DETRÁS DE TU SONRISA

Capítulo 17

(Marcus)

Me encuentro muy enojado con Henry por referirse de esa manera a Dani. Quizás él trate de ocultar que empieza a gustarle Dani, pero yo soy más astuto que él.

Sé perfectamente que se puso celoso por las flores que le tiraba y eso. 

Yo al decir todos esos halagos hacia ella era verdad. Ayer nos la pasamos de maravilla.

ESCENA RETROSPECTIVA

Ayer por la mañana cuando termine de tomar ese delicioso café decimos irnos a pasear al centro comercial, dos horas después de pasar por tiendas y mirar algunas prendas propusimos ir al cine. En toda la película Dani no dejaba de reír y eso me hacía sentir feliz, finalmente al salir nos dio hambre por lo que le propuse que fuéramos a un boliche a jugar un poco de bolos ya la vez comer algo, por supuesto ella acepto hasta dijo que me ganaría todas las rondas.

Entramos al establecimiento y pedimos una mesa, al rato un chico nos atendió. Pedimos unas hamburguesas con papas y una coca cola, lo sé mucha comida chatarra, pero que le digo nos quisimos salir de la rutina.

Empezamos a comer mientras contábamos chistes y hablábamos de cosas tribales. Al acabar descansamos unos diez minutos antes de empezar con la guerra de bolos.

 Dani se levanta de la mesa y dijo:

- ¿Listo para perder? - movía las cejas.

- La pregunta debería ser en reversa - me pongo de pie.

- Andando Marcus, veamos quien sale ganador - me jalo hacia uno de los lugares.

En la primera ronda ella gano, no dejo de saltar tal niña pequeña, hacia bailes muy divertidos .

Yo estaba muy agitado hacía tiempo que no jugaba.

De pronto mi celular suena, en la pantalla puedo visualizar el nombre de Henry así contesto de inmediato.

- Diga - contesto

- Hola Marcus, soy Henry.

- Oh querido amigo, a que debo tu llamada.

- Quería sab ..

Se calla de pronto.

- ¿Estás listo para la segunda ronda? - venia Dani con los brazos cruzados.

- Por supuesto linda.

Tras escuchar la respuesta se dio la vuelta para observar a los demás jugar. 

- Creo que estás ocupado.

- Así amigo mío.

- Entonces no te molesto más - sonaba molesto.

- Oye ... - trato de hablar, pero ya me había cortado.

La verdad no le tomé mucha importancia a su molestia ya que él suele estar así la gran mayoría de tiempo.

Nos la pasamos muy bien hasta que anocheció.

Salimos del lugar y caminamos hacia el estacionamiento donde se encontraban estacionados nuestros autos.

- Creo que aquí nos despedimos - sueno gracioso.

- Sí.

- Que tengas buena noche - la doy un corto abrazo.

- Igual para ti.

Nos quedamos en silencio un momento hasta que lo rompe.

- Marcus - yo llama.