(Daniela)
Ya es un nuevo día ...
Mis ojos se van abriendo lentamente acostumbrándose a la luz que traspasa por mis ventanas. Hoy es mi primer en la empresa EBULOUS, mentiría si digo que no estoy nerviosa, la verdad es que me estoy muriendo de los nervios.
Dejo todo lo que esté pasando por mi cabeza y me levanto de la cama, antes de meterme a bañar me pongo a ordenar mi cama y algunas cosas que están tiradas por el suelo. Una vez lista mi cama, entro de inmediato a la ducha dándome un baño con agua fría para poder calmarme un poco.
Me coloco mi ropa interior y agrego un poco de crema sobre mis piernas antes de ponerme mi ropa que usare el día de hoy. Seguido de eso empiezo a cambiarme, me pongo una blusa de color casi crema con unas hojas de color chocolate de estampado, tiene un escote en forma corazón, mangas a los costados de estilo algo acampanado, pero sujetado de la parte de arriba y por la muñeca, que dejan desnudos mis hombros. En parte de abajo llevo un short elegante pero también juvenil por los bolsillos que tiene a los costados, de un color beige.
Para que no se sienta tan vacío opto por ponerme un collar con un dije de cruz y un pulsera dorada en la muñeca izquierda, para la mano decido que no me pondré ningún anillo o algo por el estilo. Ya era suficiente con mis uñas pintadas, por cierto, a la que estuve en el salón de belleza aproveché para hacerme una manicura y pedicura.
Por últimos los zapatos, en este caso no usare unos pantis, simplemente me los pondré así.
(Los zapatos de Daniela)
Ya tengo casi todo listo, ahora me toca maquillarme, me pongo un poco de máscara para pestañas, polvo, un labial de tono natural y un poco de brillo para los labios. Me echo algo de perfume y ya estoy lista.
Salgo hacia la cocina para poder tomar algo antes de irme a mi nuevo trabajo, me sirve una taza de taza de café recién pasado, unas tostadas con mantequilla y una fruta picada con algo de cereales, me fijo en la hora y veo que 7: 00 am. Antes de irme quisiera ir a visitar un rato al señor Luis para poder contarle la noticia, pero antes de eso voy hacia el baño para lavarme los dientes.
Lista, voy bajando hacia la entrada del edificio y ahí lo veo.
- Buen día, señor Luis - aparezco con una sonrisa.
- Buen día, niña Daniela - ya me acostumbré a que me llamé así.
- ¿A qué debo tu visita tan temprano? - me pregunta.
- Es que quería decirte que ya conseguí otro trabajo - le cuento.
Él simplemente sonríe aún más, viene hacia mí y me da un gran abrazo. Al recibir ese cálido abrazo me siento más tranquila, segura de que puedo lograr todo lo que quiera.
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DETRÁS DE TU SONRISA
Lãng mạn" A VECES, DISFRAZAMOS EL DOLOR QUE SENTIMOS POR UNA SONRISA QUE HACE CREER A TODOS QUE ESTAMOS BIEN, CUANDO REALMENTE EL DOLOR NOS CONSUME POR DENTRO Y SOLO APARENTAMOS POR FUERA "