Mr. Mark Smith

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Me levanté con un mensaje de Verónica avisándome que Blake se había despertado.

Claramente llegué un poco tarde porque vestir a dos niños no era algo tan fácil.

Esto era una práctica en toda su palabra.

Leah iba en la parte de atrás con los dos tratando de entretenerlo.

Cuando llegamos al hospital Blake no estaba en ella.

-Llevaré a los niños por jugó- asentí mientras Verónica se lo llevaba

-Los niños se quedaron con su abuela porque les trajo unos juguetes- asentí cuando entro Verónica sola

Esperamos unos minutos hasta que lo vimos entrar con unos enfermeros.

-Es que no entiendo porque ustedes dos tan tercos siguen así- mi esposa se cruzó de brazos

-Ya aprendí la lección- comento sin mirarnos

-Es que no entiendo porque ustedes dos se tomaron tanto tiempo en volver- dije mientras lo ayudaba a sentarse en su camilla

-Lo bueno es que mi hijo está bien y nada le paso, Madison tiene algunos rasguños en su rostro y cuello, pero está bien- sonrió mirando a mi esposa

-No la hagas sufrir más- susurro mi esposa mientras lo golpeaba

-Cuidando con mi hombre amiga- lo abrace

-Smith- dijo seria

-Amor una mujer enojada es lo peor que puedes ver- me susurro Blake

-Mentira mi reina- la abrace para luego besarla

-Mark me pediste matrimonio, no estoy con ella por casarme contigo- comencé a sudar en frío

El ganado se me estaba juntando.

-¿Entonces?- Leah me miro seria con sus brazos cruzados

-Tranquila cuñada solo la amo a ella- comentó Blake y no negaré que sentí celos

-Ustedes en su otra vida tuvieron que ser algo porque no entiendo- nos reímos por su comentario

-Si quisiera te quitaría a tu marido, pero soy bueno- me sorprendí de que solo esa idea pasara por su mente.

Tenía oportunidad de estar con él si los dos tomáramos la decisión.

Hablamos un poco más de diferentes temas hasta que tenía que ir a trabajar.

El deber me llamaba.

-Bueno amor de mi vida es momento de irme- lo tome de sus mejillas dispuesto a besarlo

-Amor- Leah colocó su mano en medio de nosotros

-Solo era un beso- dije serio

-Tus labios son míos- me tomó de mi rostro y me beso

-Amor, que   los niños nos ven- señale a Verónica la cual se reía

-Ya vi lo peor- dijo ella para despedirse de su hermano y salir ya que también trabajaba

-Bueno nos vamos, ahí te ves Blake- Leah me tomo de mi mano para sacarme de la habitación

Me despedí de él con mi mano ya que mi esposa no me dio tiempo para nada.

***

-Dios tomen las cosas suave conmigo, tener dos agendas es difícil- mire a las dos secretarias sentadas frente a mi con muchos contrato

-Lo sentimos- dijo Rebecca sonriéndome

-Volvemos- tome uno de los contratos que ellas me ofrecían