Stockholm Syndrome

26. Nunca podremos.

Marie

-¡Marie!, que alegría verte y... ¡Uau, que alegría verte con ese vestido también!

-Cierra el pico Niall.

Ni siquiera lo miré, me senté en el único sitio que estaba libre y empecé a jugar con mis manos en silencio.

Ahora me daba cuenta de todo. Harry nunca logró ser totalmente para mí. Nunca pudo separarse de lo que era. Aunque de verdad me quisiera, nunca lograría cambiar. Me tengo que ir de esta casa como sea.

-Hey, ¿qué te ocurre?

Niall apoyó su cuerpo sobre la mesa y miró mi cara. Me la tapé con el pelo y miré a la izquierda.

-Nada.

-Eso significa que te pasa de todo.

Suspiré y lo miré con las cejas alzadas. Este chico no se iba sin lograr una respuesta.

-Este no ha sido el mejor día de mi vida. Preferiría estar en otro lugar ahora mismo.

-¿Y por qué no te vas?

Empecé a jugar con mis manos sin mirarlo a los ojos.

-Como si pudiera hacerlo...

Niall vaciló durante un momento.

-El señor tiene mucha atención puesta en ti. He observado que si tú quieres algo, él intenta conseguirlo... ¿estás segura de que no te dejaría irte de aquí?

Estaba escuchando a Niall, el mismo hombre que quiere matar a Harry. El mismo hombre que está enamorado de mí. ¿Estaría bien seguir escuchándolo?

-Marie, no le des tantas vueltas. Hazlo y ya está. Además, creo que es el momento de preguntarte esto... ¿Qué clase de relación tienes con Harry Styles?

Paré de jugar con mis manos y le presté atención.

-¿Qué?¿De qué estás hablando? Soy una de sus esclavas, eso es todo.

-Creo que ha llegado el momento de que seas sincera contigo misma y sincera con todos los presentes. ¿Qué nos estais ocultando? Quiero decir, ese puñetazo que me dió el otro dia me sorprendió, creo que tanto a mí como a él. Nunca se había atrevido a pegarme tan brutalmente, y yo, personalmente, creo que siente algo muy fuerte por ti. Pero... ¿Tú que sientes por él? No se si me he explicado bien...

-No, al contrario, te he entendido- me doy la vuelta y observó el salón-. Pero solo te puedo asegurar algo en este momento. No somos nada. Y si lo fuimos en algún momento, eso quedó en el olvido antes de bajar esas escaleras.

Aunque supiera que se estaba acostando con Amanda para que yo estuviera bien, sabía que los chantajes no cesarían. Amanda no pararía de obligarlo a estar con ella a cambio de su silencio, y yo no podría vivir feliz junto a él sabiendo que esa sería la escena que vería cada día al bajar por las escaleras. Al fin me he dado cuenta de la verdad, él y yo nunca podremos estar juntos.

 Me levanté dispuesta a volver a mi habitación pero justo cuando pasaba junto a Niall, escuché como la puerta se habría y me quedé congelada. Había llegado.

-Bienvenido amo Zayn. ¿Qué tal su viaje?

-Bien querida, me alegro mucho de poder estar aquí para poder veros de nuevo a todas, o a casi todas. ¿La chica nueva dónde se encuentra?

Su voz era tan... intimidante. Tragué saliva y me acerqué a Niall, quien se había levantado rápidamente y se había quedado paralizado al igual que yo.