|Parte 18|

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Era a primera vez que lo veía con algo que no fueran unos Jeans, tenia que reconocer que se veía atractivo con un traje obscuro de seda y una camisa de color crema. El lleva un traje negro corto que había comprado en su escapada por New York; dejaba los hombros y las piernas al descubierto, y despertó la admiración de los hombres de la clase.

A pesar de todo, se sentía muy incomodo ante la mirada de Mauricio, sus ojos no dejaban de decirle que recordaba el beso que se habían dado en su auto, aunque ya habían pasado algunas semanas desde entonces; a Joaquín no le había resultado difícil olvidarlo, lo que lograba era su sentimiento de culpa.

Al terminar la clase, se dirigía un Nighclub que se encontraba cerca de ahí, en reaidad un viejo cine renovado, tenia una mesa reservada en la zona de los antiguos pasillos de cine, con vista al viejo patio de butacas convertidas en una pista de baile, había un gram montaje de luces y la música estaba tan alta que era imposible escuchar algo por encima del bullicio. En cualquier otra ocasión, había disfrutado del lugar. Los sitios a los que la llevaba Emilio eran mas refinados. Antes de su crisis matrimonial, había deseado muchas veces arreglarse su precioso cabello e irse a bailar toda la noche. Aquella era la ocasión

Mauricio se había sentado a su lado y quería monopolizar su atención. La música estaba tan alta que se veía obligado a inclinarse hacia el, con lo que no dejaba de rozar su cuerpo.

Mauricio empezó a tocarlo ligeramente del brazo, en los hombros, en las mejillas o en cabello. Joaquín se sentía incómodo con la situación, pero no sabía que hacer para liberarse de el sin provocar una escena. Se alegro cuando Mauricio lo invito a salir a bailar.

Al menos bailando no tendría porque tocarlo, no si bailaban de modo en que se bailaba en aquel lugar. Asi que dejo que lo condujera a la pista de baile. Pero una vez allí, lo estrecho entre sus brazos.

-No, Mauricio- dijo queriendo apartarse de su cuerpo

-No seas estúpido Joaquín, solo estamos bailando- no estaban solo bailando y el lo sabia. Después de unas semanas Mauricio había decidido dar un paso adelante para conquistarlo. Si no lo detenía, entonces, si seria culpable de traicionar a Emilio

-No- repitió Joaquín con firmeza, se soltó y se alejó de la pista

No debía de haber ido, después de aquel beso, no debió haber ido Mauricio lo deseaba, pero el no.

El solo deseaba a Emilio. Aquella certeza le dolió tanto que le daban ganas de llorar.

Mauricio fue tras el hasta el vestíbulo principal. El se daba cuenta de que lo seguía y se metió a al cabina telefónica para llamar a un taxi libre, todos a los que llamo estaban reservados.

Casi con desesperación llamo a su casa.

Se le hizo un nudo en el estómago al escuchar la profunda e impaciente voz de Emilio.

-Soy yo- dijo Joaquín con voz grave. Se hizo una larga pausa. Solo pudo escuchar la respiración de su esposo al otro lado de la línea.

-¿Qué ocurre?- dijo por fin

-No puedo volver a casa, es imposible encontrar un taxi.... ¿Qué hago?

Que fácil había sido volver a ser el mismo Joaquín de antes. El hombre indefenso que recurría a Emilio para resolver cualquier problema. Lo único que tenia que ser sentarse y esperar a que su marido encontrara la solución.

El silencio continuo. Joaquín agacho la cabeza; levantaba el auricular con fuerza como si eso le hiciera estar mas cerca de Emilio.

-¿No te va a traer tu Romeo?- dijo por fin

-¡No es mi Romeo¡. ¡Y además¡

Repentinamente cambio de opinión. No quería darle el placer de oir que no quería volver a ver a Mauricio ni en pintura.

-No quiero decirle que vaya en lo mejor de la fiesta solo porque estoy cansado ¿No puedes venir tu?

-¿y los niños? No querrás que los deje solos

-Ah- exclamo y volvió a sentirse como estúpido. No había pensado en ello. Al verse en problemas, lo único que se le ocurrió fue llamar al hombre que podía solucionarlos.

-Vaya, ahora el piensa que debió haber seguido mi consejo y contratar alguien que los cuidara- dijo Emilio burlonamente.

-Le diré a Mauricio que me lleve- Replico Joaquín

La cuestión de contratar una niñera para sus hijos era un punto de fricción entre ellos. Emilio quería una casa mas grande, personal de limpieza, una asistente y una niñera. Lo que Joaquín le habría gustado saber era que le quedaba a el si Emilio buscaba a otra persona para que les hiciera todo.

-Llamare a mi madre, vendrán mientras voy a buscarte- dijo Emilio cambiando repentinamente de opinión <<Celoso>>- supongo que la despertare, y no creo que le guste, aunque no la culpo pero..

-Oh, No- dijo Joaquín- no quiero que te molestes tanto, Mauricio me llevara.- dijo y colgó sin darle tiempo a Emilio para que respondiera.

-¿No ha habido suerte?- pregunto Mauricio apoyado en la pared. Joaquín no podía saber si había oído su conversación con Emilio, aunque poco le importaba.

-No- replico- tendré que esperar a que haya un taxi libre- dijo y se encogió de hombros para demostrarle lo contrario que estaba dispuesta a esperar lo que fuera necesario

-Yo te llevo- contesto Mauricio.

















Volvimos ✌🏽
Ya estamos de vacaciones lo que indica que mas actualizaciones

-Jen♡

Un Esposo Infiel- Emiliaco |Finalizada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora