Loto Rojo, era como llamaban a aquel par de hermanas que acababan con cualquier banda de delincuentes que estuviese en su camino. Dos chicas que debieron dependerse de ellas mismas si querían sobrevivir en las frías calles de Yokohama. No eran amant...
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Pov Normal
Miró a su hermana cómo le enseñaba la ropa que había comprado. Hanami solo sonrió viendo el estilo de la moda de Harumi, sabía que ella le encantaba estar a la moda y por primera vez había encontrado una amiga con quién compartir esos gustos.
—Oh dios, sí que me entiendes Emma. —Le dijo tomando las manos de la rubia—. Nachan ahí donde la ves escogió ropa barata y a cantidad, tan simple que a penas va a parecer una chica. —La pelirroja se sintió de momento ofendida por aquello que dijo su hermana, pero era cierto.
—Deja mi estilo en paz —susurró con una pequeña sonrisa y miró a las chicas.
Había pasado una semana desde el incendio, si estaban sin pistas de la persona que había incitado el comportamiento de la pandilla y además sin noticia de su padre para conseguirles una nueva casa. Hanami tenía mucho en que pensar, aunque no lo pareciera de las dos ella era la pensaba las cosas más complicadas y hacía lo posible por descubrir. La de cabellos rojos solo suspiró mirando la hora de su teléfono, debía irse en unos minutos porque ella era quien preparaba la comida en aquel lugar.
—Disculpen por interrumpir su aburrida plática. —Draken apareció por la puerta de la habitación de la rubia haciendo que Emma le lanzará una almohada que el chico esquivó.
—¡Ken-chan! Se llama antes de entrar. —Hizo un puchero mirando al rubio, Hanami solo suspiró aquella aparición era su campana para irse de casa de los Sano.
—Si, si, como sea, Hana-chan nos vamos. —La chica se levantó de la cama mirando a su hermana y la rubia.
—Fue una tarde agradable pero tengo que ir a cocinar. —Les sonrió a ambas mientras se dirigía a Draken, aquellos dos parecían llevarse bien a Harumi se le hacía extraño aquello pues conocía a su hermana.
—Ah, eso es injusto si vivieras aquí podríamos cocinar juntas. —Emma hizo un puchero mientras veía a la pelirroja irse con el rubio.
—Algún día lo haremos. —Le contestó Hanami despidiéndose de la chica, Emma miró a Harumi que no decía una palabra solo levantaba los hombros.
—Sabes Haru-chan es extraño como Ken-chan trata a Hana-chan. —Emma se llevó una mano a su mejilla mirando a su amiga.
—Lo mismo pienso de Nachan. —Ella dejó escapar un suspiro pensando en su hermana menor y como había hecho migas con casi todos de la TouMan.
—Chicas. —La voz de Mikey les invadió de su pequeña conversación—. Hay reunión de la TouMan, Haru-chan tiene que ir conmigo. —Las dos se miraron la seriedad que demostraba Mikey con esa llamada.
—¿Y Draken y Nachan? —Le preguntó al comandante de la pandilla, la azabache sentía que algo estaba mal tenía ese extraño presentimiento.
—Los acabo de llamar antes de irse, están afuera esperándonos —contestó el rubio, Emma no entendía los asuntos de la pandilla ni nada por el estilo pero de una cosa estaba segura y era que Harumi y Hanami aunque no lo quisieran ya eran parte de ella.
