Nicolás es un joven maestro que empieza a impartir clases en un colegio supliendo a su tío.
Todo va bien en la escuela pero los inocentes encuentros que tiene cada mañana con una de sus alumnas hace que entre ellos dos surja un fuerte sentimiento.
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La siguiente semana previa al campamento pasó muy lenta. Nicolás todavía trataba a Thaly con indiferencia, y en su intento de olvidarla, había comenzado a salir con Martha más seguido. Thaly tampoco prestaba mucha atención a su profesor, se limitaba a mirar por la ventana durante sus clases. Ninguno quería admitirlo, pero se extrañaban.
Por fin llegó el ansiado día, el lugar donde iban era una zona sub tropical, así que el calor allá era insoportable. Subieron a los buses que esperaban en la entrada del colegio, todos a excepción de Thaly, que había ido sola, se despedían de sus padres con abrazos y recibían recomendaciones. Desde hacía semanas Thaly tenía la ilusión de sentarse con Nicolás todo el viaje, habían muchas cosas que quería conversar con él; pero con el desplante de días atrás, perdió toda ilusión. Alison y Daniel se sentaron dos asientos contiguos, últimamente andaban más tiempo juntos, así que no tuvo más opción que sentarse adelante, al lado de Alex. Nicolás iba en el mismo bus, no tardó ni un minuto desde que se sentó para que un grupo de chicas del paralelo lo rodearan y se sentaran a su alrededor.
Todo el viaje lo observó, conversando y riendo con el grupo del paralelo. Aquello no le causaba gracia, a ella la ignoraba por completo, y a aquellas a quienes consideraban unas tontas que se le acercaban por primera vez, les hablaba como si fuesen amigos de toda la vida.
Llegados al lugar del campamento comenzaron a armar las carpas en un amplio terreno llano cubierto de hierba, atrás habían dos cabañas con la cocina, los baños y un par de habitaciones que permanecerían cerradas. Nicolás ayudaba a las chicas con las que había compartido el viaje; Thaly armó la suya sin dificultad y una vez terminada se dirigió a un lago cercano con un grupo de amigos.
Ese día se la pasaron nadando, el insoportable calor los obligaba a no querer nada más que mantener su cuerpo en el agua fría. Nicolás intentaba distraerse con el resto de alumnos, para no tener que ver a Thaly en un atractivo traje de baño.
Al atardecer, Thaly, Alison, Estefanía y otras chicas del mismo curso salieron del agua buscando su ropa. No estaba en el lugar donde la habían dejado, ni siquiera estaban las toallas. Se dirigieron hacia el campamento, pero sus bolsos con ropa tampoco estaban ahí. Inmediatamente supusieron que se trataba de una broma; no una broma muy buena. Ya empezaba a refrescar y sentían frío, como no tenían toallas no habían podido ni secarse. Se dirigieron hacia el grupo del 6ºB reclamando por la ropa. Solo recibieron burlas hasta que un chico les informó que sus cosas estaban colgadas de un árbol.
—¡Oh por Dios qué haremos! —exclamó Thaly con sarcasmo mientras trepaba al árbol. Un grupo de chicos del paralelo se aproximaron a verla subir. Los chicos comenzaron a silbarle y a decirle lo sexy que se veía desde ahí, sus amigas intentaban defenderla hasta que Nicolás se aproximó a preguntar qué sucedía. La respuesta se hizo clara cuando alzó la vista y vio a Thaly subida en el árbol vistiendo solo su bikini. Apartando la vista le pidió que bajara; ella le respondió lanzándole un bolso a la cabeza. Los otros chicos seguían mirando con perversión, lo que provocó que él se enfadara. Les ordenó que se fueran mientras subía para bajarla y evitar que siguiese con el espectáculo.
