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En el pueblo de Encantó vive la famosa familia Madrigal, los cuales cada uno de sus integrantes han recibido dones únicos y viven en una hermosa casa llena de milagros; gracias a la vela que le da poder a todo.
Esto a llega...
┏━━━━•❃°•°•°•°❃•━━━━┓ Prologo La llegada a Encanto ┗━━━━•❃°•°•°•°❃•━━━━┛
「 Pov Nᥲrrᥲdorᥲ 」
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Despertaste en el auto de tu familia, mientras abrías los ojos poco a poco sentiste un dolor en tu cuello por dormir en una mala posición; no era mucho, pero si te molestaría un rato.
Atontada miraste por la ventana solo para encontrarte con un paisaje lleno de árboles y un cielo azúl celeste brillante, te diste cuenta que ni siquiera había postes de luz cercanos a tu vista. Cuando ya estabas más despierta te acomodaste mejor para seguir admirando el paisaje.
— ¿Ya despertaste? —te pregunto tu madre, quién iba de copiloto y tu hermana mayor de conductora, supusiste que se habia cansado de manejar.
— Si. —respondiste algo ronca, estirando tu brazos y tomando una gran cantidad de aire por tus fosas nasales. — ¿Cuánto dormí?
— Casi todo el viaje, solo nos queda unos 20 minutos. —te respondió tu madre con una sonrisa.
— Ash, privilegios de ser la menor. —se burló tu hermana que iba al volante, tu solo la miraste con una sonrisa burlona.— Yo estuve despierta las 6 horas del viaje. A las 2 horas ya pensaba en tirarte por ahi.
— Aaaay, que mala. —te quejaste.
Ambas rieron, ambas se llevaban así de pesado; pero sin su madre eran aún mas pesadas, se llegaban hasta dar insultos (pero con cariño). Su madre solo rodo los ojo ya acostumbrada de sus juegos.
Seguiste mirando el paisaje de la ventana en silencio, solo escuchando de fondo la radio del auto que reproducía la canción de Un poco loco de tu tierra natal. No podías creer que ahora estabas a kilómetro de allá, de tu comodidad y tú cama. Ya comenzabas a extrañarlo.
Sobretodo a tu cama.
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Ya tu hermana había dado la vuelta, encontrándose con un camino lleno de tierra y no de asfalto. Sentías como todo el auto temblaba por las incontables rocas en el camino.
Entre todo el movimiento tu hermano menor,quien estaba a la ventana contraría, se despertó, completamente confundido miraba hacia la ventana como tú lo hiciste cuando también despertaste.
— Mami ¿Ya llegamos? —pregunto mientras bostezaba y rascaba sus ojos con sus pequeñas manos.
— En unos 5 minutos llegamos Carlitos. —le contesto con voz dulce.
