Secuestrando A La Princesa (II).

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—¡¡Suelta a la Princesa!!

    —¿Qué estás haciendo? ¿Sabes a quién estás sosteniendo?

    —Libera a la princesa de inmediato, ¿quieres rebelarte?

    La multitud se puso confusa, y la mayoría de la gente estaba comenzando a retirarse para evitar problemas. Desde el principio, no esperaban ver a la princesa legendaria, y luego de unos instantes, verla siendo secuestrada, solo podian ver impotentes. La multitud miró a Ye Wuchen con lástima, por atreverse a sostener una espada en el cuello de la princesa. La vida de esta persona estaba acabada.

    Sobre el palanquín de Luan, una de las manos de Ye Wuchen estaba abrazando a Ning Xue, y el otro brazo estaba alrededor de la asustada princesita, sosteniendo una espada en su cuello. La lastimosa princesita no se atrevía a moverse, sus ojos llorosos brillaban con la luz del sol, como rocío contaminado en un tierno loto, haciéndola parecer lastimera. Se mordía los labios y la punta de su nariz temblaba levemente. Esta fue la primera vez en su vida que un hombre le puso una espada en el cuello.

    Bajo su protección, la princesa fue secuestrada por un hombre que sostenía una espada. El sudor frío corría por la frente de Wu Shang. Independientemente de si la princesa fue rescatada de manera segura o no, su abandono del deber era un crimen del que no podía escapar. Y si la princesa tuviera un accidente, incluso si el emperador pudiera perdonarlo, preferiría suicidarse para disculparse por sus errores.

    Había escaneado los alrededores con su Qi de antemano, y no hubo indicios de peligros posibles ni nadie con un Qi poderoso, también sintió que Ye Wuchen no era más que un hombre común, por eso se atrevió a alejarse 5 pasos de la princesa. Su mente tampoco estaba en guardia cuando lidiaba con esa situación. Durante el momento en que estaba aturdido, Ye Wuchen se abrió camino sin esfuerzo en su espacio, usando su velocidad rápida para correr dentro del Palanquín de Luan. Mientras se movía, con facilidad robó una espada de uno de los cinturones de la guardia imperial y lo sostuvo contra el cuello de la princesa.

    —Técnica de evasión del viento —susurró Wu Shang, mientras tenía una expresión lúgubre y buscaba formas de rescatar a la princesa—. Que inesperado, eres un hechicero de viento poco común.

    De hecho, Ye Wuchen había usado una magia de viento de bajo nivel, la técnica de evasión del viento, que podría mejorar la velocidad de una persona por un corto tiempo.

    —¿Hechicero de viento?

    La multitud comenzó hablar con emoción. Algunas personas incluso mostraron claras expresiones de envidia y celos. Un hechicero era una profesión rara y respetada, solo aquellos que tenían talento y tenían magia en sus cuerpos podían estudiar en ella, que eran muy pocos. Si un hechicero y un guerrero del mismo rango lucharan, sería difícil determinar cuál era más fuerte.

    Pero si lucharan en una guerra, el formidable poder de un hechicero sería suficiente para enfrentar a decenas o incluso a varios cientos de guerreros del mismo rango, debido a que los hechiceros poderosos poseen un rango de ataque aterrador y devastadora. Y magia que son de naturaleza especial, les permite convertirse en expertos en muchos campos diferentes de experiencia, por lo que las personas que podían cultivar la magia siempre fueron muy valoradas por las naciones.

    Ocultándose silenciosamente entre la multitud, Long Zheng Yang, tuvo dificultades para resistirse a no mostrarse, porque si se mostraba, podría empeorar la situación y los espectadores verían a la familia imperial como una broma. Creía que Ye Wuchen realmente no tenía la intención de dañar a su hermana menor, y solo podía hacer todo lo posible para señalarle con los ojos. Al ver que Wu Shang estaba aturdido hace un momento... ¿No dijo el abuelo que era el descendiente de la Deidad de la Espada? ¿Podría ser que tenía lo que el palacio interno siempre había adorado: doble cultivo de artes marciales y magia?

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