Capítulo 21

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(Daniela)

Ha pasado unas cuantas horas desde que Marcus me contó un poco de su historia. La verdad me sentí muy triste al enterarme de lo que pasó con su pequeña hermana y con sus padres, por lo que Marcus me contó que ellos son unas grandes personas y le creo al ver cómo es él.

Por un momento sentí la fuerza total para poder contarle todo a Marcus como él lo hizo conmigo, pero se que algún día podría abrirme completamente.

...

Escucho un sonido procedente de algún lugar no le tomo importancia y sigo durmiendo, pero ese sonido sigue y sigue. Decido abrir mis ojos y bueno buscar el objeto que ha interrumpido mis dulces sueños. Busco entre las colchas hasta que lo encuentro era mi celular con la alarma.

Esperen era la alarma!

Rápidamente revisa la hora y es las 6:00 AM.

- Uf - suelto.

Volteó hacia mi derecha encontrándome con un bulto entre las colchas, hago memoria y recuerdo que con Marcus acordamos dormir en el suelo, él hacia arriba y yo hacía abajo. Dejo de pensar en cualquier cosa y me concentro que tenemos que alistarnos para ir a trabajar.

- Marcus - lo muevo despacio.

- Mmm.

- Ya es hora de levantar.

- No mami cinco minutitos más - me causa gracia que piense que soy su mamá.

- Ándale.

No dice nada, solo agarra las colchas y se voltea de lado abrazándolas.

- Marcus, llegaremos tarde - empiezo a elevar mi voz.

- Déjame mami.

- Muy bien, tu lo quisiste.

Me pongo de pie y voy hacia la cocina, cojo un vaso y lo lleno con agua fría.
Vuelvo al lugar donde se encuentra Marcus que aún duerme.

- Te lo buscaste - le echo el vaso de agua en la cara.

- AHH - se levanta de un tirón.

- No me dejaste opción - me tira una mirada no muy buena a decir verdad.

- ¿Me quieres matar de hipotermia?

- Que dramático eres solo fue un chorrito.

- Como a ti no te lo tiraron - habla entre dientes levantándose.

- Pues porque yo si desperté.

- Sisi.

- Lo siento, es que llegaremos tarde al trabajo.

- Ya entendí.

Camina hacia el sillón donde se encuentra su mochila con sus cosas personales.

- ¿Te importaría prestarme tu baño?

- Para nada.

- Gracias.

Se va directo a los servicios.

Doy media vuelta con dirección a la cocina para preparar un jugo con todas las frutas.

Al cabo de un rato el jugo está listo, pero Marcus aún no sale del baño por lo que decidió ir a arreglarme.

Llegó a mi habitación y con la misma me to a la ducha de esta. Al salir del baño me pongo una falda rosa palo, una blusa blanca con escote discreto y unos tacones del mismo color. Una vez lista salgo en busca de mi amigo, llegué a la cocina y lo veo ahí sentado viendo su celular.

DETRÁS DE TU SONRISADonde viven las historias. Descúbrelo ahora