¿Y Si Nos Vemos De Nuevo? (Skrillex & tu) ||Terminada||

#15 Día de Playa y Mentiras 1/2

-Tengo frío... -Mis dientes castañeaban como era costumbre desde que llegué a este ártico lugar llamado Canadá.

Recién comenzaba el invierno y era costumbre que hiciera más frío que el resto de los días, los copos blancos caían con paciencia al suelo para convertirse en uno más entre esa alfombra blanco que cubría la mayor parte del campo de fútbol, la chamarra negra con un tenue y casi imperceptible olor a él que logré conservar de recuerdo no era suficiente para calentarme, hacía falta su calor, hacía falta su presencia y su voz diciendome cosas sobre lo tanto que odia la nieve

"-Cuando era pequeño fui a Nueva York y quedé atrapado en una zanja en pleno invierno, fue necesaria una hora para sacarme ya que la nieve estaba demasiado alta porque ese día hubo una ventisca cómo la que no había en años, y como era de esperarse me enferme como nunca."

Jamás he ido a Nueva York... y la nieve no me parece tan mala como para él sí, aunque era inevitable recordarlo al verla, una cosa más que me hacía querer irme de Canadá y volver a donde nunca cae nieve. Suspiro creando pequeñas nubecitas con mi aliento.

-¡Señorita Armstrong! -Grita alguien desde un lugar desconocido, haciéndome salir del pequeño trance en el que me encontraba. Buscaba con la mirada a la persona que me llamaba sin éxito de verla. -Señorita Armstrong. -Vuelve a decir esta vez a mi lado, doy un salto asustada por la sorpresa tan repentina y noto que era la profesora con la que se supone tengo clase ahora mismo. -¿Qué hace evadiendo clase y aquí sentada en pleno frío? Se va a enfermar gravemente. -Dice como reprendiendome.

-Tengo una chamarra. -Le contesto algo sarcástica y ella frunce el ceño, se acomoda los lentes y retoma el aire.

-Me esperaba más de usted y más ahora que es una recién llegada -Dice volviéndome a reprender.

-Ni siquiera quería venir a este lugar... Es un asco. -Contesté sin poderlo evitar. -No quiero estar aquí... -Abrazo mis rodillas y me incorporo entre ellas sin despegar la mirada de algún punto perdido entre toda esa nieve.

La maestra me agarra del brazo haciéndome levantar y lastimandome en el proceso, logro soltarme de su agarre golpeándole la mano y evitando no llorar de la impotencia que sentía, me muerdo el labio cuando siento que las lágrimas amenazan con salir.

Lo necesito... Necesito a Sonny, a sus abrazos que me reconfortaban y a sus besos que me encantaban, una lágrima se escurre por mi mejilla y aprieto los labios.

-No me toque. -Digo con voz temblorosa y ella frunce más el ceño.

-Vaya a la oficina del director, llamaremos a sus padres para que vengan. -Ordena duramente a lo que tomo mi mochila y limpio la nieve de mi ropa sin quitarle la vista de encima, la miraba con una cara nada amigable.

-Dígales de una vez que me saquen de aquí. -Contesto de mala gana y aguantando las ganas de echarme a llorar, me voy de ahí refunfuñando. Oh si, vamos a Canadá decían, será divertido decían.

Pateo la nieve antes de entrar y sigo caminando.

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Mojo mi rostro para esconder la evidencia de haber llorado, volveré a donde estaba hace un rato y le explicaré las cosas, le pediré disculpas, por lo que hice y con eso estaré un poco más tranquila. Me miro al espejo y sonrío como dándome ánimos y salgo a paso decidido hasta aquel pasillo enfrente de la biblioteca.

-Sonny... -Digo y dejo las palabras al aire al notar que ya no está y es que era obvio, ya no quiere saber nada de nada, estar en estos pasillos es agonizante y mi reacción pudo haberlo herido.