Stockholm Syndrome

9. Maldito nombre

-¿Vamos a algún lugar hoy también?

-Creo que esa es tu pregunta favorita.

-¿Tu también lo crees?

Lo observo con una sonrisa divertida. Desde que bajó por las escaleras y me dijo buenos días no e dejado de sonreír. Y me parece genial que quiera salir conmigo.

-¿A dónde vamos?

-Tengo una sorpresa para ti -el rostro de Harry no daba más de felicidad.

-¿Enserio? -no oculto la curiosidad en mi voz.

-Sígueme.

Coge mi mano y juntos bajamos las escaleras de la mansión.

...

-¿Preparada?

-Siempre.

Él me tapa los ojos y me lleva hasta su secreto.

Al sentir sus manos desaparecer de mi cara, una sonrisa aparece en esta.

-Wow-es lo único que le puedo decir.

Una hermosa puesta de sol está frente a mí.

Y frente a esta, un mantel y comida, más dos velas.

-¿Te gusta?-me pregunta, mirandome fijamente.

-Me encanta...

Nos sentamos en el mantel y el observa el paisaje bebiendo un poco de vino.

Yo hago lo mismo, pero solo miro el atardecer.

-Es precioso.

-Y tanto- dice Harry, pero se que no miraba el paisaje.

Giro mi cabeza y observo como me mira, fijamente.

Me sonrojo notablemente y bajo la mirada.

-No es gracioso.

-Sabes que si- responde.

-Harry...

Le he llamado Harry.

Su nombre.

Él frunce el ceño en ese momento, como pensado en algo, pero dirije rápidamente la mirada hacia mí de nuevo.

Suspira.

-Lo has estado esperando, ¿no?- me mira seriamente.

-¿Él que?-pregunto, claramente confundida.

-Llamarme por mi nombre.

-Yo solo...

No se que he de responder.

¿Por qué lo he llamado así?

-Marie mírame.

Yo levanto tímidamente la mirada.

-Pensé que nunca diría algo como esto pero... La verdad es que me gusta estar contigo, me gusta pasar todos estos momentos divertidos contigo, ver el atardecer, observar tus ojos cuando te brillan de la emoción... No se lo que me has echo, pero me has convertido en un adicto a tí, a tu presencia.

Levanto mis manos lentamente y me cubro la boca al escuchar sus palabras.

-Me gustas, Marie.

Él se acerca lentamente a mí y me abraza fuertemente, como queriendo que nunca me escapara.

-No se lo que he de decir ahora...

Me mira tímidamente, esperando mi respuesta.

-Yo.. Yo tampoco- cierro los ojos.- La verdad, nunca pensé que...

-¿El qué?

Siempre sus manias de ser ansioso.

Pero me encanta su ser.

-Que pudiera sentir algo por mi secuestrador.

-¿Aun me ves como tu secuestrador?

Lo miro a los ojos.

-¿Aun me vez como tu esclava?

Él vuelve a permanecer en silencio.

-Solo quiero preguntarte... ¿Tu sientes que...?

Una pita de un coche hace que giremos la cabeza hasta ver al chófer de Harry mirandonos y haciendo señas con las manos.

-Marie-Harry me mira y coje mi mano- después hablaremos en tu cuarto.

-Como mande.

Suelto su mano y me dirijo hacia la limusina de Harry observando por última vez como él su a quedado mirando al suelo, pensativo.

...

Me coloco bien mi camiseta de pijama y me dirijo hasta la habitación de Amanda.

Toco la puerta esperando su respuesta pero al abrirse, mi cara cambia de emoción.

Veo a Amanda tumbada en su cama con una gran sonrisa y... Desnuda.

Y a su lado.

Harry. Sin camisa. Atandose los baqueros como puede.

Gira su rostro asi mí en ese momento.

Su rostro es de sorpresa y de desesperación al verme.

-Marie...

Yo no le escucho, me dirijo directamente a mi habitación.

-¡Marie!

Oigo sus pasos corriendo hasta mi habitación y tocando la puerta con desesperación.

-Vete-digo yo, defraudada.

-No es lo que parece, yo no...

Le abro la puerta y al verle, una lágrima cae por mi mejilla.

-Con que al parecer te gusto-digo con todo el asco del mundo- ¿No?

Cierro la puerta en sus narices y me dirijo a mi cama, escondiendome bajo las sábanas mientras lágrimas silenciosas caen por mis mejillas.

-No lo entiendo...-susurro- como... Me ha dañado...

¿Qué me ha pasado?

Cuando me he convertido en una persona... ¿Débil?

Todo por llamarlo por su maldito nombre.

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Fiin del regaloo (3-3)

Gracias a tod@s mis lectores.

Mi año a sido genial por ustedes, y esta navidad vuestro regalo de los comentarios y los likes...

Wow son mucho para mí.

De verdad, GRACIAS.

¡Osss amoooo! *---*