dirige a Harry, que manda sobre él? ¿No me pudo tocar la vida de una adolescente normal en la que te escapas por la ventana para ver a tu novio a escondidas? Agarro a Harry de la mano tras haber asimilado lo que me ha dicho. Nuevos retos.

-¿Y... qué más?, ¿qué pasa con él?

-Solo te diré que tiene el control absoluto, y... dentro de tres dias vendrá a la mansión para el intercambio.

-¿Habrá intercambio de verdad?¿Alguna de nosotras o alguno de los chicos se irá?

Harry asiente y mi mundo se para. Pueden separarnos si ese hombre vé algún fallo en mí, niego con la cabeza por ese pensamiento. Aguantaré todo menos estar separados. Pero me alegro al saber que puede que no sea yo. ¿A quién cambiarán?

-Harry- me mira y veo que está decepcionado-, ¿y... quién se irá?

Me da la espalda y noto como suspira de nuevo y vuelve a pasar su mano por su pelo.

-Ya han entregado mis informes, hoy exactamente.

Frunzo el ceño y agarro su hombro para que me mire a la cara. Esto me está empezando a asustar, ha intentado cambiar de tema.

-¿Qué escribiste?

Aprieta los labios e intenta evitar mi mirada de nuevo. Cojo su cara con mis manos y lo obligo a mirarme fijamente.

-Escribí que... no has cumplido con tus tareas, pero Niall se encargaba de lo demás y los entregaba- Harry aprieta los puños.

-¡Si yo he hecho todo lo que me has dicho!- lo miro enfadada y pongo mis manos en mis caderas. No he hecho nada malo que yo recuerde.

-Estaba enfadado contigo -confiesa y me mira tristemente-, no sabia lo que hacia cariño, te lo juro.

Tapo la cara con mis manos y suspiro cansada. No me quiero ir, no quiero empezar de cero, pero a saber si Niall ya... ¡Nial!

-¿Cuándo entregaba los informes?- me acerco a Harry y lo cojo de los hombros con preocupación, después de lo de hoy, Niall es capaz de vengarse de mí.

-Tiene todo el día de hoy- me mira confundido y yo suspiro de alivio. ¿Y si aun no los a entregado?

-¡Vamos corre!- lo cojo de la mano y tiro de él hasta el coche, le obligo a que acelere y vaya lo más rápido que pueda a la mansión. Cruzo los dedos en mi regazo para que aún no los haya entregado.

Subo el volumen de la radio al ver que suena una canción tranquila y siento la mano de Harry en mi muslo. Lo miro con una sonrisa por darme tranquilidad y apoyo mi cabeza en el cristal. Todo dependerá de si Niall a escrito algo más o de si el "superior" no ve que cumplo mis obligaciones.

-¡El coche de Niall!- Harry para del coche y observamos como exactamente el coche de Niall sale a toda velocidad. Bajo la cabeza con tristeza,  solo queda ver lo que pasará en tres días. Paso mi mano por mi pelo y y cierro los ojos. Todo a pasado de ser un buen día a un día horrible. Miro a Harry y recuerdo que he de contarle sobre Louis y su plan, eso es lo único que falta por confesar.

-Harry- pongo mi mano sobre la suya y lo miro a los ojos- este no es el único problema que hemos de resolver- suspiro cansada y miro al frente- Niall y Louis quieren matarte por lo que le hiciste a la novia de Louis.

Cierro los ojos con miedo de que se ponga histérico y al no escuchar nada me preocupo todavía más. Abro los ojos lentamente de nuevo y me percato de que Harry me mira con una sonrisa de lado.

-¿Qué? ¿Te da gracia que quieran matarte? Hoy le quité el móvil a Niall para que no avisara a Louis de que tenia campo libre. ¿Y te ríes?

-Pues sí.

Le doy un codazo en las costillas y lo miro enfadada. Esto es serio y parece que no le importa.

-Esto no debería darte gracia.

-Gracias por contármelo nena- se acerca y me da un beso por sorpresa, le respondo rápidamente pero lo alejo al darme cuenta de su respuesta.

-¿Por qué me das las gracias?- frunzo el ceño y él acaricia mi mejilla. Sus cambios de humor me siguen dando miedo.

-Porque me encanta saber que has hecho lo posible por ayudarme y me quieres proteger tu sola.Quiero que sepas lo que pasó con la novia de Louis pero creo que el día ya ha sido bastante malo con éste final- estira sus brazos y pone uno de ellos tras mi asiento.- Y además, yo se cuidarme.

-Ahora mismo estarías en un hospital seguramente en coma si no fuera por mí, tonto.

Empieza a reirse y yo me esfuerzo por no pegarle otro codazo en las costillas. Pero al final me contagia la risa y me mira con sus hermosos ojos de nuevo.

-Pues me alegro de que me hayas salvado, mariposa.