Capítulo 31

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(Marcus)

Ha pasado dos semanas desde que le di permiso a mi amigo Henry para que pueda andar con mi hermanita.

Justo ahora estoy en la oficina de aquella susodicha.

- Te haz desaparecido por casi una semana señorita ya iba a levantar una búsqueda - la escucha reír.

- No seas exagerado Marcus, solo he estado entretenido con Henry - la miro muy ilusionada, cada vez que mencionamos a Henry sus ojos toman un brillo especial y eso me hace sentir muy bien.

- Y vaya que si te entretiene - no reímos juntos.  

- Marcus - me habla - sé que te dije que no estaba lista para hablar de mi pasado, pero quisiera liberarme de esto - veo sus ojitos tristes - quiero sentirme libre de cualquier agobio que hay en mí.

- Sabes que puedes decirme lo que quieres Daniela - la miro fijamente.

- Poco a poco pude entender que no fue culpa mía que pasara todo, yo nunca quise que le hicieran daño a Marcus - una lagrima sale de su ojo derecho - solo quise aprender a amar.

Me levanto de mi asiento y voy hacia ella.

- Tranquila Dani no sé lo que haya ocurrido, pero créeme que cuando estés lista y necesites a alguien que te escuche yo siempre estará dispuesto para ti a la hora que sea.

- Muchas gracias Marcus - me abraza con un gran sentimiento.

- Siempre te voy a proteger a Dani, te quiero como una hermana.

- Te vuelvo a decir lo que te comente hace semanas - Estoy muy segura que tu hermanita en cualquier lugar en el que se encuentra está muy orgullosa de ti.

 Un sentimiento de nostalgia viene hacia mí como una ráfaga, los recuerdos, cada detalle hermoso que pasa junto a mi rayito de luz viene hacia mí.

- Es lo que más deseo día a día - le digo.

(Daniela)

Llevo metida en mi oficina casi toda la mañana revisando papel tas papel, no he podido comunicarme con Henry y eso me hace sentir un poco rara, como si tuviera un pendiente atrasado. 

- Al fin - digo cansada - he acabado con estos reportes.

En ese momento escucho tocar la puerta.

- Adelante - digo mientras acaricio mi cuello suavemente.

Al no tener ninguna respuesta decidió pararme a abrirla. Cuando ya me encuentro en la puerta no veo nada, volteo para entrar nuevamente cuando me doy cuenta que hay algo en el piso, al recogerlo puedo notar que es una nota.

- Sé que no nos hemos visto en toda la mañana princesa, pero no quiero que olvides que siempre estoy pensando en ti - no dudo que esto sea de Henry.

Al levantarme del suelo puedo ver una silueta puedo observar una silueta muy conocida para mi en estos días.

- Espero esa sonrisa sea por mí - viene hacia mí.

- Da la casualidad que no como la ves - le digo - es por un caballero muy guapo que me ha enviado una nota bellísima.

- Así ?- dice abrazando mi cintura.

- Por supuesto.

- Te extrañe - junta su nariz con la mía.

- Yo también cielo - junto nuestros labios en un beso lento, pero lleno de pasión desbordante en el, nos separamos al necesitar oxigeno.

- Al parecer hoy hubo más trabajo que otros días eh?

- Mucho diría yo.

- ¿Qué te parece si para distraernos vamos a almorzar princesa?

- Me encantaría - digo.

- Entonces vamos - agarra mis manos.

- Vamos - le sonrío.

No fuimos tan lejos de la empresa debido a que teníamos mucho más trabajo pendiente.

- No quiero - refunfuñe.

- Anda princesa prueba este rico pescado.

- No Henry, no me gusta el pescado - él solo se burla, a decir verdad ahora lo veo sonreír mucho más y eso llena mi corazón de una manera muy acogedora.  

- Me gusta verte sonreír cielo - agarro su mano.

- Hay motivo muy grande por el cual lo hago princesa, simplemente tener tu compañía me hace querer sonreír y pasarla bien - las mariposas de mi estómago revolotean ante lo dicho.

Ya terminamos de almorzar y salimos para ir directo al auto de Henry. Estoy esperando a Henry que fue por algo que se le olvido, voy pensando en nada cuando siento que agarran mi brazo muy fuerte.

- Es un gusto verte nuevamente mi vida - esa voz, giro la cabeza y ahí está como la dejé la última vez, pero ahora tiene muy marcado esos ojos de odio que recuerdo muy bien.

- Parece que te comieron la lengua los ratones - se ríe.

Siento mi mundo detenerse, mis ojos se inundan de lagrimas y los recuerdos salen a flote.

- No me lastimes por favor - trato de soltarme, pero solo logro que su agarre se vuelva más duro y firme.

- Ahora no volverás a escapar palomita - no eso no - vine a cazarte.

Estoy en shock que ni me di cuenta que se había marchado.

- ¿Estás bien princesa? - Esa es la voz de Henry.

- Si solo vámonos - él muy confundido me ayuda a subir al coche.

- ¿Qué sucedió mi amor? 

- Nada cielo solo me puse sentimental es todo - yo sé que no me cree del todo, pero es mejor así.

(Henry)

Esto es muy extraño, me fui unos minutos y al volver veo a mi princesa lagrimeando. Claro que me dio su excusa de porque se encontraba así pero en realidad no le creo nada.

- Nos vemos a la hora de salida princesa - me despido de Dani.

- Nos vemos hasta entonces cielo - me da un casto beso y sale disparada a su piso.

No puedo concentrarme como debería y la razón de ello es mi princesa que se encuentra mal por alguna circunstancia que desconozco?. Siento que tocan mi puerta.

- Adelante - por aquella puerta aparece mi mejor amigo.

- Amor mío vengo con una noticia bomba - parece que su cara se quebrara en cualquier momento por tal tamaño de sonrisa.

 - ¿Qué sucede?

- En un mes y medio volverán mis padres - tener de regreso a los Marquett, es una buena noticia. 

- Eso suena muy bien Marcus.

- Y ahora vienen a quedarse.

DETRÁS DE TU SONRISADonde viven las historias. Descúbrelo ahora